GUANAJUATO, Gto. (proceso.com.mx).- En siete días, 12 policías fueron asesinados y otros dos resultaron heridos por ataques de presuntos grupos criminales en cuatro municipios de Guanajuato.
Las agresiones se registraron entre el domingo 8 y el sábado 13 de diciembre en Celaya, Irapuato, León y Villagrán.
El caso más reciente se registró hacia las 20:00 horas de este sábado, cuando civiles en al menos tres camionetas dispararon contra una agente de la Policía Municipal de Irapuato y su compañero cuando se encontraban haciendo labores de vigilancia en el exterior de una farmacia en la Colonia Españita; ella falleció y su compañero quedó herido.
OJO: En menos de tres horas, cinco personas fueron asesinadas en León, Guanajuato
La agente asesinada fue identificada como Gabriela Núñez Duarte quien murió mientras era atendida por médicos en el hospital debido a la gravedad de las heridas.
Gabriela es la segunda mujer policía en ser asesinada esta semana en Irapuato.
El pasado martes 10 de diciembre, una pareja de policías y su hijo fueron sacados violentamente de su domicilio en esa ciudad y privados de su libertad por varias horas.
Al día siguiente, el policía y el hijo fueron liberados. Sin embargo, la agente, identificada como María Sonia Arellano, fue encontrada asesinada y descuartizada en un camino vecinal de la comunidad La Coyotera.
María Sonia Arellano había recibido en agosto el reconocimiento al Mérito Policial de manos del alcalde panista Ricardo Ortiz.
El 11 de diciembre por la noche, un comando de supuestos sicarios encapuchados y con armas largas irrumpió en la comandancia de Policía de Villagrán, disparando a los elementos que en ese momento realizaban el cambio de turno de la corporación.
Tres policías murieron asesinados –dos hombres y una mujer-; otro quedó herido y cuatro más fueron privados de su libertad (tres hombres y una mujer) además de un juez calificador, el cual fue liberado horas después.
En la mañana del día 12, los cadáveres de los cuatro preventivos desaparecidos fueron dejados en la carretera Panamericana.
Ese día, otros dos policías murieron asesinados en Celaya e Irapuato. Ambos se encontraban en activo en labores de vigilancia cuando fueron ultimados en ambas ciudades.
El lunes 8, el policía leonés Martín Salinas había sido asesinado cuando acudió a un reporte de robo a un taller de tractocamiones; el responsable –presuntamente el hombre que se encontraba cometiendo el robo- se enfrentó con el preventivo, al que logró desarmar y dispararme con su propia pistola.