Francisco Vásquez
Oaxaca, México.-Oaxaca es eminentemente turístico, gracias a su inmensa riqueza cultural conformada por edificios históricos y maravillas gastronómicas, las cuales llenan de vida a una ciudad que mantiene ligada su economía a la calidez con la que recibe a sus visitantes de todas partes del mundo.
El 11 de diciembre de 1987, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés) declaró al Centro Histórico de la ciudad y a la zona arqueológica de Monte Albán como Patrimonio Cultural de la Humanidad, lo cual refrenda el atractivo y la magia que envuelve a Oaxaca.
Este cuenta con una superficie de cinco kilómetros cuadrados, 247 bloques y mil 200 monumentos de la arquitectura civil y religiosa, las costumbres ancestrales y tradiciones que se desarrollaron durante más de cuatro siglos.
Autoridades y ciudadanos comparten la responsabilidad de su preservación, debido a que los edificios que alberga son un referente arquitectónico y los parques públicos forman parte de una memoria colectiva que los oaxaqueños han forjado de generación en generación.
Sin embargo, aunque la Unesco menciona que Oaxaca “constituye una excelente muestra del urbanismo colonial español y la solidez y volumen de sus edificios son verdaderas obras de arte de la arquitectura”, en la actualidad es evidente el abandono en el que se encuentran.
El panorama puede resultar desalentador para cientos de visitantes nacionales e internacionales que llegan a Oaxaca con la intención de disfrutar de la cultura ancestral, pues tan pronto se pone un pie en el andador, o en las banquetas de la capital, este da cuenta del deterioro a causa del descuido e indiferencia que arrebata el valor a la esencia de una ciudad colonial.
La cantera verde, los edificios monumentales, parques y jardines han sido testigos fieles de administraciones que carecen de un proyecto integral, rebasadas por intereses de grupos y la apropiación de espacios públicos, sin que hasta la fecha se logre un consenso y la suma de voluntades que permita al turismo y a los propios oaxaqueños disfrutar del Centro Histórico y apuntalar la economía local.
Monumentos y parques
Dentro del Centro Histórico se encuentran cerca de mil 200 monumentos catalogados de arquitectura civil y religiosa, los cuales en su mayoría han sido víctimas de la omisión institucional y apatía ciudadana.
Entre ellos podemos destacar el teatro Macedonio Alcalá, el templo y exconvento de Santo Domingo de Guzmán, el Paraninfo universitario, la Catedral, el complejo arquitectónico de La Soledad catalogados por incalculable valor histórico y su gran belleza que cuentan con el respaldo internacional para su conservación.
La realidad nos muestra también a un edificio de Palacio de Gobierno, convertido en rehén de protestas permanentes que los responsables de la política interna no han podido desactivar, además de servir como tianguis donde se expenden variedad de productos artesanales.
El imponente Edificio Central de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales reconstruido de 1899 a 1901 en el periodo del romanticismo europeo, ubicado en la parte noreste de la Alameda de León, que ha sido dañado por la mano del hombre y actualmente olvidado por las autoridades académicas y gubernamentales.
El monumento a Juárez en Viguera, inaugurado en 1997 y que luce descuidado, el monumento que se edificó en el Cerro del Fortín en 1857 como homenaje de la niñez mexicana al Benemérito de las Américas, al igual que la plaza donde se encuentra que también es un mirador y que desde ahí se observan todos los puntos de la ciudad, actualmente es una zona insegura a causa del abandono de sus mismos dueños.
El parque del Monumento a la Madre, al que un grupo de personas han intentado rescatar debido a la invasión y el peligro inminente de ser convertido en un distribuidor vial, el monumento a Emiliano Zapata que se localiza en el boulevard Eduardo Vasconcelos que se mantiene alejado del ojo gubernamental, entre muchos más que forman parte de la lista interminable de tesoros de los oaxaqueños.
A través de un simple recorrido se puede constatar la negligencia que prevalece en los parques y jardines que se encuentran invadidos por el comercio informal quienes a toda costa se apoderan de la vía pública impidiendo el disfrute de caminar sobre calles despejadas.
Algunos de estos espacios datan del siglo XVI hasta nuestros días, aunque otros se han construido recientemente como es el parque del Cerro del Fortín, el parque recreativo infantil de Oaxaca Bicentenario, el Jardín Sócrates, que se ubica junto a la Plaza de la Danza donde se establecieron vendedores de nieves y diversos productos, el Jardín de El Pañuelito, que se localiza en el corredor turístico pero que es usado como pequeño mercado por ambulantes.
También el Jardín Conzzati, caracterizado por una vasta vegetación, el Paseo Juárez El Llano que desde la época colonial fue utilizado como área social y en su momento fue zoológico de la ciudad, donde se encuentran algunos leones que flanquean las entradas y que tiene en su centro un monumento al Coloso de Guelatao, este se ha convertido en un mercado, que resiente afectaciones en su arbolado histórico, además de ser una zona insegura.
El Parque del Amor que se ubica en un extremo del puente IV Centenario, con un alto índice delictivo, invadido en su totalidad por grupos de comerciantes y personas con problemas mentales, de alcoholismo y drogadicción, donde por el tránsito de vehículos se ha convertido en un lugar contaminado que ha desaparecido las áreas verdes.
Es de resaltar el Jardín Antonia Labastida que padecía la presencia de ebrios y jóvenes drogadictos, convertido en un basurero y refugio para personas en situación de calle, hoy en día ha sido rescatado por un grupo de activistas que tuvieron que enfrentarse hasta con la propia autoridad para darle otra cara a este espacio público.
Al rescate
En entrevista, Markoa Vásquez reconocido artista plástico oaxaqueño señaló que urge rescatar y dignificar los espacios públicos para lograr una capital sana, que proponga a la humanidad áreas verdes y se debe empezar a trabajar desde ahora.
Resaltó que se deben iniciar acciones preventivas para evitar que más espacios caigan en manos de agrupaciones que se apoderan de los parques y jardines, “vemos el ambulantaje, a jóvenes que se drogan en cada espacio, no vamos a esperar a tener un segundo parque del amor, asaltado por los comerciantes organizados”.
El activista refirió que desde febrero de 2017, respaldado por un grupo de ciudadanos emprendió una serie de actividades a fin de rescatar diversos espacios públicos como el Cerro del Fortíndonde emprendió una campaña de recolección de basura y la colocación de letreros a fin de generar consciencia entre los cientos de personas que lo visitan diariamente.
Iniciaron con eventos culturales, como exposiciones pictóricas, talleres de reciclaje, cursos de lectura, conciertos de música tradicional, entre otros, un ejemplo de ello es el rescate del Jardín Antonia Labastida, al que los artistas le denominaron Jardín del Arte Antonia Labastida.
Explicó que actualmente más de ochenta pintores se reúnen los fines de semana para realizar actividades tendientes a promover este espacio público y pasó de ser un punto de reunión para bebedores consuetudinarios, jóvenes con problemas de adicción, que lo habían convertido en un foco de infección y hasta en centro nocturno donde se ejercía la prostitución, a ser una galería a cielo abierto.
“Oaxaca siendo referente a nivel nacional e internacional, requiere un espacio del arte donde todos los jóvenes puedan exponer su obra libremente sin caer en el asalto, el saqueo que algunas galerías oportunistas hacen con los jóvenes con un extraordinario talento”.
“El jardín del arte es una gran oportunidad para los futuros pintores, músicos, literatos, la idea es que ahí converjan, que se reúnan todas las disciplinas de las bellas artes y el ciudadano común que se siente cohibido de entrar a una galería pueda apreciar el arte en esta galería a cielo abierto”, afirmó.
Monumento a la Madre: foco rojo
El artista plástico señaló que el parque localizado a un costado de la carretera federal 190 para ingresar al Cerro del Fortín o hacia la calzada Madero, donde se encuentra el Monumento a la Madre, es un foco rojo que necesita ser rescatado.
“Es uno de los parques más bonitos que puede tener Oaxaca y su entrada principal, no podemos recibir a nuestros turistas con un parque abandonado, el monumento a la madre corre un gran riesgo y en todos los ciudadanos reposa la responsabilidad de no permitir que se construya un estacionamiento o un proyecto vial”.
Ello debido a que a través de denuncias ciudadanas se sabe que las autoridades pretenden convertir esta área en un estacionamiento, lo que ha provocado que los vecinos de las colonias aledañas se organicen y promuevan el rescate del que consideran la entrada principal de Oaxaca.
A través de un esfuerzo conjunto, Markoa Vásquez menciona que con recursos propios han logrado limpiar la mayor parte del grafiti en la fuente donde se ubica el monumento a quienes dan la vida y fungen como pilar fundamental de la familia, por lo que exigirán a las autoridades que se active la fuente que lleva más de 20 años sin funcionar y se instale iluminación para garantizar la seguridad de quienes acudan a disfrutar de este pulmón de la ciudad.
Se han organizado para llevar a cabo labores de limpieza y campañas de reforestación, a fin de regresarle la vida a un espacio que es utilizado como estacionamiento por personas que acuden al estadio del Instituto Tecnológico de Oaxaca, como zona de reunión de drogadictos o sitio de delincuentes.
“Los jóvenes exigen y requieren espacios culturales donde puedan participar y sacar toda esa energía que tienen, al no darle esos espacios ellos optan por manchar la cantera y nuestros espacios públicos”.
“Por dignidad tenemos que rescatar este espacio para tener una mejor calidad de vida y enseñarle a nuestras futuras generaciones que tenemos que ayudar a las autoridades a darle solución a los problemas que nosotros mismos hemos creado”, aseveró.
Continuó diciendo que las áreas verdes no están hechas para tianguis pues los árboles son seres vivos y por ende sienten la violencia y el maltrato hacia ellos, que la ciudadanía debe ser respetuosa y terminar con esa tendencia de autodestrucción, porque dañar un área verde es atentar contra la vida de la especia humana.
El activista advirtió que la sociedad civil organizada no permitirá que se mueva una piedra o se arranque un solo árbol de este parque donde se encuentra el Monumento a la Madre para convertirlo en un proyecto que sólo beneficiará a intereses de particulares.
“Somos más de 36 mil capitalinos y no podemos permitir que un grupo de cien personas decida nuestro destino, queremos áreas verdes y no permitiremos que atenten contra el patrimonio de los oaxaqueños, debemos entenderlo no como un acto de propiedad, pero si como un acto de identidad”.
Sin embargo, confía en que la nueva administración del municipio de Oaxaca de Juárez de muestras de sensibilidad y no permita que persista el abandono, la invasión y el deterioro de los espacios públicos en la capital.
Atención al arbolado urbano
De acuerdo al coordinador del Colectivo de Organizaciones Ambientalistas de Oaxaca (COAO), Nazario García Ramírez, el estado es el más biodiverso del país, que por el desatino, la falta capacidad y voluntad de las autoridades los parques y espacios verdes lucen un aspecto muy deteriorado.
En entrevista sostuvo que los parques han sido creados con el espíritu de generar el bienestar familiar, pero por desgracia, son espacios que pretenden ser invadidos por tianguistas o simplemente se encuentran en el abandono.
Explicó que a raíz de ello, el 90 por ciento del arbolado urbano de Oaxaca de Juárez padece la invasión de plagas que acaban con todas las especies históricas como es el caso de El Llano que cuenta con dos árboles, el higo de Guadalupe y un laurel de la India considerados dentro del catálogo de 27 árboles emblemáticos de la capital.
“Estos árboles necesitan un trabajo de recuperación, lo que se ha hecho no es suficiente, el Llano es un pulmón principal y parque emblemático de Oaxaca y no debe ser utilizado ni por la feria del mezcal ni por ninguna otra feria, ya que montan este tipo de actividades y vienen a dañar el patrimonio natural de los oaxaqueños”.
El colectivo de ambientalistas que representa ha participado en diversas actividades de rescate y llamado de atención a las autoridades como fue brindar un tratamiento al Laurel del Zócalo, que poco a poco se va recuperando, ya que a juicio de los expertos, si no se intervenía corría el riesgo de caerse en el lapso de un año.
Afirmó que como ambientalistas sumarán esfuerzos con la nueva administración para el rescate de los parques siempre y cuando se haga en un marco de respeto, “que se le dé a conocer a la ciudadanía los trabajos que se tienen que hacer y porqué”.
Recientemente se reunieron con el munícipe capitalino, de quien reconocen la apertura con el colectivo de organizaciones ambientalistas, por lo que esperan que se cumplan las promesas que se hicieron y sobre todo los acuerdos a los que se llegaron como la atención urgente a todos los parques, pues todos acusan los mismos problemas de invasión.
Habrá planificación
Por su parte, Pavel López Gómez, regidor de Imagen, Desarrollo Urbano y Obras Públicas y de Centro Histórico y Patrimonio Mundial, del municipio de Oaxaca de Juárez,en entrevista afirmó que hay una plena disposición de esta administración entrante para lograr el rescate de los espacios públicos en la capital.
El funcionario resaltó que el gobierno que encabeza Oswaldo García Jarquín pretende dignificar no sólo los espacios públicos que se encuentran en el Centro Histórico, sino también reactivar los pequeños parques que hay en las agencias y colonias del municipio.
“Un ejemplo de ello es que no se permitió la instalación del comercio ambulante en el Llano y seguramente se va a mantener así durante los próximos tres años, estamos construyendo junto con varias organizaciones una planificación para tener espacios públicos dignos”.
En ese sentido afirmó que dicho proyecto será contemplado dentro del Plan Municipal de Desarrollo que se presentará en marzo de este año, “vamos por el rescate de los espacios públicos tanto turísticos como de las colonias de la capital, ese es el planteamiento del presidente”.
Respecto al Monumento a la Madre, puntualizó que en caso de existir algún tipo de planteamiento por particulares para la construcción de un proyecto vial, este tendrá que ser consultado con la ciudadanía, a fin de garantizar un gobierno abierto con acciones de beneficio colectivo.