• Pastel, Mariachi, lágrimas y buenos deseos hasta el cielo, fueron parte del homenaje póstumo.
Carlos Abad/El Piñero
Jalapa de Díaz, Oax.- A 33 años de su nacimiento, el pueblo mazateco de San Felipe Jalapa de Díaz conmemoró de manera póstuma el cumpleaños de quién hasta hace 10 meses fuera su presidente municipal, Arturo García Velázquez, quien es considerado “el amigo del pueblo”, y que aún en su ausencia física logró reunir a cientos de personas en la explanada principal del palacio municipal.
Arturo García nació un 14 de octubre de 1987, desde entonces familiares y amigos refieren que aquel niño apasionado por el fútbol, tenía “madera” para brillar en el futuro, aunque en sus primeros años nadie imaginó que llegaría tan lejos.
Su sentimiento por Jalapa de Díaz fue inspirado por las carencias de su pueblo, mismas que él buscó cambiar las condiciones de vida de su gente mazateca, para lograr que este municipio creciera en toda la región de la Cuenca del Papaloapan.
Muy joven incursionó en la política y la oportunidad de ser presidente municipal se presentó rápido; Arturo García Velázquez se ganó el cariño de la gente, pues siempre transpiraba la camiseta al caminar todas las comunidades en busca de conocer directamente las necesidades de la ciudadanía y rápidamente implementar estrategias para abatir el rezago social.
Un mariachi entonó “el rey” y así empezó la celebración en su ausencia, continuaron honores a la bandera, un poema, su reseña histórica y jóvenes que agradecieron la gestión de Arturo García para que una universidad llegara a Jalapa de Díaz.
Tocó el turno de su esposa Fernanda Barbosa Sosa, quién recordó el buen hombre y padre que fue en vida; ella externó que su legado quedará presente siempre y cuando viva en los corazones de todo aquel que pudo estrechar su mano o que recibió algún beneficio con su incansable gestión.
Posteriormente su hermano Jesús Ernesto, ahora presidente municipal de Jalapa de Díaz, agradeció el cariño que todo el pueblo mazateco le tiene a su hermano, a quién recuerda con gran cariño y amor, por ser la persona que supo sacar adelante a toda una familia.
No podían faltar sus hijos Arturo y Fernando, quienes lograron hacer que el público entonara 3 ¡Viva Arturo García Velázquez!
Finalmente la familia parte un pastel y éste fue obsequiado a todos los asistentes.