Luis Velázquez | Escenarios
UNO. El enviado especial
Ahora que las noticias falsas se han echado sobre “Las mañaneras” como unas pacientes anestesiadas en el quirófano para destriparse con la bendición de una joven reportera de La Jornada, habría de preguntarse, por ejemplo, a tono con la religiosidad obradorista, si algunos, o todos, los relatos bíblicos fueron, digamos, falsas noticias o noticias falsas.
Por ejemplo, Lucas, el autor del libro “Hechos” fue como reportero enviado especial para seguir a su jefe, Pablo, aquel convertido en apóstol de Jesús cuando en el camino a Damasco se le apareció un rayo fulminante y era Dios convocándolo para unirse a su feligresía.
DOS. Milagro en altamar, ¿noticia falsa?
Luca cuenta la historia de Pablo en episodios estelares. Por ejemplo, cuando se trepan en un barco en el mar Adriático, Pablo aconseja al capitán marcha atrás porque habrá mal tiempo y será duro, atroz, implacable, y morirán.
Y nadie le cree. Y al ratito, los vientos huracanados durante catorce días en que la comida escasea y de pronto, zas, el primer milagro de Pablo cuando multiplica los pocos panes que quedaban para dar de comer a 276 (doscientas setenta y seis) personas.
Pero como el huracán arrecia, entonces, y por fortuna, les da tiempo de refugiarse en una isla
TRES. El milagro de la vida
En aquella isla de guerreros, el padre del jefe de la tribu está enfermo de fiebre y disentería y lleva tantos días y noches que la familia únicamente espera la muerte.
Entonces, Pablo hace el milagro número dos y lo sana.
Y luego, la mitad de la isla y la otra mitad de la isla que está enferma desfila ante Pablo y los va curando.
CUATRO. Relatos inverosímiles
Es cuando, además, una víbora se enrosca en el cuerpo de Pablo y la gente exclama que es el demonio.
Pero cuando la víbora, solita, se retira sin causar un rasguño a Pablo, la población isleña dice que es un dios.
Y todos desean estar cerca de Pablo. Hasta el capitán del buque.
Y, bueno, a primera vista, resulta increíble creer a ciegas en la veracidad del relato.
Pero al mismo tiempo, se trata de una crónica de uno de los primeros enviados especiales en el mundo y la verdad está contada y dicha a su tiempo.
¿Fue Lucas un reportero mentiroso, escribiendo y publicando noticias falsas? ¿Tenía imaginación calenturienta, más encendida que Julio Verne? ¿Unicamente escribió y publicó lo que vio, simplemente, lo que vio?
CINCO. Milagros de los doce apóstoles
La crónica de Lucas fue publicada en el Nuevo Testamento hace más de dos mil años y significa gran referencia histórica.
Lucas, como reportero, fue testigo. Por encima de Lucas estaba Pablo y ni modo que Pablo permitiera una noticia falsa. Y más arriba de Pablo estaban los doce apóstoles originales de Jesús. Y tampoco habrían permitido noticias falsas, pues, y en todo caso, ellos resucitaban a los muertos y multiplican los peces y los panes y devolvían la vista a los ciegos y hacían caminar a los tullidos.
Y de ñapa, hacían exorcismos y sacaba al diablo de los cuerpos y almas poseídas.
SEIS. Mentirosos primeros cronistas del mundo…
Forbes ya desmintió a las Noticias Falsas de “Las mañaneras” precisando la fecha, años antes de Amlo, de la publicación de un texto sobre los periodistas espiados.
Allá, entonces, si los feligreses de las iglesias siguen creyendo en el discurso bíblico con tantos milagros prodigiosos, insólitos narrados por los primeros reporteros del mundo…