Jaime GUERRERO
Oaxaca.- Por el desorden financiero y desvíos de recursos que dejó el sexenio de Ulises Ruiz Ortiz y Gabino Cué Monteagudo, hoy el sistema de Salud de Oaxaca, está colapsado. Y se ha anunciado la rescisión de contrato a unos dos mil 200 trabajadores regularizados, que eran pagados de forma irregular con impuestos que no fueron enterados al Sistema de Administración Tributaria (SAT).
El nuevo titular de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), Juan Díaz Pimentel, ordenó el cese de al menos 1 mil aviadores que estaban inscritos en la nómina de la dependencia y que fueron detectados mediante una auditoría.
Al colapso, se suma los adeudos a terceros no instituciones, multas y proveedores, por el orden de los 6 mil millones de pesos.
En el sexenio de Ruiz Ortiz, el titular de los SSO fue Martín Vázquez Villanueva y en el de CUé Monteagudo, German Tenorio Vasconcelos, hoy presó y sujeto a proceso por desvío de recursos en la dependencia.
Por lo pronto, en respuesta, la Sección 35 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSS) anunció paro de labores en 14 hospitales generales, 18 básicos comunitarios, tres de alta especialidad y Centros de Salud.
En la entrada de los hospitales de Pinotepa Nacional, Putla de Guerrero, Huamelula, Pochutla y Hospital Civil fueron colocadas lonas y cartulinas exigiendo pagos de aguinaldos, salarios y uniformes de los trabajadores de los servicios de salud. En el Hospital Civil Aurelio Valdivieso, los trabajadores administrativos, tomaron la determinación de suspender sus actividades. De los mil 404 trabajadores, sólo 5 son de confianza y 673 de base, además de otros 264 “formalizados” y 345 “regularizados”.
Así mismo piden la entrega completa de material de curación, medicamentos y vacunas para brindar una atención de calidad para los usuarios.
Con impuestos pagaron de forma irregular
De su lado, Díaz Pimentel, notificó al personal regularizado que se tardaran en pagar su quincena porque el Seguro popular no ha radicado los recursos y lo harán hasta febrero, debido a que para pagar a los trabajadores regularizados, desde la administración de Ruiz Ortiz y Cué Monteagudo, se pagaron salarios indebidamente, echando mano de los impuestos sobre la Renta (ISR) y el ISSSTE, que nunca fueron enterados al SAT.
“Hay que tomar medidas por dolorosas que sean pero apegadas a la ley y en el caso de los regularizados no nos radican de manera puntual y agarraban dinero de los trabajadores de base y abrían otro hoyo y es dinero es de otras gentes que son de pensiones o prestaciones médicas, yo no estoy dispuesto a hacerlo, no hice nada ilegal y no desviare un solo peso”, justificó.
Díaz Pimentel, reiteró que en los Servicios de Salud hay desorden financiero que se propicio desde el 2006, en la administración de Ruiz Ortiz y se acentuó en la de Cué Monteagudo.
Adelantó que los trabajadores en la modalidad de contrato ya no van a trabajar en los SSO porque la nómina es muy alta y se van 202 millones de pesos a la quincena, 4 mil 888 millones de pesos al año.
Solo quedan 6 millones de pesos a la Secretaría para atender los temas prioritarios.
Díaz Pimentel, destacó que de 1 mil aviadores, un líder sindical, tenía trabajando a 10 familiares en Regulación Sanitaria, al tomar la dependencia, se le va a fincar una denuncia y castigado con todo el peso de la ley.
Hasta el momento los trabajadores de base, sólo han cobrado sus quincenas y la segunda parte del aguinaldo, en tanto que, a los trabajadores regularizados y formalizados, solamente les han depositado lo correspondiente a la segunda parte del aguinaldo y no así la primera quincena de enero.
En medio del colapso en los SSO, se detectaron trabajadores fantasmas fueron ubicados mediante una auditoría practicada en la que se detectaron pasivos por más de 6 mil millones de pesos y más de 1 mil millones que se acumulan cada año.
La crisis de los SSO
Los adeudos que dejó la administración de CUé Monteagudo, a finales del 2016 fueron superiores a los 4 mil millones de pesos y a enero de este 2018, ascienden a 5 mil 487 millones de pesos, que incluye actualizaciones, adeudos a terceros institucionales y no institucionales, laudos, recargos y multas por auditorías, confirmó, Díaz Pimentel.
Ese fue el reporte que entregó los SSO a la LXIII Legislatura y ahora ratificado por Díaz Pimentel, tras tomar protesta al cargo y anunció que habrá una reestructuración del personal.
Y es que la administración del gobernador Alejandro Murat Hinojosa requiere 3 mil 858 millones de pesos para terminar, equipar, dotar de servicios personales y echar a andar 70 unidades médicas y clínicas de salud, que heredó del ex gobernador Gabino Cué Monteagudo, según informes de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO).
Los adeudos que dejó la pasada administración a finales del 2016, fueron superiores a los 4 mil millones de pesos y al cierre del ejercicio 2017, ya ascienden a 5 mil 487 millones de pesos, que incluye actualizaciones, adeudos a terceros institucionales y no institucionales, laudos, recargos y multas por auditorías.
Según los SSO, el abasto de medicamentos oscila en el 60 por ciento en las unidades médicas, hospitales y unidades médicas del Sistema de Salud; y el 65 por ciento del material de curación.
En la identificación de la problemática, se concluyó que dada la profundidad y complejidad de la situación, era necesario establecer una estrategia de transición y recuperación paulatina y sostenida.
Pese a que se ha buscado sanear el pasivo e iniciar un proceso de regulación y reordenamiento de recursos financieros, humanos y materiales, debido a que recibieron los Servicios de Salud de Oaxaca con una plantilla laboral de 17 mil 925 trabajadores, los recursos son insuficientes.
Para ello, según los SSO, se generado un solo contrato nuevo, para 17 mil 813 trabajadores, debido a que la administración de Cué Monteagudo, les dio 20 contratos.
En 2010 se contaba con una plantilla de 14 mil 341 trabajadores, en el 2016 aumento a 17 mil 925 y a la fecha se cuenta con 17 mil 813. Es decir, la administración de Cué Monteagudo, aumento en más de 3 mil 600 la plantilla laboral, sin tomar en cuenta la situación presupuestal, echando mano de pagos irregulares, que tuvo que comprobar ante la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
Por lo pronto, los SSO, alistan una revisión y reingeniería porque no existe déficit de personal, debido a que entre el 25 y 27 por ciento de médicos y enfermeras están en áreas administrativas.