Luis Velázquez/ Barandal
Veracruz.- PASAMANOS: Arturo Bermúdez Zurita, ex secretario de Seguridad Pública en el duartazgo, preso en el penal de Pacho Viejo, está destapando la caja de Pandora, de donde según la leyenda emanaron todos los males del mundo.
Acusado por la Yunicidad de enriquecimiento ilícito y desde la celda donde duerme, ha soltado su primera baraja para la negociación según la exclusiva del reporterazo Ignacio Carvajal:
Proceso penal rápido, libertad incluso, a cambio de entregar videos, audios, documentación oficial y pruebas de los 500 millones de pesos entregados por órdenes de Javier Duarte al senador Héctor Yunes Landa para su campaña de candidato priista a gobernador.
Además, y de acuerdo con las versiones, desea evitar que en el penal de Pacho Viejo y mientras permanezca en el reclusorio, conviva con los presos pertenecientes a los Zetas, quienes, en el duartazgo y en el fidelato, y de acuerdo con la fama pública, co-gobernaban con la dirección de Prevención y Readaptación Social.
De ser así, y de tener las pruebas de que habla, Bermúdez estaría confirmando la versión que hacia el primer semestre del año anterior circuló en las elites priistas de que Duarte, prófugo de la justicia desde hace 115 días, entregó 800 millones de pesos a Yunes Landa para la jornada electoral.
Pero además, que el dinero nunca, jamás, aterrizó en la campaña, pues habría sido desviado.
Todavía peor: la versión de que el candidato y su primer círculo del poder se quedaron con una parte significativa.
Y por eso mismo, todos y cada uno de los operadores tricolores siempre se quejaron de que los habían enviado a la guerra, sin fusil ni pertrechos.
En contraparte, Yunes Landa siempre cacareó que ningún centavito recibió de Duarte, aun cuando luego de la humillación de la caña de pescar que le diera en el WTC de Boca del Río, Héctor “aguantó vara” y en un evento rojo posterior hasta un abracito se dieron.
Incluso, tan echado para adelante estaba, que el senador denunció que el candidato de Morena, Cuitláhuac García, frecuentaba a Duarte en la Casa de Gobierno.
BALAUSTRADAS: En el sistema político y en la cultura priista siempre ha existido la práctica de que el gobernador en turno, por ejemplo, financia la campaña del candidato sucesor.
Por ejemplo, hacia el año 2004, Miguel Alemán Velasco solicitó un crédito de 3,500 millones de pesos “al cuarto para las doce”, y entre las elites se aseguró que una parte fue entregada a Fidel Herrera Beltrán para su campaña.
Además, claro, la otra versión, nunca confirmada, pero circulando en el espacio, difundida, según parece, por Miguel Ángel Yunes Linares, de que Pancho Colorado, El señor de los narco/caballos preso en Estados Unidos por sus amistades peligrosas, aportó millonaria cantidad en dólares para la campaña del góber fogoso.
Díceres en la aldea, el caso es que Bermúdez Zurita ha estremecido el corazón priista. Más todavía, digamos, el corazón del senador.
Habría, pues, de recordar que en la campaña Yunes Landa se promovió como el político más honesto, más limpio y más íntegro del mundo.
Y más, comparándose con su ex primo, quien el 5 de junio le ganara el trono imperial y faraónico del palacio de Xalapa, además de la derrota priista en el Congreso local.
“Caras vemos y corrupción ignoramos” diría el de junto.
Pero si, en efecto, y como ha trascendido, Bermúdez quiere negociar su libertad, nada más hará más feliz al góber azul más que todas las pruebas de los 500 millones de pesos, de igual manera, como por ejemplo, Yunes dobló y arrodilló a Moisés Mansur, el amigo prestanombre de Javier Duarte, cuando le dijo que encarcelaría a su esposa, y despepitó todo, absolutamente todo.
Incluso, en la pasarela política se asegura que si al momento los diputados federales, Érick Lagos y Jorge Carvallo Delfín, parecieran intocables se debe a que su héroe histórico y bíblico es Judas, porque desembucharon a Yunes todo lo que sabían de Duarte, bajo un principio universal:
“Antes de que lloren en mi casa… que lloren en la tuya”.
ESCALERAS: Se están viviendo, digamos, tiempos de Judas en Veracruz.
El primer Contralor de Duarte, Iván López, se registró ayer en el OPLE como candidato independiente a la presidencia municipal de Emiliano Zapata.
Y para seguir arrojando gasolina al fuego declaró que Duarte, su ex amigo y ex jefe y ex patrón, tenía conocimiento de las medicinas clonadas, lo que, claro, alegra más, mucho más la felicidad del góber azul.
Y si es cierto que Bermúdez tiene videos, audios y pruebas de los 500 millones de pesos entregados a Yunes Landa, entonces, el siguiente paso de la Yunicidad será llevar al senador a proceso penal, mínimo, para devolver ese dinerito… que tanto necesita la secretaría de Finanzas y Planeación en estas horas adversas.
Podría, claro, tratarse de un infundio del llamado “Capitán Tormenta”. Pero si habla, y habla para salvarse, ni modo que estando en Pacho Viejo se haga el inteligente y pase de tueste.
Desde luego, con tantos pendientes, entre ellos, el más grave, la desaparición forzada de que acusan a Bermúdez las ONGS, colectivos y solecitos, el ex titular de la SSP está condenado y creerá que jalando la cobija lo podrían perdonar.
La moraleja sería que si él se hunde… se lleva a otros en el descarrilamiento.