- El gobernador enfureció
Luis Velázquez/ Barandal
ESCALERAS: El gobernador Yunes cumplió con el Instituto de Pensiones, IPE, y la Universidad Veracruzana, UV, dice el líder sindical del FESAPAUV Enrique Levet Gorozpe.
Y luego del duartazgo sentó un precedente porque, además, pagó de manera puntual a los jubilados.
“Tuvo la claridad de cubrir cada mes las pensiones” asegura el dirigente cuando el sexenio anterior obligó a los jubilados a protestar en las calles y avenidas al grado del agravio y atropello a los derechos humanos, incluso, con las corporaciones policiacas en su contra.
En el caso del IPE pagó los recursos para cubrir el déficit milenario que se arrastraba sin tocar, incluso, las reservas de las Pensiones.
Cierto, “no cubrió la deuda histórica porque, además, sólo fueron dos años de su gobierno, además, de que la deuda es imprecisa.
Al momento, no ha sido conciliada con el gobierno del Estado y es aventurado decir un monto de la deuda”.
Buscó, sin embargo, que los organismos públicos que reciben servicio del IPE (los Ayuntamientos, la Fiscalía, el Tribunal Superior de Justicia y los CECYTEV, los que más están endrogados con el pago de las cuotas obreropatronales) pudieran achicar su pendiente.
PASAMANOS: Y más en casos emblemáticos, como los Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Veracruz (CECYTEV) cuyo director en el sexenio anterior, el expriista y ahora morenista, Fernando Arteaga Aponte, “dejó colgado de la brocha” al IPE con una deuda de 200 millones de pesos.
Pero, bueno, el cabildeo de Yunes fue insistente y aun cuando tales instituciones cubrieron una parte quedaron otra parte por cumplir.
En el caso de la Universidad Veracruzana quedó pendiente el pago de la deuda histórica y que viene arrastrada desde sexenios anteriores.
Pero, sin embargo, el Yunes azul resolvió parte de la deuda por las retenciones del Impuesto Sobre la Renta de los trabajadores del duartismo y que era de mil 900 millones de pesos.
Disminuyó, cierto, dice Levet, pero no lo suficiente, y significa el problema crítico financiero de la máxima casa de estudios.
En contraparte, ha de subrayarse que el pago a los jubilados fue puntual, cada mes, con sensibilidad y visión de Estado.
Nunca en los últimos dos años, los pensionados tuvieron necesidad de lanzarse a las calles y avenidas de Xalapa, con todo y muletas y arrastrando un tanque de oxígeno y en sillas de ruedas para reclamar el legítimo pago luego de treinta años de servicio ininterrumpido.
CORREDORES: “El pendiente fue, sin embargo, que la yunicidad no pagó el retroactivo a los trabajadores que se jubilaron”.
Todo, dice Levet, porque el director del Instituto de Pensiones, el doctor Hilario Barcelata, posición del PRD de Rogelio Franco Castán, secretario General de Gobierno, engañó al gobernador”.
Y lo engañó de la siguiente manera:
En su afán de hacerse sentir útil, Hilario Barcelata simuló un ahorro al IPE y dejó de pagar el retroactivo de una cantidad grande de los jubilados cuyo pago quedó atrasado desde el momento del retiro laboral al momento del primer pago de la pensión (el alta en la nómina) y lo que significó un año de distancia.
Se trata de un pendiente de más de ochocientos millones de pesos.
“Hilario engañó a Miguel Ángel Yunes Linares hasta el día cuando el rezago fue descubierto, de tal manera que el gobernador se molestó”.
Fue cuando el góber azul se reunió con los dirigentes sindicales miembros del Consejo de Administración del IPE y el asunto fue planteado.
BALAUSTRES: Entonces, Hilario Barcelata juró y perjuró al gobernador que el rezago sería cubierto antes de la segunda quincena del mes de noviembre y cuyos días van caminando.
Y más, cuando hacia el mes de junio del año que corre, Levet Gorozpe hizo la observación en una junta del Consejo de Administración y el director del IPE “se hizo pendejo”.
Luego, Yunes ordenaría a Hilario desatorar el pago lo más pronto posible y todavía siguen esperando el retroactivo.
Y más, por lo siguiente:
Si los 800 millones de pesos dejan de pagarse, entonces, Cuitláhuac García Jiménez, el gobernador ya en funciones, enfrentará un triple problema en el mes de diciembre:
Uno, el pago de salarios.
Dos, el pago de aguinaldos y que tanta polémica significara en semanas anteriores entre Yunes y Cuitláhuac y la gente de Cuitláhuac.
Y tres, el pago del retroactivo.
La suma así llegaría a mil 800 millones de pesos, demasiado gravoso y oneroso.
Con todo, dice Levet Gorozpe, el balance del bienio azul de la yunicidad con el IPE y la UV es favorable. Yunes cumplió. Otra cosita es la mentirita de Hilario Barcelata, queda/bien.
