Ciudad de México.- En el trabajo, el ordenador; para quedar con tus amigos o recordarle a tu pareja que saque los filetes del congelador, un mensaje de Whatsapp; e incluso es posible que para cosas tan sencillas como hacer la lista de la compra tengas una tabla de Excel o una nota en el móvil, ¿te suena?
Escribir a mano en la era digital no se lleva. De hecho, se estima que un 80 % de la gente ha dejado de hacerlo y que en menos de 25 años no sabremos escribir manualmente. Así lo afirma la periodista Irene Fernández, creadora del taller Cardioscritura.
“Se trata de un taller de 8 horas para retomar el hábito de escribir a mano, algo que ha demostrado tener enormes beneficios a nivel cerebral”, expone Fernández.
“La escritura es una poderosa herramienta neuronal que tenemos, nunca mejor dicho, en nuestras manos. Al hacerlo conectamos el hemisferio izquierdo con el derecho y esto permite mejorar la memoria y el aprendizaje“, explica.
Pero escribir a mano no solo tiene ventajas a nivel cerebral; sino que para nuestro bienestar emocional, como explica la periodista, también puede resultar muy sanador. “Es una forma de sincerarte y expresar aquello que no te atreves a decir al otro. También ayuda a perdonar y olvidar, aunque pase el tiempo y no hayas hablado con esa persona con la que tienes algo pendiente, el hecho de haberlo dejado por escrito, te va a liberar de una carga muy pesada”.
El taller Cardioscritura se imparte el próximo sábado 22 de febrero, de 10:00 a 20:00 horas, en Madrid
Metodología del taller Cardioscritura
Como explica la periodista, al comienzo del taller se les entregará un cuaderno en el que irán realizando los ejercicios. Habrá un tiempo para hacerlos y después los textos serán leídos en voz alta. “Propondré unos temas que a todos nos puedan preocupar y serán los asistentes, a través de una votación, los que los elijan cuáles quieren tratar”.
“También se les hará un estudio grafológico que les llegará al correo un mes más tarde, y se llevarán también unos ejercicios para hacer los 40 días posteriores al curso: 40 preguntas sobre temas que yo les propongo”, añade.
La creadora del taller de Cardioscritura propone también a quienes acudan el sábado llevar una plantita con el fin de crear un “bosque de las plantas”.
La idea es, como cuenta a EFEsalud, “que al final se lleven otra distinta a la que han traído, algo que en psicología llaman anclaje, un recuerdo de la experiencia que te motiva después en casa a seguir trabajando”.
Con información de EFE Salud