Ciudad de México.- La presencia del béisbol mexicano en los campos de entrenamiento de Grandes Ligas es mayor en 2020, con más de 30 jugadores nacidos en México o con raíces familiares arraigadas en los Estados Unidos.
Un total de 21 organizaciones de la MLB comenzaron el Spring Training con al menos un representante de México. La presencia más nutrida está en Júpiter, localidad de Florida donde se alistan los Cardenales de San Luis.
El grupo actual, que encabeza el cerrador Roberto Osuna, figura de los Astros de Houston, supera las expediciones de los dos años anteriores, que rondaron los 25 nombres.
En Arizona, entretanto, el lote más importante se encuentra en Peoria, donde tres de ellos fueron convocados por los Padres de San Diego.
La delegación mexicana ocupa la quinta plaza entre los exportadores de talento hispano a las Grandes Ligas, por detrás de la República Dominicana (227), Venezuela (144), Cuba (51) y Puerto Rico (50), contando al momento de empezar la pretemporada.
Osuna es parte de una estirpe de lanzadores que México ha dado a la Gran Carpa para trabajar en los innings finales.
Entre esos apagafuegos destacados aparecen Joakim Soria, el veteranísimo Oliver Pérez y Sergio Romo, uno de los integrantes del grupo de mexicanos nacidos en Estados Unidos, que a pesar de ello ha sido integrante del Tri en el Clásico Mundial, amén de presencia repetida en la LMP, el circuito invernal del país de sus ancestros.
Osuna es la expresión más acabada y constante de esos bomberos. Ya con 158 salvados en su carrera, acaba de lograr su tercera cosecha sobre 30 rescates, liderando la Liga Americana, de paso, con 38 en 66 compromisos.
Con 2.63 de efectividad en 2019 y 0.88 de WHIP, el diestro tratará de convertirse en los próximos seis meses en el segundo mexicano sobre 200 salvamentos en la historia, pues comienza con 154. Soria es el único que le antecede en esa lista, con 221.
Con información del Diario La Verdad