Acelgas, frijoles, ciruela pasa, plátano y el aguacate, entre otros alimentos, ayudan a disminuir las contracciones o espasmos musculares súbitos y dolorosos causados por deficiencia vitamínica y mineral, conocidos como calambres.
Dichos espasmos son contracciones repentinas e involuntarias que ocurren en los músculos y aparecen, por lo general, en piernas, aunque también pueden afectar brazos, manos o abdomen.
De acuerdo con la Secretaría de Salud, los calambres provocan que el músculo se tensione y no se relaje, además de que se asocian a la sobrecarga o lesión de éste.
Ante estos padecimientos, una de las recomendaciones de los especialistas del sector salud es que, al momento en que se presenta un calambre, se suspenda toda actividad y se haga un estiramiento, además de dar masaje al músculo afectado.
La dependencia aconsejó realizar ejercicios de estiramiento al menos tres veces al día y antes de dormir; ejercitar los pies y las piernas con regularidad y mantenerse hidratado sobre todo al hacer actividad física.
Además, utilizar calzado cómodo que brinde un apoyo adecuado e ingerir alimentos ricos en potasio.
Es muy importante consultar al médico cuando los calambres son fuertes y no desaparecen con el estiramiento, sino que, al contrario, reaparecen y duran mucho tiempo.
con información de noreste.net