Redacción El Piñero
Oaxaca.- En el año 2020, el Gobierno de México encabezado por Andrés Manuel López Obrador, a través de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) anunció el operativo internacional “Agave Azul”, trabajo coordinado con la Administración para el Control de Drogas (DEA por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos, con el que se realizó el bloqueo de cuentas de 1,939 sujetos vinculados al Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), el Estado de Oaxaca no fue la excepción y si vio involucrado el actual candidato al Senado de la República por el partido Morena, Antonino Morales Toledo, protegido del Gobernador Salomón Jara, sin embargo, el Gobierno de México ya no le dio continuidad, a 4 años del inicio del operativo no hay personas detenidas.
La UIF trabajó de manera coordinada con la Administración para el Control de Drogas en la definición de los objetivos de dicho operativo, con lo que se logró ubicar a un gran número de integrantes de dicho grupo criminal, así como a sus mayores operadores financieros y empresas utilizadas en el blanqueo de capitales, en el caso de Oaxaca, la investigación fue abandonada, eso no quita que Antonino Morales Toledo esté señalado de tener nexos con el crimen organizado.
Morales Toledo, es originario de San Blas Atempa, en la región del Istmo, donde fue presidente municipal en dos ocasiones, presuntamente apoyado por dinero ilícito financiado por René Bejarano desde el año 2013, fue edil por primera vez de San Blas Atempa en el 2014, Morales Toledo ha sido vinculado al narcotráfico y huachicoleo, también fue señalado como el principal financiero de la campaña de Salomón Jara Cruz a la gubernatura, eso lo llevó a ser Secretario de Administración y actualmente candidato al senado de la república por Morena, a su paso por la Secretaría de Administración sólo se dedicó a realizar proselitismo político en las giras del gobernador, abandonando sus funciones.
En el año 2019, la Fiscalía General de la República (FGR), abrió la carpeta de investigación FED-OAX-SC-0001548-2019, en donde se acusó a Morales Toledo de sustraer combustible de manera ilegal del ducto que pasa por su propiedad. Además de que se auto-compraba el combustible para el municipio de San Blas Atempa, al concluir las investigaciones, el Ministerio Público federal determinó que no existía acción penal en su contra, sin embargo, la carpeta quedo en resguardo y cuyo delito prescribirá en abril del 2034.
En el año 2020, la UIF congeló las cuentas de Antonino Morales, no sólo las cuentas municipales, también personales, bajo la sospecha de estar vinculado con el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), por solicitud del gobierno estadounidense y como parte de la investigación internacional “Agave Azul”, en el operativo, la UIF se dedicó a ubicar a personas a través de bancos financieros a los que se tiene acceso, por lo que fueron descubiertas 10 de 32 entidades federativas en donde operan los “soldados financieros” del CJNG, de acuerdo a lo publicado por el diario alemán Deutsche Welle (DW).
El nombre de Antonino Morales fue ligado en dicha investigación, junto a Eduardo Cervantes Aguilar, entonces alcalde de Ixtlahuacán y Mónica Marín Buenrostro, ex-alcaldesa de la comunidad El Grullo, ambos del Estado de Jalisco, sin embargo, semanas después le fueron liberadas sus cuentas al actual candidato al Senado de la República, las empresas y políticos ligados a este grupo criminal realizaron operaciones financieras “inusuales” por 2.251 millones de pesos (105 millones de dólares), operaciones financieras “relevantes” por 11.478 millones de pesos (532 millones de dólares) y transferencias internacionales de 3.178 millones de pesos (148 millones de dólares).
A pesar de todos esto y de pregonar un combate a la corrupción, Salomón Jara, ha protegido a Antonio Morales, hasta convertirlo en candidato al Senado de la República y un fuerte aspirante para que no suceda en el próximo Gobierno Estatal, de manera indirecta, esto demuestra que Salomón Jara también estaría involucrado con células del crimen organizado con presencia a nivel nacional e internacional que habrían financiado su campaña al Gobierno de Oaxaca.
Sin embargo, la última decisión la tienen los ciudadanos al emitir su voto el próximo domingo 2 de junio, para evitar que este tipo de personas con dudosa moral ocupen cargos de elección popular de gran envergadura, los cuales utilizan para beneficio propio en lugar de ayudar al pueblo mexicano, y en este caso en específico a los oaxaqueños.
