El próximo 6 de mayo en Las Vegas el nombre de México brillará por encima de todo. En la ciudad del juego tendrá lugar la pelea de boxeo más esperada, los mexicanos Julio Cesar Chávez Jr. y Saúl “Canelo” Álvarez se subirán al ring con la intención de mandar a su rival a la lona y así llevarse el cinturón “Presidente Adolfo López Mateos”, mejor conocido como el cinturón huichol.
Desde la Sierra Madre y tras más de 350 horas de trabajo por parte del artista huichol Luis De la Cruz, en conjunto con el estudio de arte Marakame propiedad del artista Fernando Motilla y su mujer Marcela Abarca, nace esta pieza como una unión entre dos mundos: el wixárika y el actual.
Este cinturón representa la cultura huichola mediante un camino de la vida que va recorriendo los cuatro puntos cardinales desde su inicio en San Blas (Nayarit) hasta el lugar donde todo surgió en Real de 14 (San Luis Potosí), no sin antes pasar por la Isla de los Alacranes (Durango) y el Lago de Chapala (Jalisco).
Marakame es un estudio situado en Morelia, al cual el Consejo Mundial de Boxeo encomendó la misión de realizar dicha pieza de arte. “El consejo llega a nosotros por Salvador Breiman, miembro del consejo, con el cual nosotros ya habíamos trabajado”, reconoció el artista y dueño del estudio Fernando Motilla.
Ésta no es la primera vez que desde Marakame se trabaja con los artistas huicholes. Desde hace tres años y medio, cuando el propio Fernando como admirador del arte huichol le otorgó a la familia una pieza de colección para que la trabajara y el resultado fue tan satisfactorio que desde entonces no han parado de trabajar juntos.
Gracias a ese contacto con la familia de Luis, surgió el nombre de la empresa. “El nombre de la marca de Marakame lo pusimos después de conocer a Don Guadalupe, el papá de Luis, que es un marakame, se lo pusimos en su honor”, quiso resaltar el artista plástico mexicano.
Un Marakame en la cultura wixarika es un guía, alguien que entra en contacto con los dioses y es el intermediario entre el Venado azul, su dios y la comunidad.
Luis De la Cruz fue elegido por ser un especialista en el trabajo de la micro chaquira de cristal, material con el cual se elaboró el cinturón, y porque en un principio se pensó trasladar el estudio a la comunidad de Luis en la Sierra Madre, pero se decidió llevar a cabo la labor en el estudio para poder tener control del trabajo y Luis tenía la capacidad para estar en el estudio trabajando.
La realización de la pieza llevó más de tres meses, pero con ciertas pausas obligatorias para que Luis pudiese cumplir con sus tradiciones, a las que no podía ausentarse por ser líder en su comunidad, cosa que tanto Fernando como Marcela comprendieron e incluso decidieron acompañar a Luis en su camino para honrar a sus dioses.
Además de las más de 350 horas invertidas en el cinturón, éste está formado por más de 40,000 chaquiras pegadas una por una, además de usar la táctica del tejido para las partes más complicadas, que son las más cercanas a los bordes de la placa para evitar la cristalización y el desprendimiento de los cristales.
Para este trabajo se usaron más de 50 tonos de chaquira, todas procedentes de República Checa, donde el trabajo con el cristal es muy bueno y garantiza la consistencia de las piezas en términos de calidad y dimensión.
El precio de cada uno de los cincuenta paquetes de chaquiras con los cuales se elaboró el cinturón va desde los 800 pesos hasta los 3,000, dependiendo del color y material, ya que hay algunas son de aluminio o bañadas en oro.
Significado del cinturón huichol
Esta pieza tiene un significado especial, debido a que en ella Luis De la Cruz plasmó lo que para él y su cultura wixárika es la vida, y se lee de derecha a izquierda.
En la derecha encontramos el venado azul, forma en la cual se presenta su dios en Haramara, San Blas Nayarit; también aparece el fuego, elemento muy importante para los huicholes, rodeado de águilas y los ojos del dios fuego. También se observan mariposas, jaguar (maye), el conejo (taitsu) y el maíz de colores, que es el corazón representado por la chaquira.
Arriba encontramos Xapawiyemeta, la Islas de los alacranes en el Lago de Chapala, Jalisco. Aparece Nakahue quien es la que hace todo lo que existe en su mundo; a su lado, el Dios del viento ( Tamatzi Eaka Teiwari). El Lago de Chapala es la balsa en la que viajaba Nakahue y la cual quedó varada en un diluvio.
Abajo, en Durango, Hauxamanka, lugar donde quedo el varado de Nakahue.
En la izquierda, Wirikuta en Real de 14, San Luis Potosí, donde está el templo que representa el poder de la vida y un marakame y el peyote con el cual soñaban los dioses, pero no se les aparece hasta llegar aquí.
La placa de oro también tiene su significado en esta pieza. Representa el corazón del mundo, con todas las banderas, Teakata lugar donde nació el abuelo Fuego, Tatewari.
El artista lanzó un mensaje muy claro a los púgiles, que respeten, cuiden y valoren el cinturón porque en él está el corazón de la cultura huichola y para Luis fue un honor reflejar lo que sus dioses le pidieron. Mauricio Sulaiman, presidente del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), reconoció que este fajín no es el más caro económicamente, ya que el cinturón de esmeraldas entregado a Floyd Mayweather tras vencer el 2 de mayo de 2015 al filipino Manny Pacquiao tiene mayor valor económico, pero que sí es el que tiene mayor valor sentimental.
Esta pieza de cuero con más de 40,000 microchaquiras de cristal ha levantado la expectación de todo el mundo, más que cualquier otro cinturón, y esto pone en alto el nombre de México y al arte huichol.
Aunque como el presidente del CMB dijo: el cinturón viajará a Las Vegas (Nevada) y la intención es poder mostrarlo en la ciudad del juego a aquellos aficionados que quieran admirar el arte hecho en México con las técnicas milenarias de los artistas huicholes, la pieza no será entregada ese día al vencedor de la pelea.
con información de https://www.forbes.com.mx/asi-cinturon-huichol-pelearan-canelo-julio-cesar-chavez-jr/