Luis Velázquez | Diario de un Reportero
08 de mayo de 2021
DOMINGO
Días sombríos
Se viven los días más sombríos. Son los días donde, además, los partidos políticos y sus candidatos humillan a la población en la miseria, la pobreza, la jodidez y el desempleo.
Los días cuando todos, sin excepción, ofrecen las mieles de la vida, conscientes y seguros que rara, extraordinaria ocasión, honrarán su palabra.
Los días cuando los candidatos ofrecen, entre otras cositas, empleo, y por citar una referencia, únicamente en Veracruz debido al COVID ciento cuarenta y seis mil (146) empleos perdidos según el maestro Hilario Barcelata.
Además, 44 (cuarenta y cuatro) empresas desaparecidas en un año.
Días sombríos cuando los aspirantes a un cargo de elección popular “se rasgan las vestiduras” garantizado la más insólita seguridad en la historia local, en tanto Veracruz, en el primer lugar nacional de feminicidios, secuestros y extorsiones.
La vida es así y así es la vida reza un dicho peruano. Y ni hablar, la esperanza social ha sido convertida en desesperanza popular.
Cada vez, los candidatos vendiendo esperanzas creyendo que los ciudadanos de a pie les creen a ciegas porque un montón de nuevos mesías caminan de norte a sur y de este a oeste para salvar la tierra.
LUNES
El botín
Las tribus políticas se repartirán más de dos mil cargos públicos que dice el jefe de MORENA en Veracruz.
Alcaldes, síndicos, regidores y funcionarios de confianza en los Ayuntamientos, como el gran botín.
Y en el otro lado de la cancha, y luego de 79 (setenta y nueve) gobernadores en la historia local, 6 millones de los 8 millones y cacho (unos cien mil) de habitantes de Veracruz en la jodidez total y absoluta.
Medio millón de paisanos haciendo únicamente dos comidas al día, y mal comida, debido a la precariedad.
Veracruz, más grande que varios países de América Central (Honduras, San Salvador, Guatemala y Salvador), pródigo en recursos naturales, habitado por gente olvidada de Dios.
Y, sin embargo, los políticos ofreciendo “el reino de los cielos” en los próximos 4 años como alcaldes y 3 años como diputados locales y federales.
Lo peor, muchos ciudadanos de a pie agarrados por hambre y apostando a la esperanza para ver si alguna velita pudiera encenderse en sus vidas con un familiar, un amigo, un conocido, encumbrado, pues basta y sobra con que un cercano obtenga un cargo público para que la vida cambie para los suyos y los próximos.
MARTES
Carrusel de caballitos
La contradicción: en cada campaña, los candidatos ofrecen las mismas ofertas de que carece la población.
Inversiones, trabajo, seguridad, calidad educativa y de salud, procuración de justicia y desarrollo humano, desfilan como en un carrusel de caballitos en fiesta pueblerina los juramentos de los aspirantes y suspirantes para amarrar el voto en las urnas.
Pero por aquí ganan, en el primero y segundo y tercero y cuarto año de gobierno edilicio, los únicos beneficiados son los políticos y sus familias y amigos y socios, aliados y cómplices.
Ellos solitos se reparten las mieles del poder. Y la única calidad de vida que va mejorando es la de ellos y los suyos.
Tal cual, igualito, ha sido desde la noche más oscura y sombría de todos los tiempos y nada, absolutamente nada, indica ni anuncia que las circunstancias, con todo y 4T puedan mejorar.
Cada 3 años (diputados), y 4 (alcaldes) y 6 (gobernadores y senadores, etcétera) aparecen políticos enriquecidos, como si tuvieran una fábrica de billetes de la Lotería y/o del Melate, y todos premiados.
Podrán los políticos “darse golpes de pecho” y allá cada ciudadano con credencial de elector si les cree…
MIÉRCOLES
Agarrar por hambre…
Por lo general, los patrones en las empresas, fábricas, industrias, comercios y negocios, etcétera, y los políticos, más, mucho más los políticos, agarran por hambre… a los demás, a la población electoral, a los ciudadanos de a pie.
Y agarrar por hambre significa el peor atropello a la dignidad humana.
La ofensa más dura, ruda y canija.
La humillación total.
Y es cuando, y por ejemplo, cuando una persona desempleada, un padre de familia necesitado de una beca estudiantil para un hijo, un familiar enfermo y de gravedad, unos padres ancianos en la precariedad, la gente suele aceptar y hasta resignarse a la humillación porque es el único camino posible para una solución inmediata al pendiente.
Es cuando los políticos suelen ensañarse, pues por más y más cargos públicos desempeñados y maestrías y doctorados que tengan o pudieran tener, y por más ostentación de su trayectoria pública, en ningún momento los hace buenas personas.
Un dicho popular lo dice así: “Es fácil ser bueno. Lo difícil es ser justo”.
En política, y por lo general, los funcionarios públicos al frente de una oficina con presupuesto agarran por hambre a los demás.
Incluso, llegan a la sevicia y a la sevicia sexual.
JUEVES
Memorial de la Estafa
En el día con día del mes de mayo sería interesante llevar la bitácora de algunos candidatos a presidentes municipales enlistando todas y cada una de las promesas y esperanzas tendidas en el palenque público y el tianguis de “las tomaduras de pelo”.
Luego, y en la víspera del cierre de la campaña enlistar por día las esperanzas ofrecidas y que dejarían perplejos y atónitos a los Reyes Magos.
Sería una especie de Memorial de la Estafa Universal.
Con todo y que en el peor cinismo de la vida algunos candidatos suscriben y ante notario público la lista de compromisos que cumplirán.
Todavía peor, cuando apenas, apenitas transcurre el primer año de gobierno y los alcaldes y gobernadores y presidentes de la república y diputados alardean que ya cumplieron la mayor parte de las promesas.
Y en el otro lado de la cancha social ocurre que la gente sigue igual, o peor, de jodida.
Pobre naciste. Pobre vives. Pobre morirás.
Los ciudadanos de a pie utilizados siempre, siempre, siempre, siempre, como “carne de cañón” electoral y social.
“Por el bien de todos (ajá), primero los pobres”.
“Ta’güeno”.
VIERNES
La tierra prometida
600 mil muertos en la guerra de Independencia. Un millón de muertos en la Revolución.
Trescientos muertos en la sublevación obrera textil de Río Blanco, Veracruz, el 7 de enero de 1910.
Cuarenta mil campesinos asesinados en la década de 1930 por los sicarios de “La Mano Negra”, el cacique de Almolonga, Manuel Parra, al servicio de los latifundistas y gobernadores en turno.
“¡Mátalos en caliente!” ordenó Porfirio Díaz Mori a su compadre, el gobernador de Veracruz, Luis Mier y Terán, para ajustar cuentas, hasta con tiro por la espalda y tiro de gracia, a los jarochos revelados a su nueva reelección.
Veracruz, primer lugar nacional en feminicidios. Veracruz, en el duartazgo, primer lugar mundial en asesinato de reporteros y desaparecidos.
Es el destino manifiesto para los jodidos en la tierra jarocha a la que cantaran Pablo Neruda, Rubén Darío, Gabriela Mistral, Chavela Vargas y Juan Gabriel y cantan Yuri y Paquita la del barrio.
La tierra que en el año 1800 deslumbrara a Alejandro de Humboldt, primero, por la riqueza natural, y segundo, por la peor desigualdad económica y social, no del país, sino de América Latina.