CIUDAD DE MÉXICO (CNNExpansión) – El asesinato de Luis Donaldo Colosio, ocurrido el 23 de marzo de 1994 en Lomas Taurinas, Tijuana, generó una fuerte crisis política y económica en México, y en esas fechas ocurrieron otros eventos que la agudizaron: el asesinato de Francisco Ruiz Massieu, entonces presidente del PRI; el levantamiento del EZLN y la fuerte devaluación del peso frente al dólar.
Esto fue lo que sucedió en los mercados financieros y la actividad económica tras el asesinato del entonces candidato presidencial.
- Peso
El martes 23 de marzo de 1994, día del asesinato, el tipo de cambio se ubicó en 3.3350 unidades por dólar. El día 24, el Gobierno federal, encabezado por el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari, determinó que los mercados accionario y de divisas se mantuvieran cerrados en el país.
El 25 de marzo, el dólar interbancario registró una baja de 0.70%, para ubicarse en 3.3586 pesos.
En ese año, el tipo de cambio estaba controlado por el Banco de México y la Secretaría de Hacienda.
- Bolsa mexicana
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) se ubicó en las 2,543.10 unidades el día en que asesinaron a Colosio.
El 25 de marzo, el mercado bursátil cae a 2,520.90 unidades.
- Cetes
El rendimiento de los Certificados de la Tesorería de la Federación (Cetes) a 28 días se ubicó en 9.39% en la subasta del 17 de marzo, una semana antes de la muerte del político.
En la siguiente subasta, realizada el 24 de marzo, un día después del atentado, el rendimiento de los Cetes cayó a 9.34%.
- Reservas internacionales
El día en que murió Colosio, las reservas internacionales se ubicaron en 28,321 millones de dólares.
El 24 los mercados se mantuvieron cerrados, y el 25, las reservas bajaron a 27,387 millones de dólares.
La pérdida acumulada de reservas desde el asesinato de Colosio hasta el 21 de abril de ese año alcanzó 10,387 millones de dólares.
- Producto Interno Bruto
El año en que murió Colosio, la economía mexicana registró un crecimiento de 4.75%, sin embargo, un año después el PIB registró una caída de 5.72%, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
Esto, debido al llamado “efecto Tequila”, una crisis causada porque la moneda estaba sobrevalorada, es decir que, el dólar era “barato” frente a la moneda nacional, debido a que el Banco de México, dirigido entonces por Miguel Mancera, intervenía en el tipo de cambio.
La crisis también se explica porque durante la década de los 80 y principios de los 90, México recibió un fuerte flujo de capitales debido a que las tasas de interés eran bajas en Estados Unidos y porque el país tenía bajas restricciones para la entrada de capitales.
Sin embargo, los inversionistas nacionales y extranjeros sacaron su dinero del país a finales de 1994 para invertirlo en otros países, debido a la incertidumbre que causaron los acontecimientos políticos y económicos en el país.
El miércoles 30 de marzo salieron del país 1,231 millones de dólares, según dio a conocer la revista Nexos en 2014. Los mercados cerraron de nuevo el jueves y viernes por la Semana Santa.
La devaluación del peso -que se dio durante los primeros días del Gobierno del presidente Ernesto Zedillo y fue conocida como el “error de diciembre”-, desencadenó una serie de acontecimientos que causaron alzas en las tasas de interés y obligaron al Gobierno a pedir miles de millones de dólares en asistencia financiera al Tesoro de Estados Unidos y a organismos multilaterales.
El entonces secretario del Tesoro de EU, Robert Rubin, tuvo que hacer frente a esta crisis financiera. Junto con su subsecretario, Larry Summers, fueron los artífices del paquete de rescate que otorgó la administración Clinton por 20,000 millones de dólares, más otros 30,000 millones de ayuda internacional que requirió México para amortiguar la crisis que obligó a establecer un sistema de libre flotación.
Con información de CNNExpansión, Reuters y la Revista Nexos.