Luis Velázquez / Escenarios
Veracruz.- UNO. AMLO, en el infierno
Veracruz será declarado en crisis humanitaria. AMLO, como presidente de la república, lo anunciará el primero de diciembre. Un día después, estará en Veracruz para formalizar el caos social que lleva a la muerte por tantos atropellos a los derechos humanos.
Se desconoce el lugar de la ceremonia. Quizá en Xalapa. Acaso, en el puerto jarocho, para más facilidad, pues atracará aquí, ya se sabe, en el vuelo comercial.
Pero si Miguel Ángel Yunes Linares ni Javier Duarte nunca, jamás, pisaron, por ejemplo, las fosas clandestinas de Colinas Santa Fe, ni menos, Yunes Linares las fosas del Km. 13.5 donde según el Solecito habría unos quinientos cuerpos, entonces, lo ideal sería que AMLO hiciera la declaratoria de crisis humanitaria… desde allí.
Y/o desde las fosas de El Arbolillo, en el municipio de Alvarado.
O las fosas de Tres Valles y Carlos A. Carrillo.
Y desde las fosas de Río Blanco.
Y más, en un Veracruz, como publicara el periódico El País, donde hay más fosas que municipios, incluido el municipio frustrado de la Jazmín Copete en Tres Zapotes.
Significaría, además, un trascendente acto icónico y simbólico que el presidente de la república pisara los terrenos del infierno con las fosas clandestinas.
Y más, porque al momento, Felipe Calderón ni menos Enrique Peña Nieto tuvieron espacio y tiempo en seis años para visitar algunas fosas del país.
Y si así fuera estaría a tono con la llamada Cuarta Transformación del País y la república amorosa y la Constitución Moral.
Todavía más indicativo, luego de que tanto el ex Fiscal Luis Ángel Bravo Contreras (Javier Duarte) y el Fiscal Jorge Wínckler (Yunes Linares) se han pitorreado de los desaparecidos, los secuestrados, los muertos, las fosas clandestinas y las madres de todos los desaparecidos, al grado de que Wínckler, por ejemplo, y obsesionado con permanecer en el cargo, dividió y fracturó a los diecisiete Colectivos, entre quienes le tiran incienso y quienes lo evidencian y cuestionan.
DOS. Libres, homicidas físicos e intelectuales
En Colinas de Santa Fe, donde han exhumado los restos de casi trescientos personas, el Solecito logró, por fin, una misa en la segunda quincena del mes de octubre, cuando la Universidad Notre Dame, de Estados Unidos, les hiciera un reconocimiento.
La vocera Rosalía Castro Toss lo dijo así:
“Una madre nunca olvida”.
Es más, el gobernador electo, Cuitláhuac García Jiménez, estuvo al lado del Solecito, sus amigas.
Y si Cuitláhuac ya estuvo ahí, entonces, razones suficientes, y de peso moral, y más porque el obispo Luis Felipe Gallardo Martín del Campo oficializó una misa, para convencer a AMLO de que la crisis humanitaria ha de ser declarada en alguna fosa y que bien podría ser Colinas de Santa Fe, considerada la más grande de América Latina.
Días después, la ex vocera, señora Lucía Díaz Genao, dijo al recibir el premio de Notre Dame, que los agentes del Ministerio Público y Fiscales “son corruptos e ineptos, sin voluntad para investigar tantas denuncias” y que en sus oficinas “se amontonan expedientes intocados, polvorientos, testigos mudos del abandono y la indiferencia de las autoridades” (La Jornada-México, Fernando Camacho Servín).
Por eso, la declaratoria de la crisis humanitaria, pues además del secuestro, la desaparición, el asesinato y la sepultura en fosas clandestinas, ha de lamentarse, y por desgracia, la negligencia de la Fiscalía para la procuración de justicia.
A ellos, con Wínckler, sólo interesó en los dos últimos años encarcelar al mayor número de políticos duartistas acusados de pillos y ladrones, y de paso, de desaparición forzada.
Y el grave pendiente social continúa desbordado, fuera de control y que, con la declaratoria de AMLO, convencido sin duda por Cuitláhuac García, significará la posibilidad (ya se verá) para detener a los homicidas físicos e intelectuales de la matanza en el territorio estatal.
TRES. 500 cadáveres en el Km. 13.5
La guadaña trepida en el aire.
En el Km. 13.5, dice el Solecito, habría quinientos cuerpos, y aun cuando ya entraron con el aval de la Procuraduría General de la República, PGR, área de su jurisdicción, todavía ningún resultado…, hasta donde se sabe si se sabe bien.
La búsqueda comenzó el 5 de noviembre. Están en una primera etapa, la del chapeo del terreno. Las hierbas y la maleza impiden el trabajo exploratorio. Hay brigadas en los tres kilómetros objetivo de las pistas de acuerdo con un mapa que una persona anónima les entregó, de igual
manera como aquella caminata en la avenida Independencia del puerto de Veracruz cuando un par de jóvenes se acercaron y les entregaron el mapa del infierno llamado Colinas de Santa Fe.
Por eso, recibirían de AMLO un gran espaldarazo social y moral y oficial si ya ungido presidente de la república estuviera el 2 de diciembre en Colinas o en el Km. 13.5.
Y es que el Solecito, igual que los dieciséis Colectivos restantes cuyas madres buscan a sus hijos, necesita del aliento institucional.
Nunca fue suficiente, por ejemplo, que les entregaran la medalla “Adolfo Ruiz Cortines” en la anterior Legislatura.
Tampoco que en la campaña electoral Miguel Ángel Yunes Linares las apapachara.
Tampoco que Cuitláhuac García les haya abierto la puerta y acompañado el día de la misa en Colinas.
Claro, Cuitláhuac apenas, apenitas está a dieciocho días de tomar posesión y ha de esperarse.
Pero los Colectivos necesitan de hechos concretos y específicos para buscar a los suyos, pues como en el caso del Solecito suelen organizar vendimia de antojitos y tianguis de ropa usada para avenirse de recursos.
La Universidad de Notre Dame hizo visible al Solecito en el concierto internacional, más aún si se considera que el mismo premio ha sido entregado, entre otros, a la madre Teresa de Calcula y al ex presidente de Estados Unidos, Jimmy Carter.
Ahora, la respuesta está en la cancha del par de nuevos gobiernos federal y estatal que asumirán el poder el primero de diciembre durante seis años.
Y más porque son de izquierda.