Luis Velázquez
Veracruz.-12 de julio de 2017
Nunca el autoritarismo de un gobernador en la plenitud, como ahora. 7 meses y doce días después, siete políticos y un líder campesinos presos. Y de ñapa, un dirigente obrero. Más 67 con denuncias penales.
Ni siquiera, vaya, un gobernador en funciones del resto del país podría, digamos, compararse.
Más aún, al momento, tres ex gobernadores presos que ya lleva. Dante Delgado, Javier Duarte y Flavino Ríos.
Y si el tiempo le alcanza, quizá Fidel Herrera Beltrán, a quien trae atravesado desde hace más de veinte años.
La máxima popular está cumplida. El que manda… manda.
El góber azul es la estrella del momento. Así es y será durante dos años. Y que nadie se atraviesa para opacar, digamos, su luz. Ni siquiera, vaya, un rayito de luz.
Y si jamás un político comparte el poder, menos el góber de Veracruz. Es el poder absoluto. El poder total.
Todo gravita a su alrededor. El culto a la personalidad en su máximo nivel. Yo mando, y si me equivoco, vuelvo a mandar.
María Georgina Domínguez Colio quiso reaparecer en el escenario mediático con una columna periodística, “Razón de Estado”, y terminó en el penal de Pacho Viejo.
Juan Antonio Nemi Dib se paseó en Xalapa al grito de que “quien nada teme, nada debe” y le giraron orden de aprehensión y ni modo, se amparó y a ver cuánto le dura el gusto.
Moisés Mansur Cisneyros lo plantó en dos ocasiones y en una tercera le dijo que encarcelaría a su esposa y se dobló y cayó en el vómito negro.
Según versiones, el mismo Fidel Herrera Beltrán ha resumido el tiempo azul: es hora, dijo, de sumirse.
Los duartistas, todos, azorrillados, sumisos y sumisos, para evitar, digamos, dormir en Pacho Viejo.
Otros, han caído, ni duda cabe, en la traición y la deslealtad al preso de Guatemala. Por eso, y por lo pronto, parecen intocados e intocables.
Pero al mismo tiempo, y considerando el temperamento ardiente del góber azul, nadie dudaría que está jugando con el tiempo político.
Al ratito los necesitará para seguir levantando expectativas, digamos, de cara a las cinco elecciones del año entrante, y ni modo, más políticos terminarán en el penal de Pacho Viejo, su penal favorito.
ABUSOS DEL PODER
El que manda… manda.
La diputada local, panista Cinthya Lobato Calderón, denunció que el coordinador de la bancada panista en la LXIV Legislatura, He Man Sergio Hernández Hernández, y su operador, Carlos Fuentes Urrutia, utilizan el dinero público para borracheras, drogas, mujeres y orgías, y nada pasó.
El ex panista y empresario, Alejandro Cosío, denunció irregularidades en la licitaciones de la secretaría de Salud y lo aplacaron.
Ene número de veces el que manda… ha defendido con todo al Fiscal y ninguna denuncia, acusación, señalamiento de las madres del Solecito ha prosperado.
Ha trascendido un fraude con terrenos ejidales en el poblado de Tenenexpan, municipio de Manlio Fabio Altamirano, donde suplantaron documentos en materia agraria y que significa un desliz del secretario General de Gobierno, Rogelio Franco Castán, y en donde está metido el padre del Fiscal Jorge Winckler, notario público en Oaxaca, y lo mantienen con bajo perfil.
Y con bajo perfil, no obstante que el Archivo de Notarías giró un oficio a los notarios advirtiendo de los riesgos de escriturar esos terrenos ejidales (en total unas sesenta hectáreas) a los nuevos dueños, entre ellas, empresas de alimentos como Bachoco y Caroll.
Y aun cuando en primera instancia significa frustrar la consumación del fraude y beneficiar a los campesinos, el abuso y exceso del poder, donde están o estaría involucrados Franco Castán y Jorge Wínckler, sigue vigente y ha de significar un manotazo del que manda.
PRÓCERES DE LA HONESTIDAD
El que manda… manda.
Tan es así que, por ejemplo, las elites políticas que pertenecieron al duartismo están asombradas con el cambio camaleónico del titular del ORFIS, Órgano de Fiscalización Superior, Lorenzo Antonio Portilla, de que en el sexenio anterior todo lo aprobó y ahora “tirado al piso” azul… todo lo denuncia, prócer de la honestidad.
Otro caso insólito es el del cacique y contador Ricardo García Guzmán, Contralor en el duartazgo y de hecho y derecho el mandamás del sexto secretario de Finanzas y Planeación, Antonio Gómez Pelegrín, él mismito que comprara una manzana completa en fraccionamiento residencial para la escuela privada de una de sus hijas y que sigue paseando tan campante, como si nada.
Fue detenido el subdirector administrativo de la Comisión de Salud de la SS, Isaías Alonso Salas, e internado en el penal de Pacho Viejo, pero en cambio, al momento, el director administrativo, jefe de jefes, contador de la absoluta confianza de Duarte, Ricardo Sandoval, intocado e intocable, tan ligado a Javier Duarte y Fidel Herrera Beltrán.
Tomás Ruiz González, titular de SEFIPLAN y la SIOP, el más intocado de todos, quizá, en nombre de los viejos tiempos de cuando la profe Elba Esther Gordillo tenía a su alrededor a Tomás Ruiz, Roberto Campa Cifrián, Rafael Moreno Valle y Miguel Ángel Yunes Linares, entre otros.
Y desde luego, la rara y extraña fuga del ex subsecretario y secretario de Finanzas y Planeación, Carlos Aguirre Morales.
He ahí, entonces, el ejercicio del poder absoluto.