Connect with us

Barandal: Feminicidios se recrudecen

El Piñero


Luis Velázquez

11 de abril de 2018

ESCALERAS: La vida cotidiana en Veracruz es así de siniestra y sórdida:
Es Atoyac. Comunidad Potrero Nuevo. También la llaman general Miguel Alemán Valdés.
Noche del jueves 5 de abril.
Karen Paulet López Vivián estaba con su novio. En su domicilio. Novios al fin, platicaban su día.
Entonces, pasaron dos vehículos. Uno de ellos, todo indica, un taxi de Córdoba, con las placas de circulación 8030-XCZ.
Y zas se detuvieron.
Eran entre 4 a 8 sujetos. Mejor dicho, sicarios, pistoleros, malandros.
Y sin más se la llevaron a ella. Tez morena clara y caballo negro.
Luego luego, los familiares se fueron a las redes sociales, clamando ayuda a los conocidos y a los ciudadanos.
Así se vive en Veracruz.
La académica de la Universidad Veracruzana, coordinadora del Observatorio de la Violencia de Género, Estela Casados González, lo dice de la siguiente manera:
“La población femenina está indefensa”.
Y advierte:
Las mujeres deben cuidarse a sí mismas por el elevado índice de incertidumbre y zozobra.
A menos, claro, que como en San Simón Yehualtepec, Puebla, la población se organice y cuando existan agravios, ni modo, lanzarse contra los sicarios, detenerlos y lincharlos.
En Yehualtepec, lincharon a cinco de un jalón.
Todos, presuntos ladrones, pero mientras la justicia averigua, ellos, igual que Porfirio Díaz Mori al gobernador de Veracruz, Teodoro A. Dehesa Méndez, “¡los mataron en caliente!”.

PASAMANOS: En Coatzacoalcos, otra mujer asesinada. Desnuda y con la cara tapada con una cinta industrial, como si fuera, digamos, la enmascarada de plata.
Sabrá el viejito del pueblo el significado de tapar la cara con una cinta industrial.
En el narco/lenguaje, si a un cadáver le cortan la lengua es por hablador.
Si las manos, por rata.
Pero a una mujer ¿cubrirle la cara con una máscara de cinta adhesiva?
Y lo peor, arrojado el cadáver en las dunas, cerca de la colonia Ciudad Olmeca el sábado 7 de abril, en la calle Mesoamérica y Quetzalcóatl, lote baldío.
Se fue al Instituto de Medicina Forense, en calidad de desconocida.
Dice la investigadora y académica, Rosío Córdova Plaza, que tanto escozor generó en la yunicidad cuando anunciara que lleva la estadística de la muerte:
“La violencia exacerbada no va a parar pronto. La violencia está aumentando en agresividad (La vida y la realidad) parecen película de terror”.

CORREDORES: Bendito sea el Ser Superior de Javier Corral, el gobernador panista de Chihuahua, que luego del asesinato de la reportera Miroslava Breach, donde están involucrados panistas, uno de ellos, su secretario particular, anda con escoltas.
La ley, claro, lo permite.
Así, el sábado 7 de abril, cuando Javier Corral jugaba golf en el Fraccionamiento Residencial San Francisco, los sicarios atacaron a tres agentes de la Policía Estatal, sus escoltas, en el cruce de unas calles.
Por fortuna sólo quedaron heridos, pero el atentado fue considerado como un avisito al mandatario.
Fue el mismo día cuando en Chihuahua ocho personas fueron asesinadas y en Veracruz nueve; una más, entre ellas las 5 personas ejecutadas en una casa en Boca del Río, donde tenían la figura de “La Santa Muerte”, el llamado “Municipio exitoso”.
Pero, y entonces ¿cómo, de qué manera, y como lo plantea la maestra Estela Casados, han de cuidarse las mujeres?
¿Evitando salir de noche?
¿Evitar divertirse en los centros de reunión con las amigas?
¿Evitando, digamos, amistades peligrosas?
¿Organizándose para llegar en grupo al trabajo y salir en grupo y regresar en la tarde en grupo y volver a salir en grupo?
¿Alentado la creación de guardias comunitarias de norte a sur y de este a oeste de Veracruz?
¿Formando un club de Tobi entre los vecinos, amigos y familiares para que las cuiden?
Karen Paulete fue secuestrada en el frente de su propia casa cuando el jueves 5 de abril estaba con su novio.
Tal es la vida cotidiana.
La vida de todos los días.
La vida común y sencilla de la población.
¡Oh, teoría constitucional, y utópica, claro! El Estado de Derecho ha de garantizar la seguridad en la vida y en los bienes.

CASCAJO: Una cosita es la inseguridad. Otra, la impunidad. Y otra, la hermana gemela, la opacidad.
Los tres ejes rectores de la justicia, el equivalente a la Barranca de la Muerte, conocida como “La aurora”, en el duartazgo.
Por ejemplo:
La Fiscalía winckleriana sigue negando contestar la solicitudes de información de personas desaparecidas (La Jornada, 8 de abril, 2018, página 5).
De acuerdo con la solicitud 00591718 pidieron la lista del número de personas desaparecidas en el año 2017 y en lo que va del 2018.
La respuesta fue el silencio.
El limbo.
El autismo, quizá porque la paella estaba friendo en su mayor nivel y había de cuidarse el sazón.
Entonces, ni hablar, sólo resta la lucha con que las investigadoras de la UV, Rosío Córdoba Plaza y Estela Casados González, están pendientes con la hemeroteca y los informes adicionales de sus redes sociales y WhatsApp, anexos, conexos y similares.
Incluso, con todo el cinismo del mundo, el imberbe Fiscal de los Desaparecidos, Luis Eduardo Coronel Gamboa, antiguo conocido de las ONG y los Colectivos, remitió a la presunta de base de datos de desapariciones.
Sólo que la presunta base de datos únicamente llega al año 2016, el último de Javier Duarte.
Cero rendición de cuentas.
Cero transparencia.
La opacidad, en su dimensión estelar.
¿Decisión de Coronel junior?
¿Decisión del Fiscal general de 9 años?
¿Decisión superior?

RODAPIÉ: En Veracruz, la incertidumbre y la zozobra en la población femenina.
Por fortuna, en otras partes del país una parte de mujeres respira feliz, entre ellas, las figuras públicas candidatas a una diputación local y federal.
Felices, “La güereja” María Elena Saldaña, Grace González, Brenda Bezares, Susana Harp y Rocío Banquells, entre otras, que alternando con Sergio Mayer, Ernesto D´Alessio, el hijo de Lupita D´Alessio, y el ex big brother Patricio ‘Pato’ Zambrano, se volverán quizá los grandes parlamentarios del siglo XXI en México, luego de que, oh paradoja, los políticos han llegado al descrédito social.
“Iré al Senado para defender a las mujeres” dice Rocío Nahle, la candidata de AMLO.
Lo mismo está diciendo la panista Mariana Dunyaska.
¡Hosanna, hosanna!
¡Las mujeres de Veracruz se han salvado!
¡Ni una más, ni una más!

 

Comentarios

Comentarios

Comentarios

Entradas Relacionadas