El ambystoma mexicanum es capaz de reconstruir las conexiones entre los nervios y reconectar la médula lesionada
El ajolote endémico de México –ambystoma mexicanum– ha sido objeto de diversas investigaciones debido a su capacidad de regeneración, además de que comparten mucho del material genético ADN que los humanos. Esto podría ser la clave para ayudar a que las personas parapléjicas recuperen algunas de sus funciones, señala un nuevo estudio.
De acuerdo con Karen Echeverri, profesora asistente del departamento de genética, biología y desarrollo celular en la Universidad de Minnesota, “los humanos tienen una capacidad de regeneración muy limitada, mientras que los ajolotes tienen una notable capacidad de regenerar funcionalmente las extremidades, el tejido cardíaco e incluso la médula espinal después de una lesión“.
Por lo cual, el ADN o material genético del ambystoma mexicanum o ajolote podría contener el genoma que ayude a desarrollar una solución crucial para que las personas parapléjicas o con parálisis puedan volver a caminar.
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Regeneración del ajolote vs paraplejía
Con este estudio, publicado en la revista Science Daily, los investigadores han podido identificar y determinar qué impide que se reproduzca en los seres humanos la inusual capacidad de recuperar órganos y funciones del cuerpo propia del ajolote.
Este hallazgo es de gran valor para personas parapléjicas debido a que con base en el material genético del ajolote mexicano se podrían diseñar nuevas terapias para las lesiones de médula espinal u otras enfermedades neurodegenerativas, con el fin de recuperar capacidades motoras, como caminar.
El ambystoma mexicanum es capaz de reconstruir las conexiones entre los nervios y reconectar la médula lesionada, gracias a la generación de células gliales, auxiliares en el sistema nervioso.
Tanto los ajolotes como seres humanos producen un juego de proteínas que tienen injerencia en este proceso, sin embargo, a diferencia de los anfibios, las personas no podemos volver a generar la proteína denominada c-Fos, indispensable para el funcionamiento de la proteína c-Jun, crucial para la cicatrización.
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Cuando una persona sufre un traumatismo de igual gravedad, las células gliales forman un tejido cicatricial, algo que impide que los nervios se vuelvan a conectar entre sí, por lo que si los científicos hallan una terapia que ayude con la re-conexión de las extremidades con la médula espinal, podrían ser capaces de ayudar a la recuperación de personas parapléjicas. Todo ello gracias a la capacidad de regeneración del ambystoma mexicanum o ajolote mexicano.
Con información de Eldeber, Eldictamen Cinvestav y Nature/ sumedico.com