Luis Velázquez
Veracruz.- Pepe Yunes Zorrilla y Héctor Yunes Landa hacen “el uno y el dos”. O “el dos y el uno”. Y/o en todo caso, dice el politólogo Ramón Benítez, constituyen unidad. Más aún: desde el año 2016, mejor dicho, desde antes, traen un pacto. Fue aquel para la gubernatura. En el primer round, perdió Héctor. Ahora, va Pepe.
Pepe es el candidato priista al trono imperial y faraónico. Y de hecho y derecho, y más allá de que Héctor fue nombrado coordinador de José Antonio Meade en Veracruz, es uno de los operadores políticos de Pepe.
Su fuerte está lejos de la pasarela. Su eficiencia está, igual que el topo de Carlos Marx, por abajo del puente. En el suelo. Mejor aún, en el subsuelo político.
Igual que Penélope, teje y desteje. Cabildea. Dialoga. Acuerda. Suma en vez de restar.
Y en la operación política electoral se mueve de norte a sur y de este a oeste. En corto. Sin testigos. En todo caso, con uno o dos testigos, siempre y cuando sea inevitable. Pero de preferencia, solitos, en la cara a cara, frente a frente.
EL OPERADOR POLÍTICO
Desde luego, buscó la nominación a gobernador una ocasión más. Pero en el camino de la vida hay vientos favorables y también huracanados.
Y en esta jugada ganó Pepe. El otro Pepe, Meade, se impuso. Incluso, según las versiones, Meade se lo comunicó en forma directa a Pepe. Luego, y de acuerdo con el ritual priista, el presidente Enrique Peña Nieto lo recibió.
Y Pepe estaría en Los Pinos unos 45 minutos. Sin hablar de “la inmortalidad del cangrejo”, claro, sino de la política en Veracruz.
Y a partir de ahí, Héctor se disciplinó. Sin alharacas ni amenazas de que se lanzaría por la libre. O por otro partido.
Es más, y según el politólogo Ramón Benítez, hasta lo advirtió a quien correspondía: Si sale Pepe candidato me disciplinó. Si sale otro, no respondo.
Ahora, está en su cancha. Opera, cierto, por Meade, pero las órdenes a su ultra contra súper gabinete es concreta y específica: también empuja, y con la misma intensidad, la carreta por Pepe Yunes.
Todavía más: de acuerdo con las versiones del maestro en Ciencia Política, todos los días se comunican. Ya sea por Twitter, por mensaje, por teléfono. Un día, por ejemplo, se hablaron catorce ocasiones.
Intenso, Héctor le dijo:
“Si sientes que me excedo me dices”.
BUENA VIBRA, MEJOR KARMA
No son familia, pero Pepe llama tío a Héctor.
Y Pepe y Héctor se han reunido en privado.
Días anteriores, comieron a nivel matrimonial en la casa de Héctor en Xalapa.
Se consultan temas, asuntos, la agenda.
Por ejemplo, cuando inicie la campaña electoral el próximo domingo 29 de abril, el gabinete estelar que ahora se llama “Meade” será ampliado (tiempo electoral) a “Meade y Pepe Yunes”.
Y el priismo que está con Héctor ahora para operar por Meade también estará con Yunes Zorrilla.
Y será la gran jornada cívica en el territorio jarocho.
Y más ahora cuando de acuerdo con la encuesta oficial en el otro lado del carril, Miguel Ángel Yunes Márquez aumentó unos puntitos, pero también Pepe Yunes sigue escalando, en tanto Cuitláhuac García se ha estacionado.
Es decir, Pepe está creciendo. Y aun cuando el desenlace estelar se conocerá hasta la noche del primero de julio, el repunte es alentador.
Y más, cuando con una buena aceitada al aparato partidista la expectativa se agiganta, pues el PRI es el único partido que tiene, probado y comprobado, una gran operación electoral, como ningún otro, digan lo que digan.
DERROTAR A YUNES, LA OBSESIÓN
El politólogo Ramón Benítez dice que el factor Héctor Yunes es clave en la elección 2018.
A: Nadie como él conoce al revés y al derecho al gobernador Yunes.
B: Ya fue su contendiente y sabe de sus aciertos y debilidades.
C: También conoce los temas que enardecen a Miguel Ángel Yunes Linares. Y sabe el momento para apretar el botón nuclear, el botón político, el botón mediático, el botón social.
D: Entre Héctor y Pepe han caminado Veracruz ene número de ocasiones y conocen los grupos municipales y regionales y las fortalezas y amenazas del partido tricolor en cada demarcación.
E: Héctor trae el palpitar del día y de la noche política. Segundo a segundo los cronometra. Y reacciona de inmediato.
F: Sostiene las relaciones políticas en el altiplano. Un pie aquí y otro pie allá y complementa uno al otro.
G: La candidatura de Pepe Yunes es su candidatura. En todo caso y por si alguna duda existiera, el triunfo de Pepe es la derrota del gobernador Yunes.
Y ninguna obsesiva obsesión late tan intensa en las neuronas de Héctor como derrotar en las urnas a su exprimo.