Redacción El Piñero
Esta es la carretera que une a dos regiones: La Cuenca del Papaloapan y Los Tuxtlas, en el Sur de Veracruz. Y para quienes la transitan, precisan que se ha convertido en una zona de alto peligro, debido a su evidente abandono.
Hoyancos de hasta un metro de diámetro en varios tramos de esta carretera del sur, son verdaderas trampas mortales.
En un obligado recorrido por esa añeja vía de comunicación, se observan enormes huecos que representan grave peligro para transeúntes y automovilistas.
Los baches que se observan a lo largo de ambos carriles de la carretera, son evidentes muestras de que ha sido abandonada desde hace muchos años.
Esta arteria que une a dos regiones pide a gritos ser rehabilitada, atendida por las autoridades locales, estatales y federales, pues cerca de donde se encuentran los enormes baches, una planta produce mezcla para pavimentar carreteras en mal estado. Pero, tal parece, quienes la controlan son ajenos a todo auxilio cercano.
A pesar de que los habitantes radicados a lo largo de esta carretera han solicitado el apoyo para rescatarla, los funcionarios involucrados al respecto, han volteado los ojos en esta región.
Las imágenes captadas por el El Piñero, Periodismo y Debate, muestran como el tiempo, el uso, la lluvia y otros factores de igual importancia, han levantado metros de pavimento en ambos carriles, en las orilla y en el centro de la carretera interestatal que une a la Cuenca con los Tuxtlas, en el sur de Veracruz.
Quienes diariamente sufren el desastroso recorrido son campesinos, transportistas, maestros, hombres y mujeres que en temporada de elecciones les han pedido el voto para mejorar sus condiciones de vida.
Y que decir de turistas que llegan con la intención de sorprenderse con los atractivos naturales que presumen estas bondadosas regiones veracruzanas. Y que al llegar solo son sorprendidos por caminos convertidos en polvo, intransitables, altamente peligrosos.