Redacción: Arturo Avendaño
Información: Citlaly Cid
Oaxaca, Oax.- Cerca de 50 personas en situación de calle, muchos de ellos alcohólicos o drogadictos, sobreviven a la pandemia entre la marginación, pobreza y abuso policiaco, en las riveras del Río Atoyac de la ciudad de Oaxaca; fueron desplazados de la Central de Abastos que fue cerrada para prevenir la propagación del COVID-19.
En entrevista para El Piñero, Periodismo y Debate, María NN de 33 años de edad, detalló que tiene cuatro años de vivir en la calle, es adicta a la droga y tiene miedo de dejarla por la “malilla”.
En el campamento donde María habita, ubicado abajo del puente Bicentenario, son cerca de 20 personas y seis perros, el menor de los adictos tiene 17 años de edad y el mayor pasa los 60 años, sacaban dinero acarreando basura en la Central de Abastos, pero con el cierre ahora no tiene donde generar dinero para mantenerse.
María denunció que los elementos de la Policía Municipal de Oaxaca de Juárez los agreden, “los polis ni bien nos ven allá arriba y nos corren, nos pegan, bajan al puente y nos piden dinero, pero no tenemos de dónde sacar. Casi diario quieren pasar a pedir los municipales y si no les damos nos pegan, nos gasean, hasta ellos mismos nos dicen que vayamos a robar”.
María abundó que no han recibido apoyo por parte del gobierno municipal o estatal y que afortunadamente hasta el momento ninguno de los habitantes de su campamento se ha enfermado del COVID-19.
María pide ayuda a la ciudadanía para poder sobrevivir durante esta pandemia, ya sea que le regalen dinero en efectivo, alimentos o agua purificada, la pueden encontrar debajo del puente Bicentenario.