Luis Velázquez | El Piñero]
02 de septiembre de 2021
UNO. El profe Zen, privilegiado
Benditos los astros que el secretario de Educación de Veracruz, SEV, siempre fue iluminado para saber que su vocación eran el magisterio y la política.
Nadie dudaría que la política es su segunda vocación y que apareció en el camino y en donde mejor le ha ido que en el salón de clases y en el antro.
Fue, entonces, el titular de la SEV un privilegiado ahora cuando miles de chicos cursan el quinto semestre de seis del Bachillerato y necesitan definir su vocación.
En el palenque público el manifiesto fracaso de la autoridad educativa en la orientación vocacional.
DOS. Chicos indecisos
Montón de muchachos están en la peor encrucijada de sus vidas para definir la carrera universitaria que desean estudiar.
Primero, quizá, la falta de conocimiento de los padres para orientarlos.
Pero mucho más, y segundo, el descuido oficial para considerar la materia de Orientación Vocacional en los planes de estudios primarios, secundaria y bachillerato como prioritarios.
Por eso, tantas indecisiones en los chicos.
TRES. Profes tendenciosos
En algunos bachilleratos, sobre todo, privados, hay profesores encargados de la orientación vocacional.
Pero, válganos, todos inducen a los chicos para seguir estudiando en el mismo colegio particular que también ofrece la universidad.
Luego, entonces, deciden hablar de las aptitudes y cualidades que cada carrera exige.
Siempre, claro, de una manera tendenciosa.
Por eso, ahora cuando habrán de decidir los muchachos sienten que cargan el mundo encima en un camino largo y extenuante poblado de espinas y cardos.
Incluso, muchos, muchísimos llegan al desconsuelo y el llanto, incapaces de mirar una lucecita que alumbre sus vidas.
CUATRO. Perdido otro semestre
Desde siempre, la Orientación Vocacional ha sido considerada una materia de quinto mundo.
Es una de las razones para que la mayoría estudiantil decida cursar las carreras tradicionales, todas, saturadas en el mercado laboral como son Leyes, Medicina, Odontología, Veterinaria, Contaduría, Ingeniería y Comunicación.
Las universidades convertidas, y por desgracia, en fábricas de desempleados.
Lo peor…, vamos casi en el año del sexenio en Veracruz y esta semana inició el quinto semestre del Bachillerato y la Orientación Vocacional en el peor de los mundos.
CINCO. Apostolado social
Sería un milagro que la SEP y la SEV lanzaran una campaña con gran apostolado social para orientar y reorientar las vocaciones juveniles.
La oferta de carreras, por ejemplo, en la Universidad Veracruzana, es amplia, y en cada ser humano existe un manantial inagotable de posibilidades.
Además, tarea superior del Estado es buscar opciones para evitar, entre otras cositas, las peores frustraciones en los egresados.
SEIS. Sótano pedagógico
Muchos chicos, igual que el titular de la SEV, saben desde un principio su vocación.
La mayoría atraviesa mar de indecisiones y titubeos y necesitan la más intensa y sistemática asesoría y gran interés social pensando en su bienestar.
Pero cuando, y como en el caso, el sistema educativo de Veracruz está en el sótano de la calidad nacional, entonces, la Orientación Vocacional se vuelve en automático una materia intrascendente.
Y desde luego, significa el peor error oficial.
Incluso, hay pedagogos para quienes la materia ha de impartirse desde el quinto o sexto año de primaria.
Y, bueno, cuando la SEV se mira como escalafón para brincar a la candidatura de Morena al Senado de la República en el año 2024, así sea en sillas de ruedas y con muletas, se asiste a los eventos oficiales, vaya a ser que el adversario titular de la SEGOB jarocha gane el mandado…