Redacción El Piñero
Cleopatra demostró que una mujer era capaz de gobernar con éxito una nación: Egipto, una tierra de la que no era originaria, pues estudios han demostrado que perteneció a la dinastía Tolemaica, creada por Tolomeo 1°, además de que no era una mujer sumamente bella, pero sí, dotada de gran inteligencia, y que estuco apegada a cultura griega.
Fue en el año 2007 que trascendió la localización de una moneda egipcia que mostraba el rostro de Cleopatra y se mostraba que no era una mujer de suma belleza como se ha hecho creer.
Sin embargo, en su afán de no envejecer, se dice que tomaba diversos tratamientos de belleza como baños de leche de burra.
Se dice también, que su mayor atractivo era su gran inteligencia, con la que llegó a convencer al pueblo de Egipto de ser la reencarnación de la Diosa Isis (una maga poderosa, esposa de Osiris, el dios de los muertos, y madre de Horus. Con sus conocimientos mágicos consiguió resucitar a su marido y proteger al pequeño Horus del asesino de su padre, el dios Set).
Hablaba 9 idiomas y conocía el lenguaje del Antiguo Egipto, había aprendido a leer jeroglíficos, un caso único en su dinastía. Aparte de esto, conocía el griego y los idiomas de los partos, hebreos, medos, trogloditas, sirios, etíopes y árabes.
Además de idiomas, estudió geografía, historia, astronomía, diplomacia internacional, matemáticas, alquimia, medicina, zoología, economía y otras disciplinas. Intentó acceder a todo el saber de su época.
Cleopatra pasaba mucho tiempo en una especie de antiguo laboratorio. Escribió algunas obras relacionadas con hierbas y cosméticos. Desgraciadamente, todos sus libros quedaron destruidos en el incendio de la gran Biblioteca de Alejandría del año 391 d. C.
Su gran inteligencia le ayudó a conocer a Julio Cesar, un político y militar romano del siglo I a. C. miembro de los patricios Julios Césares que alcanzó las más altas magistraturas del Estado romano, metida en una alfombra, lo que sorprendió a Julio Cesar, logrando convertirlo en su aliado político y después en su amante.
Siete años después, con gran astucia, conoció a Marco Antonio (importante colaborador de Julio César durante la guerra de las Galias y la segunda guerra civil. Gobernó Roma con escaso acierto durante la ausencia de César en 47 a.C.), cuenta la historia que se presentó en una barca dorada adornada con velas púrpuras, remos de plata y vestida como la diosa Venus, ante ello, Marco Antonio quedó encantado y más tarde se casó con ella dejando a su esposa.
Cleopatra gobernó junto con su padre Ptolomeo, quién decretó que a su muerte, ella se casará con su hermano de 11 años, no se logró. Posteriormente se casó con su hermano que murió en circunstancias misteriosa, y posteriormente, solicitó a Julio César, terminar con la vida de su hermana.