Luis Velázquez Escenarios
27 de abril de 2019
UNO. Oleaje desorbitado
El presidente de la república glorificó al gobernador dos días seguidos. El 20 de abril en la Escuela Naval Antón Lizardo y el 21 en la conferencia de prensa mañanera en la ciudad de Veracruz.
Y en contraparte, la CANACINTRA, Juan Manuel García, presidente, declaró a Coatzacoalcos un pueblo fantasma.
Un pueblo más, atrapado en el oleaje desorbitado de Veracruz.
A: El 45 por ciento de las empresas locales han cerrado por la inseguridad, la incertidumbre y la zozobra.
B: Los empresarios han necesitado redoblar su seguridad personal, claro, con el auge de la seguridad privada.
C: Han exiliado a sus familias del pueblo para estar más o menos seguros de la supervivencia de todos ellos.
Y D: Ahora, “ni modo, la violencia es inevitable”, decía Agustín Acosta Lagunes, los empresarios “son personas que viven solas por temor a la inseguridad” (Diario de Xalapa, 23 de abril).
Un nuevo rostro social de la violencia.
Por fortuna, la iniciativa privada sureña tiene posibilidad de migrar. Pero al mismo tiempo, el grueso de la población sigue viviendo en el infierno llamado Coatzacoalcos.
“Los ricos, decía Luiz Inácio Lula de Silva, se cuidan solos”. El Estado, obligado a garantizar la vida de la clase media y baja.
DOS. Entre la espada y la espada
El gobernador decía que en dos años pacificaría Veracruz. AMLO acortó el tiempo y dijo que en los próximos seis meses.
Será difícil que en un semestre mejore la seguridad advirtió un día después el presidente municipal de Xalapa.
Entonces, el presidente de la Junta de Coordinación Política de la LXV Legislatura fue categórico. “Se requiere, dijo, mano dura”. El, tan feliz, que canta en su camioneta cuando maneja, se filma y trepa el video a las redes sociales.
Mientras, Canacintra “pone el índice en la llaga purulenta” como es la confrontación que parece eterna entre el gobernador y el fiscal, incluídos, los secretarios General de Gobierno y de Seguridad Pública.
En tanto, Coatzacoalcos, atrapado entre la espada y la espada.
En el pueblo sureño apostaron a la revolución pacífica y los ciudadanos tomaron las calles y avenidas en marchas y plantones ante el palacio municipal, carta a la ONU, Organización de las Nacionales Unidas, solicitando apoyo y la Plataforma Change levantando firmas, pero sin ningún resultado.
En el palacio de Xalapa están felices porque el presidente de la república vitorea al gobernador.
En todo caso, aun cuando la población esté desencantada, lo único importante está en seguir usufructuando la confianza del dios terrenal.
TRES. Virtual Estado de Sitio
Veracruz está convulsionado. Virtual Estado de Sitio y Toque de Queda en muchos municipios.
Apenas anochece, las familias se centran sus casas para evitar, hasta donde sea posible, una bala perdida, un secuestro, una desaparición, con todo y que como sucedió en Minatitlán, en una fiesta privada maten a trece personas, entre ellas, un bebé y 5 mujeres.
Con todo y como en Córdoba, los carteles persigan hasta a una niña de diez años y la asesinen.
Con todo y que las familias paguen el secuestro millonario de un hijo y sin embargo, sea asesinado.
El presidente de la república estuvo ayer en Minatitlán, el infierno de la matanza del viernes 19 de abril en la noche, digamos, para llevar consuelo al pueblo petrolero, pero mucho se duda la violencia disminuya así nomás.
De por medio está la jugosa plaza Veracruz que tanto dinerito significa para los carteles con el tráfico de droga, el secuestro exprés, el derecho de piso, la prostitución, la trata de blancas, los migrantes y el huachicoleo.