Luis Velázquez
16 de marzo de 2019
La mitad del país y la otra mitad saben que Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación de Enrique Peña Nieto, perdió la candidatura presidencial del PRI.
También saben que Osorio Chong es senador de la república por la vía pluri, pues si lanzado hubiera sido por la vía uni, la derrota estaba pronosticada.
De igual maneras saben que Osorio Chong es jefe de la bancada senatorial… pero solo de 13, 14 senadores de un total de 128, pues el primero de julio del año anterior perdieron todo, absolutamente todo.
Saben de igual modo que las elites priistas están mirando la tempestad huracanada y ninguno se arrodilla y repiten al viejo estilo del partido absoluto los mismos males de la caja de Pandora que los llevó al fondo del precipicio.
Entre ellos, Osorio Chong.
Y Osorio Chong, porque desde el Senado estaría metiendo mano en la elección del presidente del CDE del PRI Veracruz a través de su diputada federal, Anilú Ingram Vallines, según se afirma en la cancha tricolor.
La fuerza política y social de Anilú ante Osorio Chong ante está fuera de duda, ratificada incluso, de cara a la elección del nuevo dirigente tricolor.
Su candidato es Marlon Ramírez, regidor del alcalde panista, Fernando Yunes Márquez.
Y en su cartera trae, entre otros, a líderes de las centrales campesinas y obreras del tricolor.
El centralazo de Osorio Chong para imponer a Marlon Ramírez en el CDE del PRI beneficiaría, observan en el carril rojo, al panista Miguel Ángel Yunes Linares, antiguo amigo de Osorio Chong, desde el tiempo, quizá, cuando fueran diputados federales a la sombra de la profe Elba Esther Gordillo, encarcelada por Enrique Peña Nieto y liberada con Andrés Manuel López Obrador.
LAS BATALLAS DEL YUNES AZUL
Yunes Linares sigue ganando batallas políticas y partidistas de aquí a la elección, primero, de presidentes municipales y diputados locales y federales en el año 2021, y de gobernador en el año 2024.
Y más, porque ha dicho que vivirá 110 años, tiempo suficiente para redondear su proyecto político.
Por ejemplo:
Uno. Con tanto calambre a Fidel Herrera Beltrán, el Yunes azul lo enfermó con una parálisis que lo ha mantenido en silla de ruedas.
Dos. Frustró la intentona del gobernador para destituir a su Fiscal carnal con juicio político en la LXV Legislatura.
Tres. Trae el PAN y todo indica su Pepe Mancha es inamovible con todo y estar impugnado.
Cuatro. Trae al PRD de Rogelio Franco Castán, su secretario General de Gobierno.
Cinco. Metió a su primogénito en la lista privilegiada de los miembros del consejo nacional del CEN del PAN.
Seis. Opera para adueñarse del CDE del PRI a través de Marlon Ramírez, considerando en la cancha tricolor como el regidor priista más azul del Golfo de México, jugada de varias bandas.
Siete. Desde ahora, el Yunes azul está planeando la conquista del poder edilicio con los 212 presidentes municipales y diputados locales y federales a disputarse en el año 2021.
Ocho. En su abono operan los desaciertos del gobernador de MORENA y AMLO y que, claro, de continuar nadie duda de que solo terminaría, digamos, su primer año en el trono imperial y faraónico.
Pero al mismo tiempo, en el primer minuto del mes de diciembre del año 2019, quizá hacia navidad, acaso el día de reyes como dice el clásico del palacio de Xalapa, sería removido de la gubernatura y enviado, digamos, de embajador de México a las Islas Fidji.
O a Alemania, donde antes cursara un posgrado, dice, cuya tesis consistió en inventar unos misiles manejados a control remoto y que mucho desearía Donald Trump para actualizarse.
Marlon Ramírez en el CDE del PRI trabajaría sin ninguna duda para Yunes Linares, mejor dicho, para los Yunes azules.
EL PRI DE YUNES LINARES
El centralazo priista de Osorio Chong va caminando.
Marlon, el regidor azulado, camina el estado (más grande que Honduras, Salvador, Guatemala y Nicaragua) con paso firme, dueño del destino partidista.
Y de lograr el objetivo, entonces, el PRI será el PRI de Yunes Linares, a menos, claro, que en un acto de temeridad y audacia repitiera a los Yunes azules la misma dosis con que traicionó a Raúl Díaz Diez cuando la disputa por la candidatura a la presidencia municipal y regiduría en el año 2017.
Osorio Chong perdió la candidatura presidencial, pero quiere adueñarse del PRI en Veracruz, antes, mucho antes quizá que el CDE del PRI de Hidalgo.
Claro, nadie descartaría que estuvieran utilizando el nombre del ex secretario de Gobernación…