Luis Velázquez
Veracruz.-DOMINGO Borbotea el infierno.- Se viven días terribles y revolcados en Veracruz. Igual que en el sexenio anterior, fuego cruzado, secuestrados, desaparecidos, asesinados y fosas clandestinas.
Y lo peor, el mismo discurso en el duartazgo se reproduce en la Yunicidad.
Hay tiroteos, porque los narcos disputan la plaza. Hay muertos, porque se trata de un ajuste de cuentas. Hay plagiados, pero es entre ellos mismos. Hay víctimas, pero ninguna es población civil.
Tantito peor, igual que en el duartazgo el reporte de Veracruz a la estadística nacional sobre el saldo de la violencia es mañoso, casi casi como en el pasado inmediato sólo falta reproducir la frase célebre de que “aquí no pasa nada”.
Incluso, un semiólogo diría que la frase anterior bien puede haberse relevado por “no tengo una varita mágica”.
Y/o en todo caso, “tengan paciencia, estamos llegando”.
El jueves de 2 de febrero fue revelado el estado de cosas en el país.
Veracruz, igual que Baja California, Baja California Sur, Guanajuato, Michoacán y Colima, con máximos históricos de homicidios.
Dato estremecedor: en el mes de enero, según versión oficial, 97 muertos en el territorio jarocho.
Y en las primeras 24 horas del mes de febrero, iban ya veinte ejecuciones, más la desaparición de tres policías navales en el Infonavit Buenavista, puerto jarocho.
LUNES
Valemadrismo del Fiscal
Un dato aterrador: en el primer mes de la yunicidad, la página web de la Fiscalía reportó cincuenta personas desaparecidas.
Dato adjunto: la semana que termina en Isla, la Isla del diputado érick Lagos Hernández, registró un feminicidio más. El cuerpo, desmembrado. La víctima, encargada de un bar.
Más aún: a un lado, hacia el sur de Veracruz, una profesora fue secuestrada.
Y en Cosoleacaque, otro decapitado, arrojada el cuerpo a orilla de la carretera federal.
Y en Platón Sánchez, el tiro de gracia a un cristiano, su cadáver tirado en la carretera.
De ñapa, la impunidad.
El Fiscal elegido por nueve años, igual que su antecesor, Luis Ángel Bravo Contreras, ha caído en el cinismo y el populismo mesiánico.
El día del temblor el jueves a las 4 de la madrugada, siguiendo los pasos de Donald Trump, tuiteó que como tiene la conciencia tranquila ni siquiera, vaya, sintió el sismo.
En contraparte, la Procuraduría General de la República dice que Veracruz, Guerrero y Tamaulipas concentran el 60 por ciento de las desapariciones con mil 14 expedientes abiertos de los años 2014 a 2016.
Y oh paradoja, todos, en la impunidad que al Fiscal por ningún lado interesa, ocupa ni preocupa.
La indiferencia y el menosprecio igual que Javier Duarte.
MARTES
Todo, igual que en el duartazgo
Se entiende: los carteles y cartelitos tienen a prueba a la Yunicidad. Le están mostrando el puño. “Midiendo el agua a los camotes” y a la temperatura social y a su capacidad de reaccionar.
Y aun cuando, cierto, la Yunicidad ha entrado al tercer mes de los 24 que ejercerá el poder y gobernará teniendo como prioridad el Maximato azul, el tsunami de violencia, la sicosis, el miedo, la incertidumbre y la zozobra están igual que antes.
De hecho y derecho, como si los malosos siguieran ganando la batalla y que en el sexenio anterior se tradujo en el peor capítulo en la historia nacional, como es la desaparición forzada, en que los policías y sus delegados de Seguridad Pública y los mandos medios y quizá altos son aliados, socios y cómplices de los barones de la droga.
Mal, porque en la campaña electoral, el discurso del candidato aliancista del PAN y PRD levantó demasiadas expectativas cuando alardeara que israelitas, colombianos, Genaros García Luna y la Policía Intermunicipal, incluso el mismo Yunes azul, estarían al frente del combate crucial a la delincuencia organizada.
MIÉRCOLES
Mera percepción ciudadana
En el barranco, la Yunicidad sigue repitiendo el otro discurso del duartazgo.
Que los marinos, que ya estaban, continuarían aquí.
Que también los soldados.
Que la Gendarmería, que entró en días y noches difíciles como el caso de los cinco jóvenes de Playa Vicente secuestrados en Tierra Blanca, regresará debido a la gestión del Yunes azul.
Y que además, el CISEN, Centro de Información y Seguridad Nacional.
Y que las Policías Federales.
Y que suscribieron un convenio con el gobernador de Tabasco, el perredista Aurelio Nuñez, para blindar los límites territoriales.
El resultado desencanta y decepciona.
Veracruz es un río de sangre y el valle de la muerte en la yunicidad, donde la población agradece, digamos, las buenas intenciones, pero nada más doloroso que las familias sigan enlutándose, así cacareen, como en el duartazgo, la captura de una banda de secuestradores y asesinos y el rescate de una que otra persona.
Y ni modo que los dos ejecutados esta semana en Coatzacoalcos por un comando armado y el joven asesinado de 9 balazos en Teocelo y los dos hermanos levantados en Coatzintla y las seis bolsas con restos humanos en Santiago Tuxtla sean, como dicen desde el gobierno azul, “mera percepción ciudadana”.
JUEVES
Deuda social con Veracruz
Cierto, el resto del país está igual. O peor, pues en otras regiones las grandes ligas de los carteles se han concentrado.
Allá cada entidad federativa y cada gobernador con sus pendientes.
Y es que como dice el senador Pepe Yunes Zorrilla, Veracruz está ensombrecido por los efectos de la delincuencia.
“Veracruz se ve debilitado. Se disminuye por cada persona que desaparece o muere víctima de la inseguridad.
Y se trata de una deuda moral con la sociedad”, más allá de que Javier Duarte tenga su carga de responsabilidad.
Grave las arcas saqueadas. Grave la deuda pública. Grave el reclamo de los alcaldes por las participaciones federales retenidas.
Grave el analfabetismo de 600 mil paisanos. Grave la llamada “crisis humanitaria” en los hospitales públicos. Grave el agua destilada a los niños con cáncer como quimioterapia.
Pero más, mucho más grave el atropello a la vida. Y a las garantías constitucionales. Y a los derechos humanos, simple y llanamente, porque el Estado de Derecho sigue rebasado por el Estado Delincuencial, incluso, por el Estado Policiaco, en que parte de las corporaciones están sometidas por los malandros.
VIERNES
Hecho, lo único que cuenta
Ningún ser humano vino al mundo para ser infeliz. Todos hemos venido para la felicidad.
Y si de pronto aparece un gobernador con fama de peleador callejero…
Bronco y bragado…
Con la mirada que siempre trae a la defensiva y provocadora…
Paladín de la ley y la justicia como se ha mostrado…
Echado para adelante gritando a los carteles que iría por ellos, porque “yo sí tengo experiencias y tengo pantalones”, caray, gracias al Ser Superior en que cada quien crea porque tenemos aquí, entre nosotros, a un “Llanero solitario”.
Ahora sí, “podemos ir en paz” porque un guardián vigila el territorio jarocho de norte a sur y de este a oeste.
Pero los días y las noches caminan en el bienio y la vida está igual de exaltada, a la orilla del precipicio, como en el duartazgo.
Y en la vida, como en la política, el único aval de los hombres son los hechos.
Sin los hechos, la palabra discursiva, la declaración mediática, la promesa en corto, nada significa.
Es fuego pirotécnico. Estopas que arden, pero fuego y humo que pasa. Noticia en la mañana como dice Héctor Lavoe, pero olvidada al mediodía.