POR: Rodolfo Ruiz R.
México.- Los pleitos de Diódoro Carrasco Altamirano con algunos colaboradores del primer círculo del ex gobernador Rafael Moreno Valle Rosas han puesto en la mira a ciertos funcionarios de la Secretaría General de Gobierno (SGG) cuyo tormentoso pasado podría convertirse en tema de columnas políticas.
Por lo pronto se sabe que al titular de la SGG han comenzado a contabilizarle todos los nombramientos de oaxaqueños que ha realizado en la dependencia encargada de la política interior del estado.
Como parte de esta investigación trasciende que Diódoro Carrasco ha designado a subsecretarios y directores que fueron sancionados o inhabilitados del servicio público, o que son dueños de un pasado nada envidiable en términos éticos y profesionales.
Pero también que Diódoro Carrasco tiene cobrando a decenas de oaxaqueños que aparentemente no figuran en el directorio de la SGG, pero que ya despachan aunque en el portal de transparencia se diga “por designar”.
Entre los subordinados enlistados destacan:
Roberto Pedro Martínez Ortiz, subsecretario de Gobierno, que fue director general de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de Gobernación federal de 1999 a 2000, periodo en el que fue cuestionado por adquisiciones y pagos indebidos en la Policía Federal Preventiva que derivaron en un daño patrimonial estimado en 5.7 millones de pesos y 349 mil 100 dólares americanos.
Rubén Darío Herrera Cabrera, director general de Protección Civil y ex director de módulos de maquinaria en el gobierno de Gabino Cué Monteagudo y ex coordinador en la Secretaría de Finanzas de Oaxaca en la gestión de Diódoro Carrasco.
Luis Miguel Bustamante Zardain, secretario privado de Diódoro Carrasco y ex vocero del movimiento #YoSoy132 en la asamblea del ITAM.
Joaquín Enrique Neyra Skidmore, cuyo nombramiento aún no se transparenta en la SGG, pero que fue subsecretario de Egresos y Control Presupuestal de la Secretaría de Finanzas de Oaxaca y que en 2008 fue denunciado penalmente por ejercicio indebido del servicio público.
Sergio Arnaud Galguera, director de Recursos Materiales y Servicios Generales, y ex subdirector de Administración y Finanzas de los Servicios de Salud de Oaxaca.
Otros personajes que supuestamente ya fueron reclutados por Diódoro Carrasco pero que aún no aparecen en el portal de transparencia de la SGG son Jorge “Coco” Castillo Díaz y Jaime Arturo Hidalgo López, ex director de Recursos Materiales y Servicios Generales y ex director general de Programación de la SG, respectivamente.
Otra Universidad Tecnológica que pronto podría verse envuelta en conflictos laborales y de corrupción es la de Oriental (UTO), de la cual es rector Mario Antonio Bonilla Martínez.
La matrícula de la institución ha ido cayendo, y los alumnos se quejan del bajo perfil académico de algunos profesores y de las ausencias de algunos directivos que sólo acuden a la Universidad uno o dos días a la semana.
Problemas que ya son del conocimiento de la SEP federal a través de la Coordinación General de Universidades Tecnológicas y Politécnicas, a la cual han llegado escritos de académicos y estudiantes denunciando bajas en la matrícula como consecuencia de la poca calidad de los programas de licenciatura ofertados por la UTO.
En una de estas denuncias se dice que el rector promovió como director de Planeación a Rafael Solares, que antes despachaba como abogado general, para favorecerlo con un sueldo de 40 mil pesos mensuales; que nombró como directora académica a Noemí González Barrientos, pese a sus escasos méritos académicos; y que el abogado general Joel Cabrera Gutiérrez y el director de Vinculación, Alejandro Alcaide Rivera, sólo acuden uno o dos días a la semana por tener otras chambas fuera del municipio de Oriental.
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