Jaime GUERRERO
La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca emitió medidas cautelares a favor de la indígena mixteca, Gabriela Maldonado, quien fue golpeada a latigazos hasta perder el conocimiento por pretender formar parte del cabildo de San Martín Peras y pidió a la Fiscalía General de Justicia de Oaxaca judicializar el legajo de investigación para proceder contra el presidente municipal de San Martín Peras, Santiago Ramírez Cervantes y el sindico Sergio Rivera Flores, así como el agresor.
El coordinador general de las Defensorías Regionales, Juan Rodríguez Ramos, precisó que el pasado lunes dictaron las medidas cautelares que también alcanzan a la Secretaría de Seguridad Pública para que garantice integridad personal de las indígenas Gabriela Maldonado, Rosa Aguilar y Marina Díaz, quienes a partir de 2016 buscaron participar en la elección de su municipio que se rige por el sistema normativo interno o de usos y costumbres.
Y es que ante las respuestas agresivas contra las tres mujeres, la Defensoría inició el expediente desde el mes de noviembre en la oficina de Juxtlahuaca y desde esa fecha se le dictó medidas cautelares, las cuales no fueron acatadas.
Por lo pronto, éste martes se formalizó la queja porque el hecho amerita toda la atención debido a que es intolerable que se recurra a la violencia para impedir derechos constitucionales porque “no se permiten faldas”.
Según la intérprete, Otilia Flores, dijo de las mujeres mixtecas Gabriela Maldonado, Rosa Aguilar y Marina Díaz, han sido víctimas de hostigamiento, amenazas y hasta sufrido latigazos por aspirar a formar parte del cabildo de San Martín Peras.
Recordó que en sus asambleas comunitarias las autoridades son electas únicamente por los mayordomos y los agentes municipales y “aquí no se permiten faldas”.
Sin embargo, las autoridades electorales les hicieron saber de esta violación, razón por la que la autoridad electa nombró a otras mujeres distintas a las que se registraron para participar en el proceso.
Por ello, las mujeres indígenas mixtecas, impugnaron el proceso, razón por la cual, fueron amenazas de muerte.
Las acciones contra ellas, empeoró el pasado domingo, cuando la autoridad municipal citó a Gabriela Maldonado en el Palacio Municipal, lugar donde se encontraba el abuelo de la mujer mixteca, quien fue obligado a golpear con un látigo a su propia nieta.
Como resultado de la golpiza la mujer quedó inconsciente y posteriormente presentó una denuncia formal ante la Fiscalía General del Estado, mientras que las otras dos mujeres han sido amenazadas con encarcelarlos.