Redacción El Piñero | Corresponsalía
La Comisión Nacional de Derechos Humanos determinó que una mujer en Xalapa, perdió a su bebé por negligencia de los médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social, en cuyo caso evidenció que la institución incurrió en diferentes irregularidades, entre ellas la extirpación del útero.
Los hechos se registraron en diciembre del 2020 cuando la mujer contaba con 35 semanas de embarazo y presentó dolor abdominal por lo que acudió con su ginecólogo quien le informó que tenía una infección vaginal, por lo que le recetó metronidazol en tabletas vaginales, mientras que una enfermera le inyectó ketorolaco para disminuir el dolor abdominal.
De acuerdo el expediente, la fémina tres días después sintió dolor abdominal de nuevo, entonces acudió al área de urgencias del hospital número 11, ahí le realizaron un ultrasonido y a la paciente le informaron que su bebé había fallecido por lo que debían practicarle una cesárea.
«En la misma fecha, después de la cirugía, QV1 fue trasladada a la UMA No. 14, del IMSS, lugar en el que le hicieron un ultrasonido y una tomografía, y le confirmaron que aún tenía líquido amniótico y coágulos de sangre, por lo que tenían que realizarle una segunda cirugía. Del análisis realizado, se determinó que los médicos no agotaron los medios de diagnóstico para otorgarle un tratamiento específico, exponiendo a la mujer a complicaciones secundarias de la infección»
La madre fue víctima de diversas omisiones por parte del personal médico encargado del control prenatal, faltando a los objetivos de prevención, detección y control de factores de riesgo infecciosos a nivel cervicovaginal, omisiones relacionadas con el parto pretérmino que presentó.
En conclusión la Comisión recomendó inscribir a la mujer en el Registro Nacional de Víctimas y proceder a la reparación integral del daño, incluyendo la medida de compensación, así como otorgar atención médica y psicológica.