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Al denunciar una dilación y trabas burocráticas en la reapertura de su establecimiento, el comerciante Jesús Guillermo López Ruiz acusó la existencia de intereses detrás de la clausura de su empresa por parte del Ayuntamiento de Xalapa.
El dueño de una negociación de frutas y verduras en la esquina de Revolución y Manuel de Boza, en La Rotonda, acudió a protestar junto con sus trabajadores a Plaza Lerdo ante el retraso de la Subdirección de Comercio para suspender la acción de cierre realizada desde el pasado 25 de septiembre.
A esto, sumó que acumula por lo menos 400 mil pesos en pérdidas por dos semanas de no trabajar.
Explicó que el 25 de septiembre, personal de Comercio y la Policía Municipal procedieron con el cierre de la frutería debido a que el dueño no realizó la actualización de su cédula de empadronamiento, toda vez que ésta venció en 2009.
Y si bien pagó una multa de 10 mil pesos y el trámite de renovación de la cédula, el Ayuntamiento no ha procedido con la reapertura del comercio.
“Son conflictos de personas que están haciendo alianzas con líderes del ambulantaje, de la Central de Abastos, líderes de los mercados”, dijo.
Y aunque solicitó audiencia con el jefe de Inspectores, Luis Alonso Arteaga Vázquez y con el Subdirector de Comercio, Willebaldo Víctor Flores, para abordar el tema del cierre, se le notificó posteriormente que dicha acción obedecía a un programa de reordenamiento en La Rotonda y no por la falta de la cédula actualizada.
“Yo estoy establecido, pago impuestos, luz, agua, pago contador, lo que se necesita lo llevamos al pie de la letra y me dieron una multa de más de diez mil pesos y la pagué porque no me querían abrir y me dijeron que ellos iban a checar”, dijo.
Detalló que por concepto del refrendo de la cédula pagó 256 pesos y aunque liquidó el recargo desde temprano, el personal del Ayuntamiento reabrió el local 24 horas después de presentar tales pagos ante Tesorería. Sin embargo, nuevamente la Subdirección de Comercio clausuró la negociación, con el apoyo de dos vehículos de la Policía Municipal.
“Me volvieron a clausurar y hasta la fecha sigue cerrado el negocio”, dijo.