Luis Velázquez
PASAMANOS: El ex diputado panista, y ex panista, y empresario, Alejandro Cossío Hernández sigue trepado en el ring.
Y sin tapujos, rodeos ni medias tintas continúa destapando la cloaca en la secretaría de Salud, allí donde el titular, doctor Arturo Irán Suárez Villa denunció en la Fiscalía a todos sus antecesores en el Fidelato y en el Duartazgo y ahora le sacan “sus trapitos al sol”, porque está haciendo, todo indica, lo mismo que acusaba.
Nunca imaginó el ex diputado local y ex director médico del ISSSTE en el felipismo de Miguel Ángel Yunes Linares que meterse con un ex panista como Alejandro Cossío, íntegro, honesto, ferozmente honesto, lo empinaría en el descrédito y el desprestigio.
Ya se metió.
Y ahora, en vez de dar la cara, y según la segunda denuncia de Alejandro Cossío, cabildea por otros caminos saliéndose por la tangente.
Mal.
Y si piensa que intimidando al ex diputado local y empresario lograra su objetivo está equivocado.
Y menos, mucho menos, si sueña, por ejemplo, repetir los antecedentes de Topacio, la lideresa priista de Xalapa, y de César del Ángel, líder de los 400 Pueblos, de levantar delitos y enviarlo al penal de Pacho Viejo.
En una nueva carta abierta, Alejandro Cossío pone el índice en la llaga purulenta que está germinando, cuajando, floreciendo, desarrollada en la secretaría de Salud de Suárez Villa, cuya fuerza política y social y afectiva es tanta que su esposa fue nombrada directora del DIF estatal.
“C. Miguel Ángel Yunes Linares
Gobernador Constitucional del Estado Libre y Soberano de Veracruz-Llave
Presente
Señor Gobernador:
Se han cumplido más de 24 horas de haberle solicitado en sus oficinas de palacio de gobierno una cita con usted y hasta el momento no he tenido ninguna respuesta formal. Pero en este mismo tiempo su Secretario de Salud Suárez Villa, ha buscado en al menos 8 ocasiones por vía telefónica a los directivos de la empresa MRA, la cual yo represento, y su única preocupación ha sido el pretender comprender el tipo de relación comercial y empresarial que tengo con mi representada.
Ante la posición que ha tomado el grupo empresarial, el secretario de Salud decidió utilizar al empresario José Manuel Cervantes, viejo conocido de Veracruz por haber sido responsable de uno de mayores fraudes cometidos en los gobiernos de Fidel Herrera y Javier Duarte, ya que él es el artífice de la empresa FINAMED de todavía amargos recuerdos para los veracruzanos.
Y si usted señor gobernador NO lo sabe y se pregunta ¿Por qué un empresario como este personaje está queriendo intervenir en los asuntos de su estado? La respuesta es sencilla: porque José Manuel Cervantes tiene otra empresa llamada ESTERINOVA en la ciudad de Puebla y es precisamente a esta empresa a quien pretende favorecer su secretario con los contratos de asignación directa.
Señor gobernador, hoy por vía telefónica citaron al director de nuestra empresa en las oficinas de la Dirección General Administrativa de la Secretaria de Salud de su Estado. Espero que en primer lugar nos paguen lo que nos adeudan tan sólo de su administración y que asciende a más de 50 millones de pesos.
Y por supuesto espero, y tenga la certeza que seguiré exigiendo a través del H. Congreso del Estado y por todos los medios a mi alcance, que su gobierno sea realmente honesto y haga las licitaciones públicas nacionales, de los servicios integrales de salud que consisten en: hemodiálisis, banco de sangre, laboratorio clínico, digitalización, medicamentos, material de curación, mantenimiento de equipo médico entre otros, y que suman más de MIL QUINIENTOS MILLONES DE PESOS del dinero de todos nosotros los veracruzanos.
Le reitero que todos estos procedimientos si se hacen de forma transparente y honesta en los servicios de salud se puede ahorrar más de 400 millones de pesos.
En espera una vez más de ser atendido por usted, le reitero un saludo cordial.
Atentamente
Alejandro Cossio Hdez.
Hidalgo 88
Tel: 2288196515
Cel: 5548001263
BALAUSTRADAS: Mucho, más información tiene Alejandro Cossío.
Digamos que de igual manera como el góber azul revelara que durante muchos años se dedicó única y exclusivamente a integrar archivos de corrupción tanto de Javier Duarte como de Fidel Herrera, Cossío Hernández de igual manera.
Por eso, incluso, en la primera carta establece que “todos los políticos son iguales” de corruptos, deshonestos, transas, pillos y ladrones.
Por ejemplo, en la carta reproducida aquí se centra en la relación de un empresario con el caso Finamed, aquel de las medicinas y los servicios a los hospitales públicos de Veracruz en el par de sexenios anteriores y que ahora, oh sorpresas que da la vida, sigue utilizando el secretario de Salud de la Yunicidad.
Y es a él, dice Cossío, a quien Suárez Villa pretende favorecer, o ya favoreció, o está a punto de… “los contratos de asignación directa” y con lo que, digamos, se reproduciría la vieja historia del Fidelato cuando tuvo como secretarios particulares a Erick Lagos Hernández (protegido de Rogelio Franco Castán, secretario General de Gobierno) y a Jorge Carvallo Delfín (protegido del senador Fernando Yunes Márquez) y uno y otro cobraban el diezmo y el doble diezmo a los constructores favorecidos con “los contratos de asignación directa”, es decir, fast track, por dedazo y pasando encima de la legalidad, la la licitación, la transparencia y la rendición de cuentas.
Más todavía: estaríamos ante la antigua y legendaria historia del ladrón gritando a la policía que atrapen al (supuesto) ladrón que huye.
Bastaría referir que cuando Yunes Linares estuvo en el Issste algunos de sus colaboradores fueron inhabilitados para ocupar un cargo público.
ESCALERAS: La honestidad “a prueba de bomba” de Alejandro Cossío se expresa en lo siguiente:
Ahora, informa al góber azul que seguirá exigiendo “un gobierno realmente honesto” que cumpla al pie de la letra con las licitaciones públicas nacionales…, sin trastupijes, sin tráfico de influencias, sin componendas y sin pactos en lo oscurito.
A estas alturas, quizá, quizá, quizá, Suárez Villa ha de estar arrepentido de sus acciones, dándose “topes con la pared”, porque nunca, jamás, supo la dimensión de su audacia y temeridad.
Peor tantito, si se considera que por un lado alardea de integridad y denuncia a sus antecesores, y por el otro, “escupió para arriba”.