- Prescriben delitos en 10 años
Barandal
Luis Velázquez
Veracruz.- PASAMANOS: Está claro que el objetivo del gobernador es encarcelar a Fidel Herrera Beltrán. Será, entonces, el día más feliz de su vida, aun cuando ha dicho que desde la toma de posesión lo es. Ahorita, los políticos presos en el penal de Pacho Viejo son meros calambres. La llamada “cereza del pastel” es el góber fogoso.
Y según la ley, Miguel Ángel Yunes Linares todavía es posible.
Según la ley, la responsabilidad oficial vence a los siete años luego de dejar la gubernatura (artículo 114 Constitucional), y que será en el mes de noviembre del año que corre, en tanto el delito prescribe a los diez años, es decir, en 2020.
Y tales delitos son los siguientes, entre otros, fraude, peculado, enriquecimiento ilícito, delincuencia organizada y lavado de dinero.
Hay, claro, otro delito que nunca prescribe. Desaparición forzada, que consiste en que los policías secuestren y desaparezcan a un civil. Caso, por ejemplo, del arquitecto Cristhian Morales Carreto, y de lo que, se afirma, mucho sabe el diputado federal, Érick Lagos Hernández, encargado de aquel siniestro y sórdido operativo.
Por ahora, el fogoso ya libró la primera andanada azul. Fue en el caso de la quimioterapia a los niños con cáncer a partir de agua destilada y en el caso de las medicinas clonadas.
Pero el corazón, el alma y las neuronas del Yunes azul, lleno del más furibundo rencor y odio a su alter ego, Fidel (son igualitos), sólo alcanzará la quietud cuando lo tenga en Pacho Viejo, y/o en todo caso, haya agotado las posibilidades.
Y será, claro, por un delito estatal, y/o en todo caso, federal, presionando a lo máximo al gobierno central.
Hay, sin embargo, quienes están convencidos de que le está pisando los callos. Se refieren a Mauricio Audirac Murillo, su titular en el Órgano de Fiscalización Superior, ORFIS, y quien conoce los secretos de Fidel, incluso, con todo y su paso por la Contraloría y la secretaría de Finanzas y Planeación.
Y si Audirac ya despepitó en contra de Carlos Aguirre Morales, otro fidelista, que fue su tesorero en SEFIPLAN, y en contra del diputado federal, Antonio Tarek Abdalá, si Yunes lo sigue presionando, muchas sorpresas podrían, digamos, ocurrir.
Luego de traicionar a Jesús por treinta monedas, Judas se ahorcó de un árbol en el rancho que comprara a las afuera de Jerusalem. Y de ser así, Audirac sería, entonces, el Judas del siglo XXI en el Golfo de México.
BALAUSTRADAS: Más todavía:
Si los delitos proscriben en diez años, entonces, los dos años de Yunes Linares estarán vigentes.
Y lo peor, dos de los seis años del sucesor del Yunes azul… todavía serán actuables.
Y si Miguel Angel lanzara a su hijo Miguel Ángel de candidato a gobernador y ganara la elección en las urnas el año entrante, peor aún.
El fogoso viviría “en la orilla de la navaja”.
Por eso, ya desde ahora se habla de que su hijo, el diputado federal, Javier Herrera Borunda, será candidato, ya es, del PVEM a la gubernatura.
Y de ser así, y sin caer en el futurismo, y ganara, entonces, todo lo que ahora aplica Yunes Linares en contra de Fidel y los duartistas se revertiría.
El Yunes azul y los suyos se volverían las reses del mañana, pues la sentencia bíblica dice que así ocurre con los carniceros de hoy.
El destino social de los ocho millones de habitantes de Veracruz atrapado y sin salida en las pasiones desaforadas, irracionales, de un par de políticos.
La dinastía de los Kennedy de Boca del Río y la dinastía de los Kennedy de Nopaltepec.
ESCALERAS: Todo le conoció y supo Mauricio Audirac a Fidel Herrera. Pero también, en todo le sirvió a Javier Duarte.
Por ejemplo, cuando en víspera de que Alberto Silva Ramos pasara de presidente municipal de Tuxpan a secretario de Desarrollo Social, Audirac, con su despacho, se encargó de la química contable para arreglar sus cuentas en el Ayuntamiento, de igual
manera como también lo aplicara con Marcelo Montiel Montiel como alcalde de Coatzacoalcos y antes, con José Ramón Gutiérrez de Velasco en Veracruz.
Y si para librarse, Audirac ha empezado a salpicar ya mostró su debilidad. La cárcel, dicen los que saben, marca al más pintado, así duermas una noche, un mes, un año, varios años, pues el estigma persigue y se recrudece.
Más de veinte años, el Yunes azul ha mantenido su odio en contra de Fidel. Y su venganza, con o sin razón, es ahora o nunca. Flavino Ríos, Arturo Bermúdez, Francisco Valencia y Audirac, detenidos, y Carlos Aguirre Morales prófugo y Antonio Tarek Abdalá en la antesala del desafuero y Javier Nava Soria detenido en España por la PGR, son simples ejercicios de entrenamiento.
Además, está claro, y como publica el reportero y escritor, Ricardo Ravelo. Yunes Linares “no es ningún adalid de la justicia”. Se olvida su paso en el Chirinismo y en el ISSSTE cuando Felipe Calderón Hinojosa.
Ok. Pero…sólo que ahora tiene “el látigo en la mano”, como antes lo tuvo Javier Duarte y antes Fidel Herrera y antes Patricio Chirinos Calero en que encarceló a Dante Delgado Rannauro, Porfirio Serrano Amador y Gerardo Poo Ulibarri.