Luis Velázquez | Escenarios
17 de junio de 2021
UNO. 25 años y alcalde
Se llama Néstor Enrique Sosa Peña. Y tiene 26 años. Y es nieto de un exsíndico y un exalcalde. Y egresado de la Facultad de Derecho de la Universidad Veracruzana, donde fue consejero alumno. Y es el presidente municipal electo más joven del estado de Veracruz con sus 212 Ayuntamientos.
Los próximos 4 años ejercerá el poder y gobernará Chontla, su pueblo en el norte de Veracruz, en la sierra de Otontepec.
Y desde antes creó y recreó su asociación política. Se llama Compromiso con Veracruz.
¡Ah!, también fue candidato a diputado local pluri y perdió. Y para redondear lo que define como su pasión por el ejercicio político desde niño era articulista en el periódico Vanguardia.
DOS. Joven viejo
Es orador. Igual que el profe Guillermo Zúñiga Martínez quien de joven ganó el Premio Nacional de Oratoria convocado por el periódico El Universal, Fernando López Arias gobernador, a los 26 años continúa soñando, digamos, como un socialista puro, un comunista, un miembro de la comuna fundada por los apóstoles de Jesucristo.
Quiere, sueña, jura y perjura solucionar “todas las demandas sociales y sin distinción alguna”.
Ese lenguaje es viejo, dinosáurico, matusalénico. Pero, bueno, así, repitiendo el estribillo ganó en las urnas la alcaldía.
TRES. El niño legislador
De niño fue nombrado legislador por el distrito de Tantoyuca, el feudo de Joaquín Guzmán Avilés, presidente del CDE del PAN, en el Parlamento Infantil.
Luego representó a Chontla, su pueblo, en el Congreso de la Unión como el niño legislador.
Y fue líder en la escuela secundaria de Chontla.
Y líder del Comité de Jóvenes Adelante del COBAEV.
Y presidente de un comité estatal organizador del Simulacro Electoral COBAEV.
El niño y joven político se estaba formando.
El día cuando llegó a la Facultad de Leyes de la UV también entró al activismo estudiantil y hasta consejero universitario fue… según él mismo escribió en un muro de red cibernético.
CUATRO. Jóvenes genios
A primera viste, y a los 26 años, el viejito del barrio diría que Néstor Enrique Sosa Peña llegó a la alcaldía de Chontla, digamos, por un partido de izquierda. Quizá MORENA, acaso Movimiento Ciudadano, quizá el PRD.
Pero llegó por el PRI, el partido que en los años 2016 y 2018 perdiera la gubernatura en Veracruz y el 6 de junio le fue tan mal, tan mal, tan mal que de las 212 presidencias municipales solo ganó veintidós, y de las 20 diputaciones federales solo una y de las 50 diputaciones locales, únicamente dos, y las dos, pluri.
Insólito que un chico menor de treinta años siga creyendo en el PRI.
Quizá la formación familiar. Acaso su biografía estudiantil. Más, como en el caso cuando asegura que desde niño le entró la vocación social con su abuelo, exsíndico y exalcalde.
A los 25 años, Gonzalo Morgado Huesca era presidente del CDE del PRI y diputado local.
A los 24 años, Antonio Vázquez Figueroa, director del DIF con Fernando López Arias y diputado local.
A los 22 años, Miguel Ángel Yunes Linares, juez en Coatepec. A los 23, asesor jurídico del gobernador Rafael Hernández Ochoa.
A los 24, subdirector de Patrimonio del Estado. A los 25, diputado local y líder de la CNOP.
CINCO. Gobernar sin distingos
Pero, bueno, cuando un político llega al poder público, entonces, el ropaje ideológico necesita hacerse a un lado y gobernar para todos, como el mismo Sosa Peña dice, sin distingos.
Con todo, un mérito, una honra, un privilegio, tener como feligrés en el partido rojo (tan partido) al presidente municipal más joven de Veracruz.