Ciudad de México.- Cuando las bacterias o virus atacan nuestro cuerpo, las defensas salen a protegernos. La mayoría de infecciones producen que nuestra temperatura corporal se eleve debido a que con ello, los microorganismos que buscan afectarnos no pueden hacerlo debido a que prosperan mejor entre los 37° C. Esto es mejor conocido como fiebre.
La fiebre se puede distinguir en un niño, cuando está por encima de 38°C, medida en las nalgas, 37.5° C, medida en la boca, y 37,2° C, bajo el brazo. En el caso de los adultos, 37,5° C, dependiendo la hora del día. La temperatura corporal normal puede cambiar en el mismo día, por lo general es más alta durante la noche.
Los expertos explican que cuando se tiene fiebre, este no es el problema principal. Por eso, se debe tratar aquello que la causa y no necesariamente a esta en sí misma. Sin embargo, si sobrepasa temperaturas normales puede ser peligroso, por lo que hay que conocer algunas opciones.
Baño de agua tibia o esponja
Es uno de los más utilizados. Consiste en tomar un baño de agua tibia o los llamados baños de esponja. Esto estimula la producción de sudor. Solo asegúrese que el agua no esté demasiado caliente y que el baño dure entre 5 y 10 minutos. Es importante el secado rápido.
Hidratación
El cuerpo necesita una gran cantidad de líquidos para combatir los episodios de fiebre, ya que las altas temperaturas que provoca pueden causar sudoración y deshidratación. Esta reposición de los líquidos se vuelve especialmente importante si hay vómitos o diarrea.
Enfriar desde los pies
En la sabiduría popular se cree que los pies fríos ayudan a bajar la temperatura del cuerpo, además, favorecen a la circulación y una mayor respuesta del sistema inmunológico. Los calcetines húmedos son unos de los métodos más recomendados para conseguirlo, simplemente hay que mojarlos con agua bien fría y colocarlos en los pies de preferencia hasta cubrir los tobillos. Luego, luego coloca secos encima.
Compresas de vinagre
El vinagre comúnmente se utiliza como aderezo de ensaladas; sin embargo, también podría resultar útil para ayudarte para bajar la fiebre. Puedes diluir unas cinco cucharas en un litro de agua. Luego, toma un paño limpio, sumérgelo y ponlo sobre la frente, también puedes envolver los tobillos. Cambiar la compresa cuando se enfríe.
Canela
La canela tiene la capacidad para calentar el cuerpo y acelerar el sudor. Para beneficiarte de esta propiedad, debes preparar una infusión de canela y beberla cada hora mientras dura la fiebre. Para ello, añade una cucharadita de canela en polvo a una taza de agua hirviendo, tapa y deja reposar durante tres minutos.
Tener en cuenta que cuando el caso es grave y la fiebre es muy alta, lo recomendable es asistir al médico más cercano para que realice el diagnóstico respectivo. No automedicarse.
Con información del Diario el Comercio