•Caso Ferráez, MORENA, culpable
•La puerta abierta a todos…
Luis Velázquez/Barandal
veracruz.- ESCALERAS: La política se ha vuelto un reality show en la Cuitlamanía. Un espectáculo ridículo y barato dice el politólogo Carlos Ronzón Verónica. El decoro de la investidura, por los suelos. Peor: en las cañerías sucias de la vida pública.
Por ejemplo:
“El toque de queda” a que condena la diputada local de MORENA, expanista, Míriam Ferráez, aquella que en la campaña electoral del año anterior, todavía en la cancha azul, dijera que “AMLO me da asquito”.
“La izquierda pura y sin pecado” escribió John Carlin.
El gobernador, el secretario General de Gobierno y el titular de la Junta de Coordinación Política de la LXV Legislatura paseando como turistas en un pasillo del Palacio Nacional. Y, de ñapa, Cuitláhuac García anunciando a los 8 millones de habitantes de Veracruz que “ya veremos los resultado de estas reuniones en el centro del país”.
En la foto de las redes sociales, Éric Patrocinio Cisneros Burgos, con el dobladillo del pantalón casi arrastrando, como si careciera de ingresos para un buen sastre.
Cuitláhuac, con ceguera estética para combinar los colores de su vestimenta.
Y el diputado Javier Gómez Cazarín, antiguo vendedor de automóviles en el sur, con un traje arrugado, sin planchar.
El encabezado de la foto tan ridículo como la estrategia de Míriam Ferráez:
Aquí, “chambeando en palacio nacional”.
Lo peor del asunto:
De acuerdo con la ley, si el gobernador está ausente de palacio lo sustituye el secretario de Gobierno.
Y si el góber y el secretario de Gobierno están fuera, entonces, el titular de la Jucopo entra al relevo.
El trío de políticos (“Los tres chiflados” les llaman en memes) en palacio nacional, Veracruz, descabezado, a la deriva.
Por eso, Míriam Ferráez asegurando que la única forma de parar el feminicidio (van 29 en la Cutilamanía) es con un toque de queda, virtual Estado de Sitio, las mujeres encerradas en sus casas.
Lo dijo el director editorial de Excélsior, Pascal Beltrán del Río:
Con MORENA en el poder, las grandes estrategias políticas: “Si se roban gasolina, cerrar los ductos. Si matan mujeres, encerrarlas en sus casas”.
Y en su lógica, si militares y navales fallan en la lucha contra los carteles, inventar la Guardia Nacional.
Y si el país ocupa el primer lugar en corrupción política en América Latina, predicar desde Palacio Nacional que si el presidente de la república es honesto, por añadidura todos serán honestos.
Y por decreto.
Y si hay jóvenes sin estudiar carrera, crear cien universidades en la nación.
Y si hay migrantes de América Central huyendo de sus países por la miseria, el hambre y la jodidez y la inseguridad, ponerlos a sembrar árboles en México.
Y si están matando chicas trabajadoras sexuales en la Ciudad de México, que no vayan a los moteles y lleven vida ejemplar de acuerdo con la Cartilla Moral de don Alfonso Reyes escrita hace 75 años para otro México.
Y si hay diputadas como Míriam Ferráez, entonces, aplicar el principio bíblico de “amarrar la lengua”.
PASAMANOS: En el mes de noviembre del año 2017, la diputada Miriam Ferráez fue abucheada en la LXV Legislatura cuando como ferviente militante de MORENA confundió a Fidel Castro Ruz (uno de los héroes de AMLO, el presidente) con Hugo Chávez.
Y, de paso, olvidó el nombre de Vicente Fox Quesada.
Según Ronzón, el caso Miriam Ferráez tiene un trasfondo politico, social y partidista, alrededor de los siguientes vasos comunicantes:
Uno. El año anterior, MORENA abrió las puertas y las ventanas de su casa “a tirios y troyanos” que significaran un voto, enviando al diablo los principios y los valores.
En la vorágine entraron al Movimiento de Regeneración Nacional, los trapecistas de la política de otros partidos y los diputados y senadores Tómbola y los oportunistas y traidores.
El objetivo fue uno solo, como es sumar y sumar “sin ton ni son” para ganar en las urnas.
Y una de las pesadillas de MORENA que ahora se revierte se llama Miriam Ferráez, todo, quizá, porque forma parte de un consorcio radiofónico.
Dos. El tiradero de cadáveres políticos en Veracruz cayendo en MORENA se calibra por el gran fracaso de los diputados de MORENA, PT y PES en la LXV Legislatura para destituir al Fiscal Jorge Wínckler Ortiz, se justifiquen como se justifiquen.
Tres. Sin un líder estatal en MORENA, sin un gobernador fuerte y sin autoridad política y moral, sin nadie que aseste un manotazo y ponga orden, la sangre corriendo en Veracruz como nunca, MORENA queda exhibida con gente como la Ferráez.
Cuatro. MORENA y la Cuitlamanía están pagando el precio de abrir las puertas y ventanas a todos y sin un microscopio.
Cinco. En la realidad real, ningún peso político ni arrastre social encarna la Ferráez, ni siquiera, vaya, en Xalapa, menos de norte a sur y de este a oeste en los 212 municipios.
Seis. La admisión de la Ferráez en MORENA reproduce las historias de los ex diputados de MORENA, Sebastián Reyes, Eva Cadena y Míriam Judith González Sheridan, que de MORENA brincaron, como si nada, al PAN de Miguel Ángel Yunes Linares y Pepe Mancha.
Siete. Lo más grave, a Cuitláhuac García para nada le interesan los casos Ferráez, anexos, conexos y derivados. El, anda en su mundo color de rosa. En la parafernalia pura.
Aquí, escribió en sus redes sociales, en palacio nacional “dando seguimiento a las estrategias que permitirán superar la problemática de Veracruz”.
Frase hueca. Sin sentido ni significado social. La frivolidad, en su más dimensión estelar.
CORREDORES: Igual que la Ferráez hay otros casos de diputados y secretarios del gabinete legal con diarrea lingüística y problemas en el tinaco mental.
Por ejemplo:
José Manuel Pozos Castro, presidente de la Mesa Directiva de la LXV Legislatura:
“Estoy orgulloso de mi nepotismo”, un hijo, subsecretario de Finanzas y Planeación.
Víctor Emmanuel Vargas Barrientos:
“El Fiscal Jorge Wínckler se tiene que ir porque se tiene que ir”.
Adriana Paola Linares Capitanachi:
“Los medios presionan al gobernador para acabar con la inseguridad”.
Mónica Robles Barajas:
“Estamos trabajando para destituir al Fiscal”.
Margarita Corro Mendoza:
“La bamba” es el segundo himno nacional de Tierra Blanca.
Juan Javier Gómez Cazarín:
“Yo, con Zenyazen, hasta la muerte” y la ignominia.
Érika Ayala Ríos:
“¿Ustedes (panistas) qué ofrecen?”.
Juan Carlos Molina Palacios:
“Me declaro diputado independiente y estaré en la JUCOPO”…, y en donde, claro, manejan el billete.
Éric Patrocinio Cisneros Burgos:
“Jorge Winckler caerá en navidad o en día de reyes”.
Hugo Gutiérrez Maldonado:
“Como policía en Nuevo León, toda mi vida he andado con pistola al cincho”.
En la Cuitlamanía hay tanta libertad que cada militante de MORENA anda por su lado, sin un eje central, sin un vaso comunicante, sin una brújula política, sin un capitán del barco.
