Luis Velázquez
Veracruz.- Vicente Leñero decía que la mejor manera de describir una riqueza es describiendo la pobreza. Así, y por ejemplo, los grandes contrastes en Veracruz.
En un lado del ring, seis de cada 10 habitantes en la pobreza y la miseria según el CONEVAL.
Medio millón de paisanos sólo hacen dos comidas al día.
Las ciudades de Veracruz, Xalapa y Banderilla, en los tres primeros lugares de la jodidez social y económica.
Por vez primera, el estado convertido en una entidad federativa migrante.
Veracruz, el productor y exportador número uno de trabajadoras sexuales en el país y que han de vender el cuerpo para llevar la torta a casa.
Un millón de indígenas, dos millones de campesinos y tres millones de obreros.
800 mil ancianos de 60 años de edad en adelante, de los cuales, el 80, 85 por ciento carecen de seguridad social.
Y en el otro lado del ring, la riqueza plena. Los pudientes. Los ricos. La clase media que sueña con darse lujitos de clase alta.
Y lo peor, con cargo al erario.
Entre ellos, algunos, muchos de los diputados de la LXIV Legislatura.
El caso de He Man Sergio Hernández Hernández, coordinador de la bancada panista que según la diputada Cinthya Lobato Calderón, gastaba (o gasta) el erario en “borracheras, drogas, mujeres y orgías”.
Ahora, un nuevo agravio de He Man, pues con cargo al erario, y en medio de la austeridad y crisis financiera, presume el gimnasio y sillones con sistema de masaje, y sala de descanso que se instalaron en el Palacio Legislativo (La Jornada Veracruz, Jair García, primero de octubre, 2017).
¡Hosanna, hosanna!
Y más cuando cada uno de los 50 diputados locales percibe cerca de 250 mil pesos mensuales, más viáticos, más gastos de representación, más dinerito para, digamos, la asesoría.
Ninguna diferencia, pues, entre la Legislatura actual y la anterior.
La edad mental de He Man expresada a plenitud en el gimnasio.
En un lado de la cancha, la pobreza, la miseria, la jodidez, el desempleo, el subempleo, los salarios de hambre, la migración, la prostitución como forma de vida, y la pésima calidad educativa, de salud y de seguridad.
Y en el otro lado del carril, He Man con sus orgías y gimnasio, además, claro, de su cumpleaños imperial y faraónico.
He ahí, pues, la grandeza política de los estadistas que gobiernan Veracruz.
MIELES DEL PODER
A propósito del gimnasio, ubicado en las instalaciones del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Poder Legislativo, en la calle Gabriel Garzón, casi esquina Pípila, a dos cuadras del Congreso, La Jornada publica foto descomunal.
En el primer plano, He Man Sergio Hernández (tanta polémica creada a su alrededor con la Junta de Coordinación Política) está con las manos entrelazadas, vestido con playera o camisola de manga larga (para el fríito) con rayas negras de norte a sur y pantalón azul, las piernas abiertas.
He Man mira asombrado y feliz a una persona (¿será diputado?) trepado en una caminadora eléctrica, digamos, haciendo ejercicio, probando y comprobando las mieles del poder.
A un lado, otra persona, vestida toda de negra (¿también será diputado?) actúa como notario público y da fe.
A los lejos, las siluetas de dos personas más, indistinguibles.
Y alrededor, el gimnasio para que los llamados en la antigua Grecia “conscriptos de la patria” se relajen si están estresados y se den un masajito y hagan ejercicio en sus horas libres.
Incluso, y como escribió el reportero Jair García, para que así se ahorren el pago de una membresía en un gimnasio particular.
El diputado del PANAL, Vicente Benítez, cuando era Oficial Mayor de Javier Duarte en la secretaría de Educación, ganó fama como “El profe de las tangas” que así ponía, se dijo, a las maestras aspirantes a una plaza para el examen correspondiente.
Jorge Alejandro Carvallo Delfín, en su tiempo de diputado local, se aplicó una liposucción porque le era imposible seguir luchando contra la panza y antes se operó su naricita para lucir atractivo.
En su tiempo de subsecretario General de Gobierno de Javier Duarte, Érick Lagos Hernández, se construyó un túnel de su oficina al estacionamiento del palacio para evitar la mirada y el saludo de los ajenos y extraños, y a la mitad del pasillo levantó una oficina donde siempre estaban tres edecanes a sus órdenes.
Ahora, He Man, con su frivolidad total y absoluta. “Borracheras, drogas, mujeres y orgías” y gimnasio y sillones con sistema de masaje.
Los metrosexuales de Javier Duarte. Los metrosexuales del PAN, dice el politólogo Carlos Ronzón Verónica.
“AQUÍ NO PASA NADA” Y TODO SIGUE IGUAL
Pepe Mancha, presidente del CDE del PAN, es el padrino de He Man, y quien fue su carga-maletas.
La madurez mental y cívica de He Man apenas, apenitas le alcanza para tal frivolidad. Pero…
Pero, caray, resulta irónico, extraño, confuso, raro y contradictorio que su mentor le permita a He Man sus caprichos y vanidad y egolatría.
Y más, cuando Cinthya Lobato Calderón fue lacónica, concreta y específica denunciando que el coordinador de la bancada panista utiliza el erario para sus francachelas, y sin que nada, absolutamente nada pasara.
Fue el estilo personal de ejercer el poder y gobernar de Javier Duarte y los suyos, y ahora, once de ellos están presos, otros prófugos, otros amparados y otros con el más bajo perfil para librar la justicia azul.
He ahí los grandes valores y principios de los políticos que se van y de quienes llegan…