Oaxaca de Juárez-. La obesidad es una enfermedad que está asociada a la diabetes mellitus, síndrome metabólico, hipertensión arterial sistémica, hígado graso, daño articular que limita las actividades físicas y problemas de fertilidad.
Ante ello, los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) implementa estrategias para prevenir, detectar y controlar dicho padecimiento, por lo que en todas sus unidades de primer nivel de atención fomenta e impulsa hábitos saludables, y se proporcionan diagnósticos para una atención oportuna, en una primera etapa por medio de un cuestionario de factores de riesgo de enfermedades crónicas a partir de los 20 años.
Para contrarrestar este problema de salud pública mundial, detallaron que Oaxaca cuenta con Grupos de Ayuda Mutua (GAM), que se ubican en los centros de salud, y con seis Unidades Médicas Especializadas para Enfermedades Crónicas UNEMES (E.C), localizadas en la colonia Volcanes en Oaxaca de Juárez; Juchitán de Zaragoza, Santo Domingo Tehuantepec, San Juan Bautista Tuxtepec, Santa Cruz Huatulco y Huajuapan de León, espacios donde se otorgan tratamientos integrales mediante apoyo nutricional, atención psicológica y médica.
Uno de los ejes fundamentales es activación física, por lo que se llevan a cabo sesiones enfocadas a grupos de riesgo, todo con base a las necesidades de los usuarios, con el objetivo de prevenir y controlar este padecimiento, que es la puerta de entrada para otras patologías.
Y es que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018, en México el porcentaje de adultos de 20 años y más, con sobrepeso y obesidad es de 75.2%; mientras que, en 2012, el porcentaje fue de 71.3%.
Según las estadísticas a nivel estatal, al corte del 2019 se registró un total de 99 mil 046 pacientes con sobre peso u obesidad, de los cuales 875 fueron nuevos ingresos al tratamiento y 13 mil 347 se encuentran controlados.
En este sentido, la institución exhortó a los oaxaqueños a limitar el consumo de alimentos ricos en grasas y azucares, además de no ingerir bebidas gaseosas, tomar como mínimo dos litros de agua pura al día, consumir frutas de la temporada, fomentar en la familia la ingesta de alimentos preparados en casa con medidas de higiene apropiadas, evitar los ayunos prolongados y el alcohol.
Finalmente, advirtieron que antes de tomar algún procedimiento alternativo o dietas, es conveniente consultar a un especialista, ya que los profesionales de la salud les orientarán para un adecuado tratamiento sin poner en riesgo su bienestar.