• No hay turistas en cuatro municipios de la etnia Chinanteca.
• Permanecerán cerrados en “semana santa”, la fecha para la que se prepararon todo un año.
Carlos Abad | El Piñero
“La semana santa”, quizás es una de las épocas con mayor calor en el año y para la cual se habían preparado todos los prestadores de servicios turísticos, sin embargo la emergencia sanitaria impide que puedan trabajar y solo queda prepararse para el día en que todo esto acabe.
Y es que sus únicas fuentes de ingresos fueron cerradas, lo que deriva en la falta de visitantes y con ello la nula entrada económica por ingresar a los balnearios de la región de la Chinantla; tampoco hay renta de palapas, ni venta de comida, por poner algunos ejemplos.
Ángel Olivera Quirino, presidente del comité ecoturístico de San Mateo Yetla, Valle Nacional, informó que desde el 18 de marzo -fecha en que cerraron- las pérdidas económicas son incalculables debido a las restricciones para prevenir el coronavirus.
“Aquí aproximado en tiempo normal se recibían hasta 50 personas entre semana, y en fin de semana más de 100 personas o hasta 150 (…) el costo de la entrada es de 10 pesos y las cabañas dúplex en 700 pesos, las sencillas en 350, tenemos servicio de alberca, el río Valle Nacional y sendero”.
Sobre la carretera federal número 175, en el mismo municipio de San Juan Bautista Valle Nacional, también se encuentra el centro ecoturístico “Monte Flor”, con aguas cristalinas y poco profundas que garantizan refrescarse a propios y extraños; aquí tampoco hay visitantes y solo nadan unos cuantos lugareños.
La belleza de la región de la Chinantla, continúa en el balneario Zuzul, perteneciente a la comunidad de Vega del Sol, Municipio de Santa María Jacatapec, Oaxaca; un “ojo” de agua o nacimiento del vital líquido, que da diversas tonalidades de azul a los turistas, quienes gozan de una alberca natural y nado entre peces.
El presidente del comité ecoturístico Maximiliano Antonio Hernández, enfatizó las pérdidas millonarias por la falta de visitantes: “el Zuzul empezó a cerrar sus puertas desde el 20 de marzo de este año, por órdenes de la misma comunidad y de los socios de Zuzul por la cuarentena que estamos pasando sobre la enfermedad del coronavirus, y los socios decidieron cerrar las puertas completamente del ecoturismo”.
¿CUÁNTOS VISITANTES RECIBÍA ZUZUL?
“Calculamos los fines de semana que recibíamos mil 500 visitantes durante viernes, sábado y domingo (…) para entrar al balneario por acuerdo de socios se cobran 20 pesos por persona (…) y estamos poniendo en condiciones el restaurante para 200 personas, las palapas”, dijo Don Max.
En el mismo municipio, Jacatepec, se encuentra el balneario “San Martín”, también de aguas cristalinas y con una corriente de agua fría que pasa bajo la sombra de los árboles, zona que provoca el deleite de quienes se bañan ahí, aunque por ahora los frescos momentos deberán esperar hasta después de la cuarentena, ya que ningún turista puede pasar a nadar, lo que deja pérdidas incalculables al comité y en general a la comunidad.
La crisis económica derivada de la pandemia COVID-19, también llegó a la presa “cerro de oro”, lugar que era muy visitado para degustar ricas mojarras en sus diversos restaurantes, que hoy carecen de turistas, por eso hoy la mayoría tienen las sillas arriba de las mesas, abren tarde y cierran temprano, casi no hay gente que vaya a comer. Así lo manifestó Griselda, dueña de una cocina económica “diariamente venían más de 100 personas, de hecho estaba un evento por llegar en semana santa y ya no habrá nada, las pérdidas son del 80%, ojalá termine pronto esto para que puedan visitar la presa cerro de oro”.
La cancelación de eventos de pesca en “Cerro de Oro” impactó solo a los restauranteros, pues los que se dedican a la pesca deportiva continúan con esta práctica y tienen toda la cortina de la presa para echarse una “cascarita” ellos solos junto a sus familias, nada les impide un momento de relajación fuera de la ciudad, la soledad los ha beneficiado con una mejor pesca.
Hasta la embarcación “Claudia Ofelia” que todos los días navega el Río Papaloapan para trasladar pasajeros del centro de Tuxtepec a la colonia “La Esperanza”, reportó pérdidas del 60% en la primera semana de cuarentena, y ya fueron notificados por la Capitanía de Puerto, para suspender labores a partir del próximo lunes, así lo dio a conocer Hugolino Bautista dueño de la embarcación.
“De manera oficial se nos indicó la suspensión de servicio, anterior por problemas del COVID-19, se están tomando las medidas, entonces están tomando medidas un poco más enérgicas” declaró ¿Cuánta gente pasa en promedio? “serían un promedio de 200 personas que van y vienen todos los días, que van a trabajar” ¿Y de la lancha cuántos trabajadores dependen? “Somos 5 trabajadores”.
Solo queda prepararse para el día en que todo esto pase y puedan volver abrir los balnearios y retomar la actividad normal de la ciudad.