Carlos Salinas de Gortari al terminar su mandato decidió divorciarse de Cecilia Occelli y casi de manera inmediata contrajo nupcias con Ana Paula Virginia Gerard, a quien supuestamente conoció desde 1983 cuando el ex presidente daba clases en el ITAM, sin embargo, lo que sí está confirmado es que durante su sexenio, ella fue secretaria técnica del Gabinete Económico de la Presidencia.
Durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, el empresario Jerónimo Gerard Rivero, hermano de Ana Paula Virginia Gerard, armó una red muy completa de influencias, tanto políticas como privadas, de manera muy hábil se integró a grandes empresas internacionales, lo que le permitió construir relaciones importantes con los más selectos fondos de inversión extranjera, todo esto, a pesar de que el Presidente aún no era su cuñado y supuestamente “no había vínculos”.
Como una gran telaraña que está por cumplir 30 años, un selecto grupo de capital privado ha tenido posiciones estratégicas dentro y fuera de la oficina presidencial, aunque lo más relevante ha sido el acceso a la información confidencial y a la influencia en las grandes reformas estructurales que repercuten en las negociaciones estratégicas de los que amasan grandes fortunas.
Jerónimo Gerard fundó en 2009 la empresa Infraestructura Institucional, con la cual participó en proyectos públicos como la autopista Tapachula-Talismán con ramal a Ciudad Hidalgo, el paquete carretero Michoacán y el Hospital Regional de Alta Especialidad de Zumpango, obra de la cual tomó parte Armando Hinojosa Cantú, el dueño de Grupo Higa, cuando Peña Nieto era gobernador del Estado de México.
Con los contados contratos obtenidos durante cinco años y con un “modesto capital” de 75 millones de dólares, Jerónimo Gerard da un vertiginoso y casual giro en 2014 para crear Sierra Oil & Gas, en esta aventura se le unieron dos fondos de inversión: el estadounidense EnCap Investments LP y el británico Riverstone, ambos con 225 millones de dólares.
No me lo va a creer estimado lector, pero en julio de 2015, Sierra Oil & Gas anunció que junto con Talos Energy LLC, de Estados Unidos, y Premier Oil PLC, de Gran Bretaña, era el primer consorcio, encabezado por mexicanos, que ganaba la licitación pública internacional CNH-R01-L01/2014 de la Ronda Uno de licitaciones, en sus bloques 2 y 7, para la exploración y extracción de hidrocarburos en aguas someras.
En un claro intento por empezar a cubrir huellas, o al menos eso parece, tres meses después de haber ganado la licitación, Infraestructura Institucional, figura accionaria de Jerónimo Gerard dentro de Sierra Oil & Gas, fue adquirida por BlackRock, uno de los mayores fondos de inversión internacionales.
En su momento, Sierra Oil & Gas reconoció contar con el aval financiero de Infraestructura Institucional, “un fondo mexicano público”, como inversionista minoritario, pero que éste había sido adquirido por BlackRock, “el fondo de capital privado más grande del mundo”, desmarcándose de manera tajante y obvia del cuñado de Salinas, Jerónimo Gerard.
¿Pero de qué nos sirven tantos datos y tanta trama que parece sacada de una telenovela?
El pasado 12 de julio muy probablemente usted leyó titulares como éste:
“Se sacan la lotería encontrando nueva reserva petrolera”.
Resulta que la primera exploración realizada por una empresa petrolera privada en aguas profundas mexicanas tuvo mayor éxito del que cualquiera pudiera haber anticipado, empezando porque fue en aguas someras.
Y el afortunado consorcio ganador del premio gordo fue el encabezado por la brillante compañía independiente Sierra Oil & Gas, quien con bombo y platillo anunció que se había descubierto un yacimiento de petróleo frente a las costas de Tabasco, cuyas reservas están estimadas entre los mil 400 y dos mil millones de barriles, muy por encima de las expectativas.
El Pozo Zama 1 que se localiza en el Bloque 7, es el resultado de la perforación realizada desde el pasado 21 de mayo a 60 kilómetros y medio del puerto de Dos Bocas, a una profundidad de 166 metros.
La empresa destacó que este hallazgo se trata del primero derivado de la Reforma Energética impulsada por el Gobierno Federal.
Tim Duncan, presidente de Talos que también está en el consorcio, destacó que este descubrimiento es de igual importancia como cualquier anuncio realizado en aguas profundas del Golfo de México en el lado estadounidense, sin embargo la gran diferencia es que este pozo se encuentra en aguas someras, lo cual disminuye de manera importante sus costos de operación, además de representar un activo que va a estar produciendo para el país por décadas.
El director general de Sierra, Iván Sandrea expresó su satisfacción con el resultado y se mostró listo para continuar con la exploración en el Bloque 7, destacando que las compañías que forman parte de este consorcio reúnen en conjunto “capacidades técnicas especializadas, cientos de años de experiencia en la industria petrolera, y solidez financiera”.
“Este primer resultado es muy alentador para Sierra, para nuestros socios, pero sobre todo para México”, puntualizó Sandrea, no es para menos pues se estima que han invertido en este proyecto hasta el momento alrededor de 40 millones de dólares.
Según se explicó, el gobierno de México, en teoría, se quedará con casi el 67 por ciento de utilidad operativa por cada barril que se produzca, además de cerca del 80 por ciento si se toman en cuenta cuotas contractuales e impuestos.
Para la oposición, la algarabía que se ha montado alrededor de este descubrimiento es sólo una muestra más de la simulación, la burla y el engaño, pues PEMEX ya sabía de su existencia.
Rocío Nahle, coordinadora de los diputados de MORENA, fue muy enfática al asegurar que lo único que hizo el gobierno federal fue poner en subasta los yacimientos de los que PEMEX sabía de su existencia pues ya estaban catalogados en el archivo geológico estratégico de la empresa.
Jerónimo Gerard además de ser cuñado de Carlos Salinas de Gortari, también es consejero de la Bolsa Mexicana de Valores y miembro de varios consejos de administración en los ramos automotriz, de construcción, de finanzas y telecomunicaciones, además del Grupo Mexicano de Desarrollo y sería bueno también acotar, que es cuñado del actual director General de PEMEX, José Antonio González.
Como dato adicional, un tanto curioso pero, sin desperdicio…
El otro cuñado de Salinas de Gortari y hermano de Jerónimo, Hipólito Gerard, sigue prosperando en el ramo de la construcción y juega en las grandes ligas.
Para muestra basta un botón, ganó, por ejemplo, la licitación para construir la Pista 3 del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México en consorcio con CICSA, de Carlos Slim; La Peninsular, de Carlos Hank Rohn, y Prodemex, de Olegario Vázquez Raña.
¡Saque usted sus propias conclusiones!
*Con información de Proceso.