La Máquina se hizo con los servicios de Walter Montoya, tras pagar cuatro mdd al club español
Cruz Azul se hizo al fin de una de las ‘joyas’ del mercado de invierno: el argentino Walter Montoya, comprado al Sevilla en una cifra cercana a los cuatro millones de dólares. Y se lo ganaron a otros dos grandes del continente: a Boca Juniors, que lo quería a préstamo, e Inter de Porto Alegre, el brasileño que lo buscaba a compra.
El volante ofensivo de 24 años no tuvo oportunidad para mostrar su talento en el club andaluz. Walter llegó a España a principios de año, por una cifra cercana a los cinco millones de dólares, procedente de Rosario Central.
Apenas llegó a Europa, recibió el llamado de Sampaoli para la selección de Argentina. Después, se apagó: jugó apenas siete partidos con los sevillanos, una de las mayores decepciones de la temporada según distintos medios españoles.
Pero el talento de Montoya no se puso en duda en nuestro continente. Boca lo quería para la Libertadores del siguiente año. A la mesa de Cruz Azul llegó la propuesta de adquirir al atacante, y de inmediato sacaron la calculadora. Hicieron una oferta inicial que rechazó Sevilla, pero la segunda se acercó a lo que habían pagado los ibéricos, así que aceptaron.
La Máquina ya había hablado con el representante del argentino y así, sólo falta que llegue a México para hacerlo oficial. Walter Montoya es una especie de relevo del Chaco Giménez, un jugador con mucha proyección ofensiva desde mediocampo, que también luce como extremo por derecha.
El técnico portugués dirigió su primera práctica con La Máquina, donde dejó ver su estilo intenso
La figura de Pedro Caixinha le ha dado un cambio trascendental a la cara de Cruz Azul. La semana de pretemporada en Isla Navidad de Manzanillo, Colima, alejados de los reflectores y fantasmas, ha apuntalado al equipo y el trabajo impuesto por el estratega lusitano ha creado una base en todos los sentidos, pues lo mental y físico fueron llevados a lo más alto, por lo que los de La Noria se encuentran preparados en un gran porcentaje para encarar el Clausura 2018.
Si hay algo que caracteriza al portugués es la intensidad de trabajo. Y es que dentro del campo es un técnico exigente, que pide atención a sus jugadores y los motiva a desarrollar cada ejercicio que ejecutan a la perfección. Una pluma, una libreta y un silbato son objetos que no le faltan al lusitano sobre el terreno de juego, son importantes para esquemar, anotar y darles ejemplo a sus dirigidos de lo que busca.
Ayer, en el entrenamiento matutino, Pedro fue incisivo en el trato de la pelota, pues para él lo más importante es tener control de la redonda y explotar la calidad técnica de cada uno de los suyos, para así tener un futbol ofensivo y pulcritud a la hora de la posesión.
“Qué gran calidad señores, qué buena. Toma la mejor decisión. Bien, bien, eso es creatividad. Sacrificio, sacrificio”, son frases que acompañan en cada momento la práctica y con las que Caixinha impulsa a sus dirigidos.
Los gritos y órdenes hacen de la sesión un rato de alta tensión, acompañado del constante caminar del timonel celeste, que en todo momento vibra con lo que sus jugadores desarrollan en el campo. Un paso a la izquierda, otro a la derecha, y el estratega pide repetir, no descuida en ningún momento a los suyos y hasta se avienta un pique al otro lado del campo para llamar la atención.
Para el lusitano no importa si el ejercicio no sale a la primera, al contrario, corrige y pone el ejemplo de lo que busca, para que al final se consiga el objetivo y lo planeado se lleve perfectamente a la ejecución.
La Máquina culminará su preparación con miras al Clausura 2018, cuando regrese a la Ciudad de México esta noche, en donde sostendrá un partido amistoso ante Querétaro el próximo sábado y así ejecutar los primeros pasos de la era Caixinha.
Con información de record.com.mx