Todo comenzó con una mancha y un lunar en la frente, justo cuando Bethany Gambardella-Greenway, de 39 años, estaba embarazada de su segudo hijo y pensó que se trataba de un cambio hormonal que le producía paño.
Sin embargo un año después, notó que su piel se hacía más gruesa, oscura y ardía, en la zona de la frente y comenzaba a molestar su ojo izquierdo, entonces acudió al médico…
* Bethany documenta la aparición del melanoma confundiéndolo con paño por el embarazo.
*Tras la extirpación del melanoma, descubren que el cáncer se extendió a huesos y ganglios linfáticos
*La radiación de las terapias le provocó ardor, dificultad para comer, llagas en el cuerpo y caída del cabello.
*Bethany vive en Texas y reconoce que nunca fue de su agrado asolearse, broncearse o acudir a camas de bronceado.
*Aunque la radiación le provocó daño permanente en la línea del cabello y en papilas gustativas, ella está 100% sana ahora.
Por esto es tan importante evitar asolearnos sin protector solas o acudir a las camas de bronceado, la piel es muy sensible y el cáncer puede manifestarse desde manchas, lunares o ardor en zonas de la piel.
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