Luis Velázquez
04 de diciembre de 2017
Uno. La profecía se ha cumplido
“Todo se ha consumado”. Todos en la cancha política lo sabían y comentaban. Incluso, la versión llegó a los medios capitalinos. Y hubo quienes, profetas del desastre, pronosticaron el peor de los mundos. Pero el presidente del CDE del PAN, el tuxpeño paisano de César “El tlacuache” Garizurieta”, Pepe Mancha, lo dejó claro:
La única, la única, la única “carta fuerte” del PAN (y también del PRD de Rogelio Franco Castán) para la candidatura a gobernador de 6 años, 2018/2024, es Miguel Ángel Ángel Yunes Márquez, el alcalde que con el “Municipio exitoso” se está metiendo, ya se metió, aspira a meterse en el corazón electoral de Veracruz.
Todos, se insiste, ya lo sabían. Pero una cosita es que hasta los meseros lo supieran y otra, años luz de distancia, que lo exprese sin rodeos ni tapujos el líder estatal del partido fundado por Manuel Gómez Morín, y quien por cierto (sólo para documentar el optimismo) fue empleado de Plutarco Elías Calles, quien impusiera a cuatro presidentes de la república, ah, pero también a sus dos hijos en cargos públicos, desde diputados federales y gobernador hasta ministros de Estado, además de los negocios (lícitos e ilícitos) a la sombra del poder.
El primogénito del góber azul está, pues, oficializado.
Desde antes lo decía el secretario de Educación, el experto carcelero, Enrique Pérez Rodríguez:
“Yo aquí estoy para cuajar el proyecto político” del hijo de mi jefe.
La profecía se ha cumplido.
Dos. “Cortó rabo y orejas”
El destape oficializado fue el mismo día, 30 de noviembre, cuando el gobernador Yunes compareció en el Congreso local por su primer informe.
El periódico Notiver tituló el hecho de la siguiente manera:
“Moles. Corta rabo y orejas”.
Y la foto de un Yunes azul con la sonrisa en los ojos, radiante, feliz. “Soy feliz” ha dicho desde el año anterior cuando derrotara al PRI y a MORENA en las urnas.
El primogénito también cortó el mismo día “rabo y orejas”.
Pepe Mancha, beneficiado en la compañía constructora que tenía (¿o tiene?) con el panista Víctor Serralde para construir los llamados “Pisos firmes” en el Felipismo con Abel Cuevas de delegado federal de la secretaría de Desarrollo Social (el Abel Cuevas Oficial Mayor de la SEV), destapó así al hijo mayor del Yunes azul:
“Hay diversas corrientes al interior del PAN, un gran número de militantes” que respaldan a Yunes Márquez.
Y lanzó su espada en prenda:
“No es una imposición, porque no es una postura del gobernador. En todo caso es el consejo estatal que está compuesto por 108 militantes de todo el estado y la decisión está en manos de la comisión estatal”.
108 militantes, entonces, que si el PAN, en alianza con el PRD, ganan la silla embrujada del palacio de Xalapa el año entrante subirán al tren de la revolución azul durante los próximos seis años.
Y quien, dice la historia, tiene a un gobernador de amigo, de aliado, de cómplice y de socio, entonces, en automático “se saca la lotería”.
Palabra de Dios.
Tres. Estrategia yunista
Por eso, y desde hace ratito la estrategia yunista:
A: El “Municipio exitoso” como justificante para andar en precampaña electoral de norte a sur y de este a oeste de Veracruz.
B: El aparato gubernamental (con todo, absolutamente) al servicio del proyecto político familiar y que ya tuviera resultado con el alcalde jarocho electo.
C: El encarcelamiento de los duartistas para ultra contra súper reposicionarse en el corazón electoral.
D: La operación “Niño Pípila” para “la estampida de los búfalos” priistas y morenistas afiliados al PAN, como son las elites más renombrados con y alrededor de los morenistas Sebastián Reyes y Mirian Judith González Sheridan, y las priistas Regina Vázquez Saut y Basilio Picazo.
E: Las cúpulas tricolores arrodilladas y azorrilladas con un bajo perfil para evitar dormir en el penal de Pacho Viejo, algunas de las cuales, por ejemplo, Gabriel Deantes Ramos, el ideólogo electoral de Javier Duarte, al servicio de la yunicidad según el trascendido.
F: El operativo de “Veracruz Comienza Contigo” para otorgar despensas (ya llevan trescientas mil) y amarrar los votos de los pobres y de “los pobres entre los pobres”, a cargo de la revelación yunista, Indira Rosales San Román, secretaria de Desarrollo Social.
G: Los amarres del gobernador en el altiplano tanto en la cúpula del PAN como del PRD. Incluso, el cabildeo con Dante Delgado Rannauro, por si las dudas sobrevive el Frente Ciudadano por México.
Etcétera.
Cuatro. Huestes panistas amarradas
Las elites panistas y perredistas están planchadas.
Rogelio Franco Castán con el cargo de secretario General de Gobierno y sus prebendas. Además, cabildeando la candidatura al Senado y que disputa con la diputada local, Jazmín Copete.
Julen Rementería, secretario de Infraestructura y Obra Pública, destapado también por el líder azul, Pepe Mancha, el mismo día del destape oficializado de Yunes Márquez. Además, claro, de la curul local para su hijo Bingen. Con Yunes, amarradas las huestes panistas de Veracruz.
Joaquín Guzmán Avilés, secretario de Desarrollo Agropecuario, soñando con la candidatura senatorial. Su hermana, senadora en funciones y ex diputada local. Su hermano, alcalde electo. Hijos y sobrinos, con cargos públicos. Con “El chapito”, controladas las huestes de Tantoyuca y alrededores, y en donde cohabita con su amigo, el cacique huasteco multicolor, Ricardo García Guzmán, también amarrado.
Germán Yescas, subsecretario de Desarrollo Agropecuario para amarrar a las elites azules de la región de Isla, donde otro hijo preclaro, el priista Érick Lagos Hernández, está controlado vía Rogelio Franco, quien en el duartazgo y el fidelato viviera “en la plenitud del pinche poder”.
La primera parte de la telenovela política “se ha consumado”.
Allá MORENA y el PRI si se dejan “comer el mandado”, pues el nepotismo tiene vida saludable en Veracruz.
El primero de enero unos treinta alcaldes, quizá más, tomarán posesión, todos, esposas, hijos, hermanos, tíos y primos de los presidentes municipales en funciones.