Luis Velázquez/ Malecón del Paseo
Veracruz.- EMBARCADERO: La Academia de Cantarranas, que cada año suele entregar los Oscares de Veracruz, ha anticipado su dictamen, pues ante el nepotismo estelar resulta una grosería esperar tanto tiempo… Y es que en la cancha pública, la presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, CEDH, Namiko Matzumoto, se ha fregado a todos los Morenistas, campeones que eran de los cargos públicos para los hijos… En el caso, además del nepotismo puro, el amiguismo y el cuatismo, campeona de campeonas, jefa de jefas…
ROMPEOLAS: Por ejemplo, en su hoja de servicios, la Namiko dejó constancia de haberse “tirado al piso” de los duartistas, caso Arturo Bermúdez Zurita, como estrategia, digamos, cálculo frío y cerebral, para seguir en el cargo y bien… Luego, pasó a la CEDH y se fortaleció en la yunicidad, abanderando la causa de los desaparecidos, a tal grado que suele asistir a los desayunos de los Colectivos y hasta baila con las señoras… Ahora, en su dependencia manejan que en tanto su hijo es funcionario en la secretaría de Seguridad Pública, incorporó en cargos públicos con sueldazos a siete amigos de sus hijos… Incluso, a su nuera… El nepotismo, “en la plenitud del pinche poder” como decía aquel…
ASTILLEROS: Con tanto ejercicio patrimonialista del poder en la era Cuitláhuac pudiera escribirse que están creando una nueva corriente filosófica… Por ejemplo, el nepotismo del diputado local, presidente de la Mesa Directiva, ex priista, ex panista y ex perredista, José Manuel Pozos Castro, alardeando, igual que José López Portillo, del “orgullo de mi nepotismo”, uno de sus hijitos, subsecretario de Finanzas y Planeación, lo que, dijo, mil veces mejor a verlo por ahí de nini…
ESCOLLERAS: El ciudadano común que todos los días vive con sencillez creía que Pozos Castro era lo máximo del nepotismo a partir, digamos, de la defensa a ultranza del gobernador en gratitud… Pero entonces, llegó la secretaria de Trabajo y Previsión Social, la mismita que encarceló al cacique de Chicontepec, su enemigo a muerte, y reveló que buscó un profesional del Derecho para nombrarlo jefe de Amparos de la dependencia a su cargo y solo, bendito sea el Señor Todopoderoso, encontró a su hijita… Y el góber que le aplaude, la vitorea, la premia y avala con el nombramiento…
PLAZOLETA: Y cuando creíamos que habíamos visto todo, la capacidad del asombro llegó con Namiko, la académica e investigadora, ajá, de Tiempo Completo de la Universidad Veracruzana que acaso habría solicitado permiso, sin goce de sueldo, para el desempeño público… Y más, porque ya de por sí, la lista de familiares y amigos en la nómina de Cuitlalandia resulta inverosímil… Y todo aquello de que las figuras del nuevo gobierno en Veracruz son unos ángeles de la pureza es un fuego pirotécnico, una farsa, “tomadura de pelo”, payasada… Todo indica que son iguales o peores que los priistas y los panistas… El poder, ejercido con sentido patrimonialista…
PALMERAS: La rebatinga por el poder suele crear muchas locuras… El sacerdote José Alejandro Solalinde Guerra, por ejemplo, cargando al Niño Dios del Siglo XXI con la carita de AMLO… La escritora y cronista, Elena Poniatowska, mirando el cielo hablando con su señora madre, Q.E.P.D., diciéndole que en México vivimos en el paraíso terrenal gracias a AMLO… Pero en contraparte, los Morenistas en Veracruz, anexos y conexos, camaleones algunos en su ideología, imponiendo a los hijos y amigos en cargos públicos, igual que cuando Plutarco Elías Calles nombrara a un hijo gobernador de Nuevo León y al otro, diputado federal y Ministro de Estado…