- Jefe de partidos políticos
Luis Velázquez/ Escenarios
Veracruz.- UNO. Yunes Linares, el tlatoani
Hay priistas que enaltecen al panista Miguel Ángel Yunes Linares y casi casi lo declaran con más genio que Plutarco Elías Calles.
Por ejemplo, unos sienten y perciben lo siguiente:
Trae al PAN, con todo y la impugnación a su presidente en el CDE, Pepe Mancha.
Trae al PRD con Rogelio Franco Castán.
Trae a una parte del Panal, a través del exduartista, Vicente Benítez.
Trae a una parte del PES, a través del diputado local, Gonzalo Guízar Valladares.
Y ahora, va por el CDE del PRI, a través del regidor con licencia, Marlon Ramírez.
Se ignora si en realidad a Yunes alcance la fuerza política descrita, pero una parte de las elites tricolores así lo miran.
Incluso, aseguran que mientras el ex gobernador aumenta sus parcelas de poder, MORENA está engolosinada con la gubernatura y la mayoría en la LXV Legislatura, y cuando lo adviertan, el azul se habrá quedado “con hacha, calabaza y miel”.
Por eso mismo, advierten otras elites, el gobierno de Veracruz ha interpuesto denuncias penales por el presunto desvío de recursos en su tiempo.
DOS. Objetivos, 2021 y 2024
El ex ha dicho que vivirá 110 años, y como tiene 65, entonces, le restarían 45 años más de vida para seguir adueñándose del mundo político local y quizá, para entonces, nacional.
Por lo pronto, su biógrafo priista dice que siembra en el surco para el año 2021, en que irá por las presidencias municipales y diputaciones locales y federales.
Y de ganar en las urnas, listo para lanzar a uno de sus hijos (quizá le toque a Fernando Yunes Márquez) como candidato a gobernador.
Además, involucrado en un proyecto político nacional con el senador y ex secretario de Gobernación y ex fallido aspirante presidencial, Miguel Ángel Osorio Chong, tan reciclado en la vida política.
Y más, con la derrota de José Antonio Meade.
Y más, en caso de que MAO, como le llaman en Veracruz, quedara como presidente del CEN del PRI, ahora cuando el ex rector de la UNAM prefirió la cancha partidista al salón de clases y al cubículo de investigación en la máxima casa de estudios.
Entre tanto, el Yunes azul sigue apropiándose de más partidos políticos al mejor estilo de Nicolás Maduro en Venezuela y de Daniel Ortega en Nicaragua y de Evo Morales en Bolivia.
TRES. Yunes contra Yunes
En el CDE del PRI hubo un sismo en el cisma partidista ahora cuando lanzaron la convocatoria para la presidencia.
De pronto, el diputado federal, Héctor Yunes Landa operó la candidatura del ex alcalde de Paso de Ovejas y ex legislador local, Adolfo Ramírez, llevando como suplente a Silvia Domínguez, quien tiene una estrellita hectorizada en la frente.
Y se registraron.
Fue una respuesta de Yunes Landa a Yunes Linares de quien se afirma tiene como candidato al regidor Marlon Ramírez, y una de cuyas hadas madrinas es la diputada federal, Anilú Ingram Vallines, empujando la carreta con MAO.
Incluso, el día de su registro en el CDE de Lillian Zepahua, Marlon llevó como trofeo a su lado a Jorge Alejandro Carvallo Delfín, uno de los duartistas más beneficiados en aquel sexenio y a quien nunca, jamás, el Yunes azul, igual que a Érick Alejandro Lagos Hernández, tocara en los dos años de su gubernatura.
Así, una vez más, Yunes contra Yunes.
El Yunes azul dando la pelea con todo el rigor y la enjundia como el primer día de su vida pública.