* Durante las movilizaciones llevadas a cabo hoy en conmemoración del Día Internacional de la Mujer, se registraron diversos incidentes en distintos puntos del Centro Histórico de la Ciudad de México.
Mujeres protestantes lanzaron bombas molotov a las afueras de Palacio Nacional; en tanto, otras lograron burlar el cerco de protección colocado en el Hemiciclo a Juárez para realizar pintas y destrozos.
Ciudad de México, 8 de marzo (SinEmbargo).– El lanzamiento de bombas molotov, pintas y destrozos a monumentos e inmuebles del Centro Histórico capitalino, así como enfrentamientos entre feministas y grupos pro-vida, fueron algunos de los incidentes registrados el día de hoy durante la marcha del Día Internacional de la Mujer en la Ciudad de México.
Un grupo de personas encapuchadas lanzó bombas molotov a las Puertas de Palacio Nacional, ubicado en la plancha del Zócalo. Esto provocó un conato de incendio en la zona que fue atendido rápidamente por servicios de emergencia.
Debido al fuego provocado, una mujer resultó lesionada, por lo que de inmediato fue atendida por el personal de la Brigada Humanitaria de la Paz Marabunta.
Durante el discurso ofrecido por las mujeres en un temple colocado al frente de Palacio Nacional, se mencionó que los responsables de los ataques con bombas molotov fueron “infiltrados”.
En tanto, una de las puertas de Palacio Nacional fue rociada con pintura roja.
BURLAN CERCO EN HEMICICLO A JUÁREZ
Un grupo de mujeres encapuchadas y vestidas de color negro logró traspasar el cerco de protección instalado por las autoridades en el Hemiciclo a Juárez.
Algunas protestantes lograron evadir las vallas de una altura de dos metros; una vez dentro, realizaron pintas y destrozos a los monumentos capitalinos.
En tanto, otro grupo de mujeres logró abrir una de las vallas; por lo que enseguida las mujeres policías encargadas de resguardar se movilizaron para formar una valla humana y así impedir el paso de las inconformes, generando tensiones entre las protestantes y las autoridades.
Hacia el Palacio de Bellas Artes se registró un conato de bronca entre las mujeres inconformes y elementos de Protección Civil, debido a que las protestantes buscaban derribar las vallas protectoras.
Sin embargo, la estatua de Madero fue vandalizada por las manifestantes, quienes quitaron el cerco protector y algunas golpearon la edificación con martillos.
AVENIDA JUÁREZ Y 5 DE MAYO
Las avenidas Juárez y 5 de Mayo fueron dos puntos afectados por destrozos y pintas en el paso de las mujeres que protestan en el Día Internacional de la Mujer.
Diversos establecimientos, como uno de comida rápida, de la zona, fue afectado con pintas, causaron vidrios rotos y les prendieron fuego.
La unión entre las avenidas Juárez y República es el ejemplo más claro de los destrozos causados por el paso de las inconformes.
También varias fuentes ubicadas en la Alameda Central fueron teñidas de rojo por mujeres como protesta contra los feminicidios en territorio nacional.
Pese a que otros manifestantes exigían que no hubiese violencia durante la protesta, esto no fue suficiente para que los incidentes violentos no se hiciesen esperar.
FEMINISTAS CHOCAN CON PRO VIDA A LAS AFUERAS DE LA CATEDRAL
Integrantes de colectivos feministas chocaron con grupos activistas religiosos que se pronunciaron contra el aborto a las afueras de la Catedral Metropolitana.
Las mujeres protestantes que portaban un pañuelo verde, se enfrentaron con los grupos pro vida quienes portaban un pañuelo azul, símbolo que indica que se está contra el aborto, bajo el argumento de que la vida debe de ser “protegida” desde el momento de su concepción.
Una de las exigencias de esta movilización tiene que ver con que las autoridades garanticen un aborto libre y seguro.
Las feministas arrancaron las mantas y carteles colocados por los grupos religiosos, quienes buscaron resguardar el recinto religioso formando una cadena humana. Algunas de las mantas realizadas por los grupos religiosos advertían que “el aborto es el primer feminicidio”.
Por lo que las mujeres inconformes se hicieron de palabras y les lanzaron gas y pintura con el fin de dispersarlos y poder ingresar al recinto eclesiástico sin mayor éxito.