Las fresas son de las frutas preferidas en la primavera debido a su frescura y también de las más buscadas para las dietas, pues tienen muy pocas calorías (entre 70 y 80 por ración); sin embargo, estas no son las únicas cualidades que tienen.
Además de su característico sabor, las fresas tienen otros beneficios para la salud como prevenir enfermedades y mejorar el estado de otras, ¿cuáles? A continuación te las decimos.
Previene cáncer y enfermedades cardiovasculares
Andrea Calderón, experta de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (SEDCA), afirma que la fresa ayuda a prevenir algunos tipos de cáncer y las enfermedades cardiovasculares debido a que regulan el colesterol, refuerzan el sistema inmunológico, aumentan la capacidad neuronal, reducen los procesos inflamatorios y retrasan el envejecimiento y los procesos de oxidación.
Estos beneficios se obtienen gracias a los antioxidantes que predominan en las pepitas de las fresas.
“Gracias a estas sustancias se considera que las fresas son una de las frutas más antioxidantes del mercado. En una taza de 150 gramos de fresa residen ni más ni menos que 300 mg de compuestos fenólicos antioxidantes”, menciona.
Investigaciones realizadas por la Universidad Estatal de Ohio, afirman que el tipo de cáncer que más previenen estas frutas es el de esófago. Hasta en un 50% reducen el riesgo de desarrollar tumores, al menos en roedores.
En el caso de las enfermedades cardiovasculares, pueden prevenir hipercolesterolemias y arteroesclerosis.
Si bien se conocen todos estos beneficios, la especialista indica que aun hace falta investigar más sobre ello.
“Pese a todo ello, son escasos los estudios científicos en fresas por el momento, y es necesario aumentar las investigaciones de este alimento tan consumido en España para poder corroborar algunos resultados”, dice.
Refuerza el sistema inmunológico
Otro de los beneficios de las fresas es el fortalecimiento del sistema inmunológico, lo que evita que algunos tipos de virus como la quercetina, ingresen al organismo y causen enfermedades.
Incluso se ha observado que su consumo frecuente puede reducir las sustancias que promueven el asma y las que causan otro tipo de alergias.
Mejora la salud cerebral
Estudios señalan que el cerebro también puede beneficiarse del consumo frecuente de fresas, pues retrasan su envejecimiento y favorecen la buena salud mental.
Algunos de los componentes de las fresas, inhiben el COX-2, el principal estimulador de prostaglandinas inflamatorias, que se relacionan con el cáncer, enfermedades cardiovasculares y Alzheimer.
“Un estudio del Instituto Salk de Biología (EEUU)sobre uno de sus componentes, la fisetina, apunta a que este flavonoide de la fresa, mejora la memoria a largo plazo de forma significativa”, concluye calderón.
(Con información de Levante-emv-com)