Por: Eugenio GONZÁLEZ | El Piñero
Cuenca del Papaloapan, México.- En el Centro de Bachillerato Tecnológico, Industrial y de Servicios (COBAEV) ubicado en Ciudad Alemán, municipio de Cosamaloapan, se ha presentado una problemática recurrente que afecta a alumnos y maestros. Desde hace varios años, las instalaciones propias del centro educativo se encuentran inaccesibles, obligando a utilizar los espacios prestados por una escuela secundaria de la localidad. Durante los meses de verano, esta situación se agrava, exponiendo a los estudiantes y docentes a fuertes golpes de calor.
El COBAEV de Ciudad Alemán ha enfrentado dificultades para finalizar la construcción de sus propias instalaciones, a pesar de contar con aulas ya construidas. Esta situación lleva cuatro años de retraso y, como consecuencia, los alumnos y maestros se ven obligados a tomar clases en horarios poco convenientes. Actualmente, las clases se llevan a cabo de 2:00 p.m. a 6:00 p.m., coincidiendo con las horas de mayor temperatura y exposición al sol.
Con la llegada del verano, las altas temperaturas representan un peligro para la salud de los estudiantes y profesores, quienes no cuentan con las condiciones adecuadas para enfrentar las inclemencias del clima. A pesar de las dificultades, se ha informado que esta semana se les ha permitido asistir con ropa más ligera para aliviar el calor. Sin embargo, esta medida solo es un paliativo temporal y no resuelve el problema de fondo.
La situación ha generado preocupación entre la comunidad educativa, ya que mientras los administrativos disfrutan de comodidades en oficinas climatizadas, los alumnos y profesores enfrentan las adversidades climáticas sin las mismas facilidades. Esta disparidad en las condiciones de trabajo y estudio plantea una inequidad y pone en riesgo la integridad de los afectados.
Ante esta problemática, se hace un llamado a las autoridades correspondientes para que se aceleren los trabajos de finalización del plantel del COBAEV en Ciudad Alemán. La terminación de las instalaciones propias permitiría que las clases se desarrollen en horarios más adecuados y brindaría un entorno seguro y propicio para el aprendizaje.
La comunidad educativa, conformada por estudiantes, maestros y padres de familia, espera que esta situación sea atendida de manera urgente. El bienestar y la integridad de los alumnos y docentes deben ser una prioridad, garantizando condiciones óptimas para el desarrollo de sus actividades académicas.
