- Derechos humanos
Barandal
Luis Velázquez
Veracruz.- ESCALERAS: Los dos son panistas. Uno, panista puro. El otro, expriista, reclutado en el PAN. Ambos, sin embargo, con la misma filosofía de vida. Ricos y triunfadores, digamos, en política, miran y tratan a los demás con desdén. Desde la soberbia que suele dar el dinero. Y el poder político. La dignidad humana les vale.
Primer caso:
En rueda de prensa, Julen Rementería, candidato a Senador de la República, ofende y humilla a un reportero que le cobra un convenio publicitario signado y operado desde un año anterior.
Ex director de Comercio, ex alcalde, ex diputado, ex coordinador de los Centros SCT en el Felipismo, exsocio en compañía constructora del ex panista Rafael Acosta Croda, ex secretario de Infraestructura y Obra Pública en la yunicidad, Julen le ofrece un sobrecito con 5 mil pesos.
“No hay más” le refiere.
La humillación en todo su esplendor. Se cumple así el proverbio bíblico. “Que nunca los demás te agarren por hambre”. Así, al menos, lo piensa y siente el candidato panista.
Dueño de la pelota, senador que ya se cree,
Lo decía su ex socio, “El loco”, cuando era diputado federal. “Los reporteros son unos muertos de hambre”.
Lo reproduce con su filosofía de vida el candidato azul.
PASAMANOS: Segundo caso:
En el sur de Veracruz, el cacique de Las Choapas, Renato Tronco, renunció al PRI. Entonces, se cobijó en el PAN. Y lo ungieron candidato a diputada federal. Y a un hermano, candidato a diputado local. Y a una sobrina, parece, candidata al Congreso de Veracruz.
En el carril de MORENA va de candidata, Tania Cruz Santos.
El 12 de mayo, los candidatos tuvieron un encuentro.
Y desde su riqueza económica, acostumbrado a hacer y deshacer en su vida, dueño que se cree del día y de la noche, quizá hasta del destino de los demás, Renato Tronco la ofendió y la humilló.
En vez del argumento social y económico en el debate, la grosería lasciva.
“Todavía no sabe Tania lo que mi lengua es capaz de hacer. Si supiera…”.
Simple y llanamente, violencia de género, dijeron los legisladores de MORENA, Rocío Pérez, Guadalupe Osorno, Lourdes García, Angélica Pineda, Amado Cruz, Zenyazen Escobar e Isaías Pliego.
Siete diputados en defensa de la candidata a la curul federal en un Veracruz con dos Alertas de Género y en donde, no obstante, la violencia continúa traduciéndose en feminicidios.
CORREDORES: Javier Duarte y los suyos están acusados por la yunicidad, primero, del saqueo al erario. Segundo, de la desaparición forzada de personas y cadáveres. Tercero, del desvío de recursos. Cuarto, de enriquecimiento ilícito.
Entre otras cositas.
Pero el sexenio anterior también se caracterizó por la soberbia, la prepotencia, la petulancia y el menosprecio a la población.
Incluso, y lo peor, a los familiares de las personas desaparecidas, secuestradas, asesinadas y sepultadas en fosas clandestinas.
Todos ellos se excedieron en el ejercicio del poder.
Se burlaban de los demás y del sufrimiento y el dolor ajeno.
El atropello a los derechos humanos fue atroz, sórdido, siniestro e incalculable.
Por eso, resulta inverosímil que ahora los panistas como Julen Rementería y Renato Tronco reproduzcan el mismo estilo de ejercer el poder.
Y lo más grave, crean ellos, estén seguros, de que les asiste la razón.
Iguales, igualitos, fueron los duartistas.
RODAPIÉ: Un historiador refiere el tiempo de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano como jefe de Gobierno en la Ciudad de México.
Escribe, por ejemplo, que todos los burócratas, sin excepción, reconocían en Cárdenas el extraordinario trato humano a los demás.
“Nadie nos ha tratado con tanta decencia” dijo una secretaria.
Incluso, se sabía los nombres de muchos de ellos de memoria.
Y cuando se acercaba a saludarlos siempre les llamaba por su nombre y les preguntaba sobre sus hijos y familia.
Lleno de cortesía y amabilidad.
Con un profundo, inalterable respeto a la dignidad humana.
Sin nunca, jamás, hacer sentir que era el jefe de Gobierno y tenía “el chirrión” por la mano.
Sin ningún asomo de prepotencia. Y de altivez perdona-vidas.
BALAUSTRES: Julen y Renato se sienten paridos por los dioses. Por eso actúan así.
Apenas son candidatos. Trepados en las valencianas del gobernador Yunes, sólo conocidos en sus pueblos, ya se verá si ganan en las urnas.
Y si ahora como candidatos su comportamiento es tal, podrá el ciudadano vislumbrar su conducta en caso de sentarse en el Congreso de la Unión.
Mucho se duda del bienestar social que han generado y sembrado en su vida pública. Por desgracia para ellos, son más los escándalos en que han estado involucrados.
CASCAJO: En vez de civilidad democrática, algunos candidatos apuestan al discurso racial, lleno de injurias y ditirambos, ofensas, el pitorreo, creyendo que la población electoral los mirará con simpatía.
Hay, dice el coordinador del Grupo Legislativo de MORENA, Amado Cruz Malpica, violencia política, violencia de género y violencia institucional (La Jornada, 16 de mayo).
Y en el caso de Julen y Renato pareciera que el trío de violencias se conjunta para lanzar denuestos al colega reportero y a la candidata a diputada federal.
Por lo pronto, MORENA ha solicitado a la autoridad aplique el Protocolo para la Atención de la Violencia Política Contra las Mujeres, temerosa de que Renato Tronco pierda los estribos.