Yael Eduardo Espinosa Guerrero fue sentenciado a 63 años de prisión por el feminicidio de su ex novia Silvia “N”, de 17 años de edad durante un presento ritual satánico, ocurrido en diciembre del 2014.
Un comunicado de la Fiscalía de Justicia del Estado de México dio a conocer que el cadáver de la joven fue hallado en el armario de la habitación del hombre, en su domicilio de Tultitlán.
Silvia había salido de su domicilio en Ecatepec el 3 de diciembre del 214 y su cuerpo sin vida fue hallado tres días después, en el armario, dentro de una bolsa.
En diciembre del 2014, la Fiscalía mexiquense informó sobre la detención de Espinosa Guerrero, entonces de 19 años, junto con él: Elia “N”, de 22 años de edad, acusada de su probable relación en los hechos; ambos fueron trasladados al penal de Cuautitlán.
Primeras versiones informaron que el homicidio de la joven fue durante un ritual satánico, pero familiares de la mujer detenida, mencionaron que fue torturada y obligada a confesar el crimen, por lo que pidieron la intervención de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
En entrevista, con los padres del joven, indicaron que su hijo había tenido una actitud extraña durante algunos días, por lo que al inspeccionar su habitación, localizaron una bolsa de mano de mujer con manchas de sangre. Por ello Policías de Investigación acudieron al domicilio de este individuo en el municipio de Tultitlán, y encontraron en un armario, en el dormitorio de Espinosa Guerrero el cuerpo sin vida de la joven reportada como desaparecida, quien de acuerdo a los peritajes realizados falleció a consecuencia de una asfixia.
Con los elementos de prueba recabados y aportados por esta representación social, y previo proceso legal, la autoridad judicial con sede en Cuautitlán le dictó una condena de 63 años y cuatro meses de prisión.