El ex funcionario del Gobierno veracruzano es considerado por el actual mandatario de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, como el brazo derecho de Javier Duarte y quien presuntamente encabeza las operaciones de lavado de dinero en el Estado. Pero también ha servido como testigo.
Con el ex Secretario, Veracruz se cubrió de sangre. Pesan los cargos por abuso de autoridad, tráfico de influencias y enriquecimiento ilícito. Sin embargo, veracruzanos en la entidad lo responsabilizan por el incremento de desapariciones forzadas y los asesinatos que no tuvieron tregua y que llenaron fosas clandestinas.
Los colectivos de desaparecidos dicen que si Bermúdez no paga por la violencia, entonces todo será una simulación de Yunes.
Por Redacción / Sin Embargo
Veracruz/Ciudad de México, (Plumas Libres/SinEmbargo).- El Tribunal Colegiado resolvió un amparo a favor de Arturo Bermúdez Zurita, ex Secretario de Seguridad Pública de Veracruz; Alejandro Contreras, ex jefe de la Unidad Administrativa de la SSPY y Roberto Esquivel, empresario y socio de Bermúdez, por la acusación que pesa contra el ex funcionario duartista por los delitos de abuso de autoridad, incumplimiento de un deber legal y tráfico de influencias por lo que podría salir libre de este proceso, dijo el abogado Fidel Ordóñez.
“A la Fiscalía General del Estado se le cayó uno de las dos acusaciones en contra del ex Secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez, que era por los delitos de abuso de autoridad, incumplimiento de un deber legal y tráfico de influencias”.
El abogado Fidel Ordóñez, quien representa a los dos últimos involucrados, explicó que en términos de la resolución que fue dictada a favor de todos ellos “podrían obtener la libertad en este proceso penal que se sigue ante la juez de control de Pacho Viejo, porque le ordenaron que dejaran insubsistente el auto de vinculación emitido y además, adicionalmente a ello le desestimaron las pruebas presentadas por la Fiscalía General del Estado, con las cuales, ellos pretendían probar la responsabilidad de los tres acusados, quienes en este momento, podrían alcanzar su libertad en este proceso penal”.
Sin embargo, al ex Secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, se le siguen dos procesos penales “en este momento, en el que estamos hablando podría obtener una libertad, aunque del otro procedimiento, todavía falta la resolución de amparo que está pendiente que es el de enriquecimiento ilícito”.
Por lo tanto, Bermúdez Zurita seguirá recluido en el penal de Pacho Viejo por una sola causa penal.
EL INFIERNO QUE DEJÓ EN VERACRUZ
El 3 de febrero de este año, Arturo Bermúdez Zurita, fue detenido por los cargos de abuso de autoridad, tráfico de influencias y enriquecimiento ilícito.
Bermúdez Zurita, originario de la Ciudad de México, fue funcionario del área de finanzas con Miguel Alemán Velasco. Posteriormente, apoyado por su cuñado, el ex Diputado Alejandro Montano, hizo carrera en el gobierno de Fidel Herrera Beltrán, como encargado del C-4.
En el gobierno de Javier Duarte de Ochoa, pasa a sub secretario de Seguridad Pública, cargo que deja para escalar a jefe a la salida del general retirado Sergio López Squer, después de que este fuera amenazado por un grupo de la delincuencia con diversos atentados.
Dejó la dependencia meses antes de concluir el gobierno de Duarte en medio de acusaciones por corrupción y la compra de residencias en los Estados Unidos. Grupos defensores de los derechos humanos han pugnado constantemente para que se le enjuicie e investigue por su participación en desapariciones forzada de jóvenes y homicidios.
El ex funcionario del Gobierno veracruzano es considerado por el actual mandatario de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, como el brazo derecho de Javier Duarte y quien presuntamente encabeza las operaciones de lavado de dinero en el Estado.
Bermúdez posee por lo menos 19 inmuebles en México y Estados Unidos, y es socio o dueño de 24 empresas de giros diversos.
La propiedades están en zonas exclusivas de los condados de Harris y Montgomery aparecen a nombre de la esposa de Bermúdez, Sofía Lizbeth Mendoza Hernández; de su hermano Miguel Ángel Bermúdez Zurita, y de sus sobrinos Jesús Gabriel Bermúdez González y Gerardo Bermúdez González.
A Arturo Bermúdez Zurita se le responsabiliza por el aumento de los crímenes en la entidad. Familias afectadas por la violencia en aquella entidad exigen que el ex funcionario responda por la probable participación de las fuerzas a su cargo en diversos hechos delictivos.
De acuerdo con familias afectadas por crímenes en Veracruz, el hoy ex funcionario debe responder también por la probable participación de las fuerzas a su cargo en diversos hechos delictivos, como los ataques a periodistas y defensores a derechos humanos e, incluso, en desapariciones forzadas.
El legado del funcionario policiaco en aquella entidad, que en el último sexenio se convirtió en la más letal para el ejercicio del periodismo.
“Tiene un papel protagónico en la violencia contra la prensa, no sólo por el hecho de que agentes estatales están vinculados con las agresiones, sino por las omisiones en la prevención y la garantía de seguridad”, dice Leopoldo Maldonado, abogado de la organización de defensa de la libertad de expresión, Artículo 19.